"¿Constitución moral?"

Buenos días estimado lector. ¿Qué entiende cuando escucha lo siguiente: ¿Constitución moral? por lo menos a mí no me queda claro y debo de reconocer que jamás había pensado en ese concepto hasta que nuestro Presidente electo lo señaló, por lo que creo conveniente que abundemos en este tema y para hacerlo nos vayamos por partes, como ya hemos señalado en otras colaboraciones una Constitución debe fundar competencias, procurar regular la composición y conformación de los órganos de tal modo que corresponda al carácter de su cometido, garantizando así la adecuada sanción de sus funciones, debe coordinar las diferentes funciones una con otra, tratando de conseguir así que las mismas se complementen mutuamente, que la cooperación, la responsabilidad y el control queden asegurados, evitándose un abuso de competencias. 

 

¿Alguna duda?, por si aún existe, digamos que la Constitución debe de ser nuestra norma máxima, es más si fuera una banda, sería El Recodo por ser esta la madre de todas las bandas, ya que nuestra Constitución para no enredarnos más debe de ser la madre de todas nuestras leyes, (aunque después encontremos que tiene hermanas que se llaman tratados internaciones) pero dejémoslo en que nuestra Constitución es el orden jurídico fundamental de una comunidad. Pero ¿y la moral? pues depende a quien le preguntes, está la definición “clásica” de Gonzalo N. Santos (Cacique de la Huasteca Potosina y miembro fundador del Partido Nacional Revolucionario) quien dijo: “la moral era un árbol que da moras o vale para una chin**da”, o la de la Real Academia Española que señala que como adjetivo es “perteneciente o relativo a las acciones de las personas, desde el punto de vista de su obrar en relación con el bien o el mal y en función de su vida individual y, sobre todo, colectiva”. 

 

Quedémonos con esta última definición, aunque sea mucho más popular la primera, y entendamos que la moralidad tiene que ver con las acciones de las personas de manera individual o colectiva desde el punto de vista en relación con el bien o con el mal y no en su relación de legal o ilegal. 

 

Qué implicaría señalar que algo inmoral sea ilegal, bueno pues desde algo tan sencillo como vender algo que cause daño, porque no todo lo que se vende que causa daño es ilegal, usemos los siguientes ejemplos: la cerveza y los cigarros, estos productos no se pueden vender a menores de edad, el hacerlo sería ilegal y en contra de la moral vendérselos a menores de edad, en estos dos ejemplos podemos encontrar que la ilegalidad y la moralidad van de la mano, pero ¿qué tal el vender un refresco de cola a un diabético?, podría ser en contra de la moral, dependiendo de la moralidad de cada persona, pero de ninguna manera es ilegal; y el que un diabético tome refresco de cola de ninguna manera debe de ser benéfico para su salud, lo mas probable es que le cause un daño. O los centros de apuestas, habrá parte de la población que considere en contra de la moral el jugar ese tipo de juegos de azar, pero definitivamente no son ilegales (atendiendo a que cumplen con la normatividad requerida), o por último, un ejemplo un poco más común, Usted tiene una necesidad, solicita un préstamo bancario, ve que las tasas no son lo mas favorables pero Usted necesita ese dinero por lo que decide tomar el préstamo y comprometerse a pagar durante 25 años y pagar hasta el triple de la cantidad que se le prestó, a todas luces no es ilegal, ¿pero es moralmente correcto?, quizá dependerá a quien le pregunte, la institución bancaria dirá que no lo es, pero quizá la persona que solicitó el crédito sí, aunando a este ejemplo, Usted va a realizar los pagos necesarios pero los hace de mala gana y cada vez que realice el pago piensa en la progenitora del dueño del banco, ¿es esto ilegal? Definitivamente no, ¿moralmente correcto? Nuevamente dependerá a quien le pregunte.

 

Ahora bien, es necesario preguntarnos: ¿Quién haría esta Constitución moral? ¿Cómo se aplicaría?, ya que la moralidad es un tema como su propia definición indica, deriva de obrar bien o mal y el bien o mal muchas veces dependerá de a quien le pregunte, ¿o acaso se referirán a una Constitución de un árbol de moras? Tendremos que estar pendiente de esto durante el próximo sexenio.

 

PD 1. Según Immanuel Kant la autonomía que tiene cada persona depende de su moralidad.

PD 2. Esta colaboración no ha sido patrocinada por banda grupera alguna.

 

salomon.gaxiola@gmail.com