"Audiencias de Guasave, con una visita especial"

GUASAVE._ Llegó solo, entró como un ciudadano más al salón de Cabildo donde se realizaban las audiencias públicas del Ayuntamiento de Guasave, algunos lo conocieron, pero la mayoría no. Era Jesús “Chito” Ríos.

En los 80 su nombre inspiraba confianza, cada cinco días se trepaba al montículo enfundado en la casaca de los Algodoneros de Guasave y con su slider asesino, el mismo con el que ponchó a bateadores de la talla de Andrés Galarraga, dominaba a las artillerías rivales. Los resultados casi siempre fueron buenos.

El de El Espinal, Oaxaca, no llegó a las audiencias para hacer una gestión o solicitud, sino para regalarle a la Alcaldesa Aurelia Leal López una pelota de beisbol firmada por la plantilla actual de los Algodoneros que regresaron a la Liga Mexicana del Pacífico, tras cino años de ausencia.

“Tomamos café, lo probamos bien y nos quedamos con una de Guasave”, contó el legendario serpentinero después de entregar la bola autografiada a la Presidenta Municipal.

Y es que Ríos jugó para los Algodoneros de Guasave en tres periodos distintos entre 1984 y 1986, 1994 y 1997, y 1998 y 2001. Se casó con una guasavense y su hijo Wilmer, quien lanza actualmente para los Naranjeros de Hermosillo, nació en esta ciudad que lo vio triunfar.

En ocho temporadas en las que defendió la franela blanquiazul, “Chito” Ríos ganó 40 juegos y perdió 37. Sus mejores campañas fueron la de 1984-1985, cuando ganó 10 y perdió 5, con efectividad de 2.24; y la 1985-1986 en la que ganó 11 y perdió 4 con promedio de carreras limpias de 2.14. En ambas temporadas abanicó a más de 100 contrarios.

“Estas visitas dan mucho gusto, sea usted bienvenido, creo que es uno de los mejores regalos que me han otorgado, lo voy a conservar como oro. Tengo dos pelotas ya, la de Andrés Manuel (López Obrador) y ésta”, manifestó la Alcaldesa después de recibir el obsequio.

Recordando un poco de sus glorias como lanzador, Ríos dijo que su éxito lo basó más que nada en su control y la manera cómo trataba la pelota de 108 costuras.

“Yo la pelota siempre la comparaba con una mujer, con una dama, si tú te enamoras de ella, te va a hacer caso y si no la sabes agarrar se te va a ir de las manos eh... y cuando estés en problemas, háblale”, expresó. Todos rieron.

Inmortalizado en el Salón de la Fama del beisbol mexicano en 2013, “Chito” Ríos dijo que tenía 13 años que no venía a la LMP, pero ahora le han dado la oportunidad como coach de bullpen de los Algodoneros, donde trata de transmitir a los jóvenes todos los conocimientos adquiridos dentro y fuera del diamante.

Ríos se despidió, luego de ponerse a la orden de las autoridades municipales para participar en eventos relacionados con los jóvenes y deportistas, y de tomarse la fotografía del recuerdo con funcionarios municipales.