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"Observatorio"

"Roberto Cruz, a escena en Morena"

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OBSERVATORIO

    El caos panista lo empujó al poder
     
     
     
     
    Todo parece estar listo para que Roberto Ramsés Cruz Castro sea el nuevo delegado del Movimiento Regeneración Nacional en Sinaloa, en otras de las sorpresas que el partido de Andrés Manuel López Obrador le tiene deparadas a Sinaloa. Activista político de grandes resultados, la designación de “El Güero” cuenta ya con el consenso de los principales liderazgos de Morena.
    La aparición de Cruz Castro en fotos junto a Yeidckol Polevnsky, dirigente nacional de Morena, y en otras al lado de Olga Cordero, próxima Secretaria de Gobernación, se hizo con la aprobación del grupo de poder que orbita en torno de Andrés Manuel López Obrador. Solo una operación de última hora de AMLO puede evitar que el ex panista sustituya a Raúl Elenes cuando éste deje el timón estatal del partido el primero de diciembre para encabezar la Comisión Nacional de Pesca.
    A Cruz Castro lo estaba “cazando” Morena desde que decidió expulsarlo la tribu que tiene secuestrado al Partido Acción Nacional en Sinaloa. Al adelantarse “El Güero” a renunciar a las siglas albiazules se pensó en él como subdelegado de alguna dependencia federal al lado de José Jaime Montes Salas, quien será coordinador general de programas sociales.
    De última hora Polevnsky pensó en Cruz Castro para que creara la estructura partidista, las estrategias de reforzamiento militante y se convirtiera en el eje de la agenda de Morena en Sinaloa. Lo consultó con los senadores Rubén Rocha Moya e Imelda Castro, con los diputados federales y locales morenistas y la respuesta fue aprobatoria.
    A diferencia de la ocasión que Gerardo Vargas Landeros se acercó a la líder de Morena a ofrecerle experiencia política y una base social que llamó poco despreciable, Cruz Castro pasó todos los filtros de asentimiento. Con la propuesta de Vargas Polevnsky halló rechazo unánime de los que toman las decisiones y al final un recordatorio que le hizo el mismo López Obrador. “Acuérdate que Gerardo Vargas está vetado”, le dijo.
    Es verdad que Cruz Castro pareció siempre más morenista que panista. Sólo recuérdese cómo marcó la agenda de la 62 Legislatura recién concluida y dio lecciones de lógica parlamentaria y se burló de la bancada mayoritaria del PRI que acudía a las sesiones sin leer siquiera las iniciativas, mucho menos la ley.
    Lo que en definitiva le valió la atención de López Obrador y de Polevnsky fue aquella oposición que Cruz Castro mostró frente al PRI ante las llamadas reformas anti Morena, que pretendían restarle fuerza a la izquierda gobernante en el control del Congreso y la fiscalización de la Auditoría Superior del Estado. La hábil maniobrabilidad política del entonces Diputado panista lo anotó en la lista de los hombres claves que la Cuarta Transformación busca dentro o fuera del Movimiento Regeneración Nacional.
    La primera encomienda que se pondrá en manos de Cruz Castro es darle forma a Morena en Sinaloa pues hoy no existe el partido como estructura que garantice triunfos electorales de aquí a 2021. Existe el movimiento López Obrador que impulsó a ganar senadurías, diputaciones federales, control en el Congreso local y las principales presidencias municipales, pero fuera de eso la izquierda que asume el control de México está dispersa sin núcleo ideológico común en Sinaloa.
    El hecho es que el desastre que vive Acción Nacional fue el resorte que impulsó a Cruz Castro al círculo del poder de Morena. Centenas de panistas que abominan al grupo que tiene de rehén al partido blanquiazul alistan su migración al lopezobradorismo, porque están ciertos que Sebastián López Zamudio y cofrades, aliados fieles de la momia política llamada Ricardo Anaya, ni siquiera tienen el cadáver del PAN pues se quedaron con el puro petate del muerto.
     
    Re-verso
    Es la única cosa buena,
    Que hizo Sebastián Zamudio,
    Al ser su desastre el preludio,
    De que Cruz vaya a Morena.
     
    No me ayudes compadre
    La acción porril que el jueves 15 de noviembre reventó el foro de reforma a la ley orgánica de la Universidad Autónoma de Sinaloa puso en rojo las luces de alarma que el equipo de transición de Andrés Manuel López había mantenido en amarrillo sobre el caso UAS. ¿Quién fue tan torpe como para radicalizar la relación entre AMLO y la casa de estudios? Ahora, a quienes asumirán la Presidencia y las secretarías de Gobernación y Educación no les queda duda sobre los expediente puestos en sus manos en relación a la Universidad-Partido. ¿Esos son los amigos, compadres o estrategas de Héctor Melesio Cuén Ojeda? Pues cómo lo jodieron.
     

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