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"Ilumina la escena del TAP Karen de Luna en el Segundo Encuentro de Danza"

"La bailarina y coreógrafa tiene un presencia escénica que establece de una manera fluida y natural, la calidad de sus movimientos consiguió le dio fluidez al trazo escénico que se enriqueció con un diseño de iluminación que danzo junto con la artista"

En el segundo día de las funciones de danza contemporánea que se están ofreciendo en el marco del Segundo Encuentro de Danza de la Escuela de Delfos la propuesta coreográfica de la egresada Karen de Luna brillo en medio de un programa de obras poco afortunadas.

La obra Tiempos inertes creada e interpretada por Karen de Luna tiene una atmósfera sonora armada con la interpretación del contrabajo de música ambiental hecha especialmente para esta obra y consigue integrarse a la estética minimalista de la obra.

La bailarina y coreógrafa tiene un presencia escénica que establece de una manera fluida y natural, la calidad de sus movimientos consiguió le dio fluidez al trazo escénico que se enriqueció con un diseño de iluminación que danzo junto con la artista, este elemento fue una herramienta en movimiento que se fundió estéticamente con la propuesta ofreciendo una belleza contundente.

Música , iluminación y un cuerpo en el escenario se conjugaron y fluyeron para construir una obra que instaló una equilibrada poética visual que permitió por momentos ofrecer lo que la mirada del público busca, el gozo estético de la danza pura encarnada en un cuerpo que se permite ser habitado por el movimiento para entablar un diálogo visual con el espectador.

La egresada Diana Bayardo propuso en su obra Timeline un movimiento inspirado en disciplinas de movimiento orientales como el Tai chi, en un discurso en el que la repetición de las palabras identidad, extinción , olvido terminaron teniendo un referente de movimiento estableciendo un discurso claro en el que los trazos se enlazaron para generar danza.

Christian Jiménez ofreció la obra Mor/ sutileza del sueño que es una propuesta de teatro danza con un toque de humor en el que lo absurdo de los sueños se integra a la propuesta que utiliza una cámara manipulada por el actor bailarín que reprodujo las imágenes que se generaron en el foro en un monitor frente al público de tal manera que lo virtual y lo real se instalaron en el escenario estableciendo un juego divertido y contrastante.

También se presentó la obra Mundo basura de José Luis Pacheco.

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