Una de las promesas de Morena fue sacar una agenda progresista a nivel federal y estatal, lo cual quedó en eso, en una promesa, pues luego de la discusión del matrimonio igualitario, quedó demostrado que aún con mayoría le ganan el PRI y el PAN.
Este lunes, Día Internacional por la Lucha de la Despenalización del Aborto, el morenista Pedro Villegas Lobo dijo que buscará legislar sobre las creencias religiosas de quienes se oponen a este pendiente en derechos humanos y salud, pero se le olvidó que de derechos humanos y salud a veces carece la propia bancada a la que pertenece.
Y es que han encontrado más respaldo los grupos pro vida que las mismas feministas, a tal grado que hasta en la página oficial del Congreso les organizan conferencias de prensa para exponer por qué la educación sexual debe salir de los libros de texto.
Tan no hacen eco las mujeres en el Congreso que Villegas Lobo estuvo solo y se manifestó por algo que la misma presidenta de la Comisión de Equidad, Género y Familia, Francisca Abelló Jordá, no lo ha hecho.
Ahora sí no sabemos si hay ingobernabilidad dentro de la bancada pobre o simplemente falta de interés en estos temas que les llenaron la agenda en campaña, que por cierto, ya viene el 2021, a ver qué tanto lo explotan.
Poco formales
Una vez más la organización de los eventos de Morena deja a desear, en esta ocasión la candidata por la Secretaría General del partido, Citlalli Hernández Mora, visitó la capital sinaloense haciendo esperar una hora y media a la prensa y a los militantes.
Si bien la Senadora Imelda Castro Castro se hizo presente en la visita de Mario Delgado Carrillo y Donají Alba, aspirantes a la dirigencia y Secretaría del partido, el día de ayer su equipo estaba apoyando en el evento de Hernández Mora; seguro no quiere dejar cabos sueltos en caso de que gane uno u otro, por ello apoya a más de una persona.
El colmo del evento es que la espera y convivencia con los medios, posteriormente con la militancia, se presentó en un espacio sin aire acondicionado, lo que para las y los sinaloenses en estos meses del año es un martirio, de acuerdo con los organizadores, que no tenían organización, los aires acondicionados del Casino de la Cultura fueron robados, por lo que se contrataron algunos ventiladores para aminorar el sufrimiento.
La bolita que se siguen echando para cumplir con su responsabilidad
Por cuarta ocasión, este lunes se tuvo que reprogramar la audiencia de inicio de juicio oral contra el ex coordinador administrativo de la Sedesol estatal, Carlos Baltazar Castro Olivas, a quien se le acusa de negociaciones ilícitas y peculado, es decir, que se clavó una feria.
La razón por la que de nuevo se reprogramó la audiencia es porque los testigos de las empresas que vendieron los colchones reciclados y podridos que se entregaron a los sinaloenses damnificados por la depresión tropical 19-E, se negaron a viajar a Sinaloa por los riesgos de infectarse.
Pero además, uno de los testigos clave, el amigo personal de Castro Olivas y quien supuestamente trianguló la transacción entre Gobierno estatal y las empresas de Jalisco, no lo hallan, que porque cambió de domicilio.
Qué raro que la Fiscalía General del Estado no pueda mandar por esos testigos para poder demostrar la culpabilidad de Castro Olivas y hallar a su amigo, notificarlo y exigirle que se presente a declarar, porque pues es su caso.
Sabemos que no lo pueden obligar, pero también es lógico que su actuar en esta operación no es algo que no sea sospechoso o irregular, tomando en cuenta que pudiera ser un cómplice de Castro Olivas.
Y si no tiene culpa, pues entonces por qué desaparecerse y hacer caso omiso de los llamamientos.
El asunto es que este caso ya se alargó más de la cuenta y ya van cuatro veces que se reprograma.
Esperemos que se ponga orden en este tema y podamos ya conocer si el ex funcionario, que se la pegó de muy brasa al preferir irse a juicio oral y demostrar su inocencia en lugar de pagar la reparación del daño, es inocente o culpable de la gachada esa de entregar los colchones podridos
Los imprescindibles
La mayoría de los negocios en Sinaloa pararon durante la cuarentena, el periodo más duro de la pandemia.
El mundo se detuvo durante varios meses, congelando a muchos negocios, algunos de ellos no abrirán sus puertas nunca más.
Sin embargo, poco hemos hablado de los que permanecieron abiertos de manera permanente, y aunque parece que fueron afortunados, muchos lo hicieron a pesar de las pérdidas que esto significaba.
El sector primario fue unos de los que nunca paró, produciendo los alimentos necesarios para que el País no sufriera desabasto, permitiendo que la sociedad pudiera seguir alimentándose.
Otros de los que siguieron adelante fueron las empresas dedicadas al transporte, a pesar de que las pérdidas fueron abrumadoras.
El ejemplo más conocido es el de las aerolíneas, empujadas casi a la bancarrota, pero también están las empresas de transporte marítimo y terrestre.
Dentro del Gobierno están las corporaciones policiacas, cuyas pérdidas fueron humanas, ya que no hay uniforme policiaco que proteja del virus.
Y qué podemos decir del personal de Salud, que no solo tuvo que soportar el embate del virus, sino la desgraciada violencia de parte de la ciudadanía, que los acusaba de ser portadores del Covid-19.
Para todos ellos un aplauso y el agradecimiento de un País que sigue luchando en contra de un virus que se niega a dejar en paz al mundo.
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