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"Aniversario de Culiacán"

"El Arquitecto Luis F. Molina construyó una Ciudad que ahora lo olvida"

"Su legado arquitectónico permanece, sin embargo, la ciudadanía y sus autoridades no valoran la obra de Molina"

CULIACÁN.- Los primeros trazos de la Ciudad fueron hechos por él, en el primer cuadro, ahora Centro Histórico. Su casa permanece ahí, olvidada por la ciudadanía que hasta ahora, tiene calles que el mismo Arquitecto Luis Felipe Molina Rodriguez enumeró.

Desde la Plazuela Rosales, pasando por el Santuario y llegando al ahora "Edificio Clouthier", Molina dejó un legado que representa a una Ciudad que ya lo olvidó.

En el interior de la Casa, se puede observar un arco, que se preserva de la estructura original. Un detalle del estilo arquitectónico de F. Molina.

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Llegó con la misión de construir el Gran Teatro Apolo, desde el Estado de México y egresado de la Escuela de Bellas Artes, Academia de San Carlos.

Luis Felipe, acudió al llamado del entonces Gobernador Mariano Martínez de Castro, para que construyera un teatro. Sin embargo, Molina trazó más planos de lo previsto, y fue por un desamor, que se quedó en Culiacán a trabajar, vivir y formar una familia.

"A pesar de las ocurrencias de los alcaldes que ha tenido la Ciudad, no se ha borrado lo que durante 20 años, Molina hizo en Culiacán. Luis F. Molina, es un referente del bien hacer y bien ser, de la arquitectura y urbanismo de la ciudad", señala, el Arquitecto Martín Sandoval Bojorquez, investigador de la vida y obra de F. Molina.

Construyó puentes, plazuelas, trazó calles y enumeró las casas con tinta azul en un fondo blanco. Algunas casas de la Calle Rosales aún conservan esa numeración. Lo que ahora se encuentra sin orden y en el olvido, es la fachada e interiores del hogar de Molina en Culiacán.

"En otros lugares del mundo, el Estado interviene para conservar la memoria de su población, aquí al Estado le vale. Luis F. Molina es el constructor formal de Culiacán y cuando una propiedad le perteneció a un personaje importante, debe ser mantenida y atendida. El estado actual de la casa de Molina es de carácter privado, y el Gobierno no hace nada por rescatarlo y aprovecharlo", apunta el delegado Federal del INAH en Sinaloa.

De tonos cobrizos y en seguida de otra casona en la misma condición, se encuentra lo que fue la casa del Arquitecto que le puso corazón a Culiacán.

Se presume que distintas personalidades han querido rescatar la casa de Felipe Molina para hacerla un museo. Actualmente, no ha quedado en nada y ni el Municipio, ni el Estado; muestran interés en el rescate de los muros en donde Molina hizo una familia.

"Si hubiera más Felipes Molina, hubiera orden y amabilidad en la Ciudad", dice, el Arquitecto, Martín Sandoval.

El Santuario fue diseñado por el Arquitecto Molina, durante su estadía en Culiacán.

 

Su llegada a Culiacán

En la autobiografía del Arquitecto, Molina relata que el Gobernador Mariano Martínez de Castro, fue en busca de uno de sus maestros, Arquitecto Manuel Calderón, para que construyera en Culiacán un teatro. Al rechazar la oferta, Calderón, recomienda a Molina.

Sin embargo, Luis F. Molina, no aceptó a la primera, pues según él, en su autobiografía destaca que en el tiempo de la propuesta, recién había egresado de San Carlos, no veía la necesidad de viajar a Culiacán a desarrollarse como Arquitecto.

En 1890, llega a la capital sinaloense. Le tuvo poco amor al dinero, pero gran amor al trabajo.

"Luis F. Molina llega a Culiacán para construir un teatro, pero no es lo primero que construye. Cuando el Gobernador Martínez de Castro lo entrevistó, Molina veía lejana la opción de estar en Culiacán, además, en ese momento era novio de de una muchacha que era hija de un hombre cercano a Porfirio Díaz, con la cual tenía la intención de casarse. Sin embargo, al par de meses la muchacha lo corta y a raíz de su sufrimiento de amor, decide ir a Culiacán", comparte, el Arquitecto Vicente Amaral, director de Patrimonio Cultural en el Estado.

Llegó y se quedó en sus obras, en las cuales, las familias ricas de la época invirtieron.

La Plazuela Rosales alberga mucho de F. Molina, como los detalles en su Kiosko y el interés de crear un espacio de esparcimiento para la ciudadanía.

 

Construcciones

Bajo la amenza de un fusilamiento, Molina huye de la Ciudad en épocas de Revolución en 1911, pero dejó en ella estos recintos:

*Teatro Apolo (Ahora Edificio Clouthier)

*Escuela Benito Juárez

*Puente Cañedo

*Cárcel (Ahora Museo de Arte de Sinaloa)

*Mercado Garmendia

*Santuario del Sagrado Corazón de Jesús

*Alineamiento y nomenclatura de calles

*Casa del General Cañedo (Ahora edificio central de la UAS)

*Dentro de las casas particulares, construyó lo que es ahora la Casa de la Cultura de la UAS.

*Hizo una adaptación al Colegio Civil Rosales

 

 El ahora Edificio Central UAS, fue construido por Molina, el cual ha sido sedes de distintas instituciones escolares.

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