"¿Quién mandará en Morena?"

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Los problemas al interior del Movimiento de Regeneración Nacional apenas comienzan, el camino a la sucesión nacional de la dirigencia partidista ha dejado duros encontronazos de cara a la elección de noviembre.

Morena tiene un solo dueño, pero dentro de ese partido hay muchas tribus, o expresiones políticas como quiera usted llamarles, se están disputando el poder a machete y cuchillo. Hace unas semanas el Presidente de la República, líder máximo y fundador del movimiento, conminó a los líderes de Morena a “Cuidar el partido y abrir la elección de su dirigencia a encuestas” para evitar repetir los vicios de otros partidos políticos.
Pero la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia de ese instituto político contradijo al mandatario respondiendo oficialmente, “No se puede compaginar el método de encuesta con el proceso estatutario”, asegurando que el método según sus estatutos serán las asambleas o congresos distritales y estatales.

Cuatro perfiles, dos hombres y dos mujeres son los que estarían buscando la dirigencia del partido en el poder. Yeidckol Polevnsky quien buscaría la reelección del cargo, el coordinador de los diputados federales de Morena Mario Delgado, Alejandro Rojas y Bertha Luján, presidenta del Consejo Nacional de Morena.

Alejandro Rojas Díaz Durán, es un renegado, tal vez sea el que menos posibilidades tiene de todos, dijo en entrevista a Eje Central, “Morena deberá ser aliado de Andrés Manuel, no su empleado”, habló fuerte sobre la distancia que debe existir entre el partido político y el gobierno, y dijo que el partido no puede “perredizarse” -convertirse en una copia del PRD- al formarse al interior una serie de corrientes o grupos que incluso pretenden crear nuevos partidos afines al Presidente pero fuera de Morena. En referencia clara a Redes Sociales Progresistas y el Partido Humanista.

Mario Delgado, quien según las encuestas publicadas por el periódico El Financiero encabeza las preferencias para dirigir el partido con el 24 por ciento de las intenciones entre de los morenistas seguido de Polevnsky con el 21 por ciento. Exige que sea una consulta a la militancia, aunque dijo esperará el tiempo para formalizar su registro en la contienda. El Diputado Federal, tiene la simpatía de la mayoría de sus compañeros en la bancada y será a todas luces el rival a vencer en la futura competencia. Ha declarado fuerte en contra de la dirigencia actual e incluso ha dejado ver que los dados pudieran estar cargados.
Bertha Luján es sin duda la más radical entre los pretensos, fundadora y seguidora de AMLO desde hace muchos años, mujer de todas sus confianzas. Ella habla incluso de que en Morena no caben todos y que se deben reservar el derecho de admisión para que no entre gente nociva. Lo anterior dicho por personajes que han demeritado el movimiento con acciones y trayectorias contrarias a los “valores” de la 4T.

Por su parte Yeidckol Polevnsky buscaría la reelección en el cargo, aunque asegura que no sería propiamente una reelección porque el puesto que ostenta actualmente es el de Secretaria General en funciones de lideresa de partido y por tal, aunque está desde hace mucho tiempo manda con todas las facultades y atribuciones de la presidencia del instituto político, ella asegura que será algo nuevo y diferente. Hace unas semanas, circuló el rumor que se estaba trabajando una “embajada” para Polevnsky y que con ello, se buscaría limpiar el camino para que Mario Delgado arribara sin mayor conflicto a la silla. Ella desmintió diciendo “Ni a China, ni Argentina, la mejor embajada es la de Morena”.

En Sinaloa cada uno de los precandidatos y precandidatas tienen grupos de respaldo, los alcaldes de las principales ciudades, los diputados locales, federales y los senadores saben lo mucho que se juega en la próxima elección interna de su partido. ¿Quiénes van con quién? ¿Cómo jugarán sus cartas? ¿Qué influencia tendrá el ganador o ganadora en la designación a la candidatura para la gubernatura en 2021 en Sinaloa? De eso hablamos la siguiente semana. Luego le seguimos...