|
"Opinión"

"El DIF en la política pública"

""

    ‘El DIF es una de las instituciones más noble que diariamente ayuda 
    a miles de personas con limitaciones físicas y donde generalmente 
    la gente es amable, profesional, cálida’. 
     
     
    Soy un familiar de un usuario crónico del Sistema Estatal DIF desde hace dos años y he sido testigo privilegiado de estar cerca del mundo de las discapacidades físicas en un universo frecuentemente de personas pobres de ingreso.
    Cuadripléjicos, paralíticos, mutilados, débiles visuales, autistas, luxados; niños, jóvenes o viejos, mujeres u hombres, que llegan diariamente y como pueden, hasta las instalaciones de la unidad DIF Mazatlán para recibir las terapias asignadas por el especialista en medicina física y rehabilitación.
    Es un cuadro diferente del mundo de la normalidad donde se conjugan sentimientos de tristeza y esperanza, y donde se llama sutilmente a valorar la importancia del cuidado de la salud que frecuentemente todos la malgastamos de una u otra forma, sin embargo, los malos hábitos y la rutina azarosa parecería que se impone y no permite reconocer la normalidad de poder desplazarse, escuchar, hablar, ver o la fortuna de poder establecer un diálogo con el otro.
    Lo normal es ver que la gente realice sus actividades cotidianas sin otra limitación que no sea la edad o la fortaleza física. Que lleva la vida, sin otras preocupaciones que no sean las cotidianas, las de todos los días y así hasta el final.
    Sin embargo, no realizarlas puede ser más que un asunto de edad o de fortaleza física, un traumatismo repentino puede significar simplemente un cambio sustancial en la calidad de vida que obliga a depender de las instituciones de salud y rehabilitación o de la solidaridad y el tiempo de los familiares y amigos.
    Y es cuando te preguntas, ¿qué pasara con aquellos discapacitados que no tienen al alcance un terapeuta físico y porque no, un familiar indispuesto por múltiples razones a compartir un drama y el dolor personal.
    El DIF es una de las instituciones más noble que diariamente ayuda a miles de personas con limitaciones físicas y donde generalmente la gente es amable, profesional, cálida. Con esos cientos de personas -cada más hay más, me dice uno de los miembros del personal- que llegan diariamente solos o acompañados para atender sus problemas físicos coyunturales o permanentes, en una atmósfera digna y generosa con cuotas insignificantes ante daños mayúsculos.
    Y es donde debo reconocer la atención que ha puesto el gobierno de Quirino Ordaz en el tema de la discapacidad, y teniendo el acompañamiento sensible de su esposa Rosy Fuente como presidenta honoraria del Sistema DIF Estatal. No podría ser menos, el mismo Gobernador lo ha confesado, fue atendido y rehabilitado en las viejas instalaciones aledañas al Club de Leones de Mazatlán luego de un traumatismo severo.
    -Yo entiendo perfectamente el drama de la discapacidad física, los problemas nuevos que ello acarrea a las familias y las dificultades para ser atendidos, por eso mi compromiso con el combate a la discapacidad -palabras más, palabras menos, es lo que el Gobernador un día me dijo en una charla que tuvimos y donde me habló de un proyecto sustantivo que traían él y su esposa.
    Hoy, lo que fue aquel proyecto es una realidad, las nuevas instalaciones del DIF Mazatlán “para el sur de Sinaloa” y las obras en la misma dirección que se han hecho en otros municipios, considerando nuevos campos de rehabilitación física, demuestran que aquella charla de hace poco más de un año no era demagogia, sino una idea de futuro en beneficio de ese sector que frecuentemente lleva sus males en la intimidad de sus hogares.
    Hace escasamente una semana me llamó nuevamente el Gobernador para preguntarme sobre cómo veía el nuevo DIF y recordé lo charlado, le dije que había una mejoría radical respecto de lo que fue el viejo DIF, las instalaciones son limpias, amplias y con mucha dignidad, le comenté al teléfono sobre algunas áreas de oportunidad para mejorar mientras su esposa escuchaba atentamente mis comentarios y me despedí agradeciendo en lo personal ese esfuerzo de su gobierno.
    Ah, me dijo que su gobierno, que es de cuatro años y diez meses, en la primera parte consideró la obra física, de infraestructura en ciudades y pueblos, y en esta segunda etapa va por lo que el denomina la obra social, y si es así realmente empieza con el pie derecho pero también con el nuevo hospital general de Mazatlán que según su dicho “contará con tecnología que no tiene ninguna institución privada de la localidad ya que el viejo estaba en un estado lamentable” y estará al servicio de la comunidad del sur de Sinaloa. Por cierto, en el CRII hay hasta extranjeros discapacitados que llegan a sus tareas de rehabilitación física, que es otro ingrediente que habla de una institución abierta sin distingos de ningún tipo con el único afán de servir.
    Sé que habrá quienes argumenten en contra diciendo que hay otras áreas no tan bien atendidas, incluso, he escuchado a quienes dicen que el Gobernador tiene especial interés en destinar mayores recursos a Mazatlán que a otros municipios, y seguramente hay algo de cierto en esto, sin embargo, en la materia que trata este breve ensayo se trata de reconocer el trabajo que se ha hecho en el terreno de la salud pública y en eso ahí están las obras.
    Una última reflexión quisiera dirigirla a la presidenta del DIF quien ha liderado el quehacer de esta importantísima área de gobierno y en eso ha influido su trato amable y cercano a esta comunidad que nunca la tiene fácil, pues las carencias generan una irritabilidad e impotencia natural en muchas personas. 
     

    Sin embargo, su trato fresco facilita las cosas en el aparato médico, administrativo y las familias, y no sé si hubo un tiempo pasado mejor, lo que sí sé es que cada vez que llevo a mi familiar a las nuevas instalaciones del DIF Mazatlán me quedo con la sensación que mis impuestos están trabajando cuando veo en mi familiar un rayo de esperanza.

    Periodismo ético, profesional y útil para ti.

    Suscríbete y ayudanos a seguir
    formando ciudadanos.


    Suscríbete
    Regístrate para leer nuestro artículo
    Esto nos ayuda a identificarte mejor al poder ofrecerte información y servicios justo a tus necesidades al recibir ayuda de nuestros anunciantes.


    ¡Regístrate gratis!