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"BUHEDERA"

"Calaveritas"

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BUHEDERA
02/11/2017 22:53

     
     
     
     
    Esta tradición del Día de Muertos es el antecedente mexicano del muuuuuuy posterior Roast gringo que aquí ha popularizado Héctor Suárez Gomís. http://www.saberia.com/que-es-un-roast/  “El roast es una de las tradiciones más clásicas de la pantalla chica. Típicamente estadounidense, este brindis humorístico tiene como protagonista a una figura pública que es denostada e insultada con ‘honor’ por sus compañeros, amigos y familiares. Con mucha mala leche e ironía pero también con afecto y cariño. El protagonista -el roastee- deberá tomarse las cosas con humor, aguantando con una sonrisa de oreja a oreja tanto historias -verdaderas o falsas- como tributos. Recibir un roast es, al fin y al cabo, todo un honor, similar a que te imiten en un programa de humor. La traducción literal de roast es ‘asado’, aunque en su concepción original es un juego de palabras que sirve como antónimo de toast, que significa tanto ‘tostar’ como ‘brindis’. El primer roast oficial fue celebrado en 1949 y estuvo dedicado al actor y cantante francés Maurice Chevalier, aunque antes las celebridades ya habían sido parodiadas en comidas y eventos informales”. Reproduzco estas calaveritas no en engorda del ego, sino como tributo a la amistad.
     
    Fer Amerlinck
    Va mi calavera farberiana, en forma de soneto: 
    Directo apunta la muerte al corazón / De la tertulia del María Cristina; / Y con fría voz declara “Aquí culmina / Tu linda teoría de la conspiración”.
    Enamorados de la conversación / Callaron al ver la repentina / Actuación de esa presencia femenina; / ¡Ya, contertulios, llegó la depresión!
    Sí se caló Guillermo su sombrero / Para atravesar el puente de plata / Que será pa’ México real dinero / Gracias a la gestión (¡cómo dio lata!) / De quien fue amigo a más de caballero, / Buen escritor y de visión sensata.
     
    Erny Sánchez
    Nuestro dilecto Guillermo Fárber se ha ganado a pulso estas calaveritas con esos tsunamis de letras que nos regala a diario y que tanto disfrutamos.
    De tantos pinchis Sarcasmos / a la Parca le cayó gordo / hasta que al fin se lo llevó / y se acabó todo el morbo.
    La Huesuda lo tenía advertido / ya “déjate de pendejadas” / nos tienes con temor a todos / con tus ideas y pavadas.
    Sus lectores están muy tristes. / Se les fue su escritor favorito, / lo lloran con sentimiento puro/ aunque sea por un ratito.
    Ya descansa Fárber / en el panteón alemán. / Fue el que le quedó más rami schartzcerca / de su natal Mazatlán.
    Los mazatlecos ahora dicen / Fárber se hizo chilango / por eso murió en destierro / y este drama huele a tango.
    Descansa en paz, Quijote de la pluma, / gracias por tus atinados textos, /
    disfrutamos mucho leerlos / con bonhomía y sin pretextos.
     
    Rami Schwartz
    Guillermo se fue de este mundo, al que consideraba inmundo / Sin que se cumpliera ninguna de sus profecías. / Ni el imperio desplomó, ni el dólar se esfumó, ni la plata brilló, ni el Peje ganó. / ¡Ah! Qué clase de Mesías...
    Pero eso sí, nos hizo reír a carcajadas / Escribiendo tantas pendejadas. / Su sentido del humor siempre ácido, / Leerlo era siempre plácido.
    Desde su tribuna sin descanso / Denunció fechorías con sarcasmo. / A los políticos les daba espasmos / A sus lectores, orgasmos.
    Pero llegó la huesuda y sin preguntar / Lo mandó directo a descansar / A ese hombre que nació en Mazatlán y murió en Aztlán: / De la tierra prometida, a la tierra podrida.
    Por eso, aunque murió en invierno, / No hubo necesidad de mandarlo al infierno. / Suficiente había sido su penitencia / De vivir en esta inmundencia.
    Ahora, al igual que su judío bisabuelo, / descansa en paz en el subsuelo / Ese hombre valiente y fuerte que perdió un hijo / (No imagino nada tan canijo) / Lo lloraré y recordaré siempre / Pues para mí fue como un hermano, / Guillermo Fárber Bejarano.