Vocho abollado
Por si faltaba otro flanco para confirmar la reconciliación de las autoridades de la Universidad Autónoma de Sinaloa con los poderes del Estado, ayer dio un mal show en la tribuna del Congreso del Estado el Diputado Ambrocio Chávez Chávez.
Aunque al desbigotado Rector Jesús Madueña Molina le basta con las amistades de Palacio de Gobierno, tampoco le vendrá mal que un representante del Poder Legislativo, y presidente de la Comisión de Hacienda encargada de dictaminar y reasignar presupuestos, también le extienda la mano.
Y de parte del llamado “Vocho” Chávez, es otra manera de mantenerse en el foco público como uno de los morenistas más movidos dentro del Congreso del Estado, aunque igual sin el mismo protagonismo que en la Legislatura pasada.
Curioso resulta, pues, que esta muestra de respaldo de la facción mayoritaria hacia el reconciliado Rector de la UAS provenga de Ambrocio Chávez, y no de la cara visible y estandarte de Morena en el Legislativo, que es la doctora María Teresa Guerra Ochoa.
A decir verdad, la Diputada Tere Guerra está más ocupada en sacar las papas del fuego y poniendo la cara por la bancada del oficialismo ante la crisis de seguridad, que en participar en posicionamientos como los de la UAS.
Algo que no podemos dejar pasar de la expresión del Diputado Ambrocio Chávez es que hizo un llamado a Rocha Moya en el tema de la Universidad, porque aunque luego no era de los más incisivos cuando estaba a todo dar el conflicto Gobierno-UAS, sí soltó alguna pedrada interesante que por supuesto aquí no olvidamos.
Como si fuera un “buenos días”, en julio del 2023 Ambrocio Chávez denunció que en la Universidad Autónoma de Sinaloa había una “mafia enquistada”, con funcionarios a las que calificó como poca autoridad para tan grande institución como lo es la casa de estudios.
La cosa no es si el “Vocho” Chávez tenía o no razón con aquellas expresiones, sino que le duraron lo mismo que el agua entre las manos. Como ya comentamos, ayer 17 de junio de 2025, casi dos años después de aquellas aseveraciones, se deshizo en elogios hacia el Rector Madueña y llamó a sus compañeras y compañeros parlamentarios a siempre apoyar a la UAS.
Por ahí se aventó la mítica de “siempre hay que estar juntos” que suelta la chaviza, por si no quedaba claro que lo que quería era enviarle una solicitud de amistad a Madueña Molina.
De por sí resultó ridículo el desenlace que tuvieron los procesos penales por presunta corrupción contra la pandilla de la UAS, dan hasta “ñáñaras” ver y escuchar muestras de una reconciliación entre autoridades, que a nadie se le escapa que está ligada al desafortunado asesinato del ex Rector Héctor Melesio Cuén Ojeda.
Y ayer, lo de Ambrocio Chávez fue otra de estas exhibiciones penosas sobre ese tema. Luego le siguió el Diputado Sergio “El Cholo” Torres, que no es precisamente muy amigo de Jesús Madueña Molina, a seguirle agitando el nido al águila.
Hablando del Diputado emecista, parece que se acerca otra ave que hace “Pío” y por ahí puede quitarle la dirigencia estatal de Movimiento Ciudadano, o algo así han dicho las malas lenguas de radiopasillo.
Ya se presentó el nuevo Secretario
Después del anuncio que se hiciera sobre el nuevo titular de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal de Culiacán, ayer ya se presentó al Coronel Alejandro Bravo Martínez en su lugar de trabajo.
No es una sorpresa que se haya decidido poner en ese lugar a alguien con el perfil militar, pues hay antecedentes y una lógica para ello.Seguro que la mayor lógica es que todos suponemos que el nivel de corrupción en la misma corporación hace necesario evitar que sea alguien de la misma que sea el que la dirija, y peor, en medio de una crisis de seguridad como la que estamos atravesando, con el crimen organizado inmiscuido en casi todo.
El anuncio fue hecho por el Ayuntamiento de Culiacán, y señaló que el objetivo de este movimiento es fortalecer la coordinación con las fuerzas federales y mejorar la estrategia de seguridad en el municipio.
Lo de las sospechas de corrupción no son señalamientos a la ligera o sin evidencia, pues hay que recordar que justo la corporación de la Policía Municipal de Culiacán ha atravesado decenas de casos avergonzantes, como las decenas de asesinatos y desapariciones sin respuesta de la Fiscalía General del Estado de sus mandos en los últimos 10 años, la intervención y desarme del Ejército Mexicano por sus sospechas de involucrarse en operativos de reacción y en el último caso, acusados de proteger delincuentes heridos que luego se dieron a la fuga.
Y aunque el Alcalde de Culiacán, Juan de Dios Gámez Mendívil, le tomó la protesta, sabemos que no será a él a quien le rinda cuentas el Coronel Alejandro Bravo Martínez, pues se trata del titular de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal de Culiacán, la capital del Estado, como ha ocurrido en los últimos tres sexenios.
Según el Ayuntamiento, la decisión de incluir a Bravo Martínez es para tener una relación más estrecha con las fuerzas federales, particularmente con la Secretaría de la Defensa Nacional, a fin de construir un despliegue más eficiente y articulado en beneficio de la seguridad pública.
Ojalá que esto no sea algo que se quede sólo para la foto y que de verdad haya un buen involucramiento del Municipio y su gobierno, porque liderazgos es lo que nos hace falta.
Aprieta el Ejército
Y los que de plano están cambiando y fuerte el tonito son las Fuerzas Armadas; en lo que va de la semana y desde la visita del General Trevilla y el Secretario García Harfuch a Sinaloa, se nota cómo han intensificado la presencia en la ciudad capital y el centro del estado.
Lo que evidencia también que ya se habían ido un montón de elementos y que puede servir para entender por qué en mayo y junio los asesinatos subieron otra vez a niveles de octubre pasado.
Ahora todos los días nos están reportando detenciones de delincuentes, decomisos y aseguramientos de armas y vehículos; así como operativos más coordinados y grandes, como el que vimos ayer en el sector Los Ángeles y que habría dejado la liberación de al menos tres personas privadas de la libertad y la detención de otros dos.
Vale reconocerlo, aunque lo tomamos con muchísima reserva pues luego estos refuerzos han resultado ser más para la foto que para una verdadera contención sostenible.
Ojalá que al tiempo que el Gobierno del Estado se coordina con las Fuerzas Armadas y el Gobierno federal para hacerle frente a la emergencia violenta, empezara también a articular un verdadero proyecto (con tiempo y dinero) de reconstrucción de las policías locales que cada vez quedan más a la deriva y a merced del crimen organizado.
Sirva recordar que ya estamos a nada de 40 agentes de seguridad asesinados en esta guerra.De ese modo no nos quedaríamos chiflando en la loma cada vez que los militares se van a atender otras regiones del País mientras que los criminales aprovechan el vacío.
Estamos convencidos que ese sería uno de los legados más perdurables que Rocha Moya podría dejar como gobernador en medio de esta coyuntura que marcará su sexenio: construir los cimientos de una policía decente. La pregunta es si quiere.