"Los 33 golpes de Cuén, Clouthier, Rocha y Zamora. ¿Cuál dolió más?"

En el “reparto” de golpes, ataques y cuestionamientos mutuos, ninguno de los cuatro candidatos al Senado por Sinaloa salió ileso.

De acuerdo con un análisis de Noroeste, a partir de la revisión del debate organizado por el Instituto Nacional Electoral y la Intercamaral, en un lapso de dos horas hubo 33 momentos “críticos” para alguno de los contendientes.

A diferencia del primer debate presidencial, en el cual el “blanco”, el centro, fue Andrés Manuel López Obrador, en el caso de Sinaloa los “golpes” se dividieron “entre cuatro”.

Ello indica la férrea lucha que se libra, entre las cuatro opciones --tres partidistas y una inependiente-- para conquistar el Senado en los comicios del domingo 1 de julio. Antesala del poder, ese día los cuatro se juegan el boleto para disputar la Gubernatura en el 2021.

 

 

Zamora, el incisivo

De la revisión del contenido del debate se desprende que Mario Zamora Gastélum, del PRI-Verde-Panal, fue quien realizó la mayoría de las críticas.

El priista fue incisivo en cuestionar la productividad legislativa del independiente Manuel Clouthier Carrillo, a su paso por la Cámara federal, en varios momentos. “Bravucón”, le llamó. A él le dedicó la mayoría de ataques.

Su segundo “blanco” fue Rubén Rocha Moya, de la coalición Morena-PT-PES, a quien fustigó la cercanía de esta opción con personajes ligados a la corrupción, como la ex lideresa del sindicato magisterial, Elba Esther Gordillo.

Pero sobre todo por la cercanía que Rocha Moya tuvo con los priistas, en los gobiernos de Quirino Ordaz Coppel, de quien fue su jefe de asesores, y de Enrique Peña Nieto, en cuyo gobierno cobraba “puntualmente” quincenas de 100 mil pesos. Como incongruente, lo dibujó en varias ocasiones.

En total Zamora lanzó cinco señalamientos a Clouthier, cuatro a Rocha Moya y dos a Héctor Melesio Cuén, del PAN-PRD-Movimiento Ciudadano.

 

Clouthier, el lapidario

Quien asestó diez “golpes” en el debate fue Clouthier Carrillo. Éste repartió, “parejo”, sus críticas. Aunque su estrategia central fue exhibir al frente PAN-PRD-MC (y PAS, en lo local), por el caso de la “Chapodiputada”, Lucero Sánchez, a quien se le descubrieron vínculos con el narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán.

En cuatro ocasiones, Clouthier “acorraló” a Cuén con este tema. Al punto, de sugerir que el ex rector de la UAS “es el representante de los intereses del narco” en los comicios, de no aclarar el punto.

Cuén evadió la acusación en las tres veces que Clouthier lo encaró, hasta que en una cuarta, respondió sin aclarar quién, si él o Gerardo Vargas Landeros, ex Secretario General de Gobierno de Malova, fue el “padrino político” de la “Chapodiputada”.

El segundo flanco de Clouthier fue Rocha Moya. Y de éste, hizo una revelación: uno de sus hijos es contratista del Gobierno estatal y Rocha no lo consignó en su declaración “3 de 3”. Incisivo con el punto, Clouthier no logró que éste abundara en este “conflicto de intereses”, como él mismo lo calificó.

 

 

Rocha, el 'cazador'

Cuatro de los siete ataques empleados por Rocha, fueron contra Cuén. A diferencia de Clouthier, que se enfocó en exhibir los nexos de Cuén con la “Chapodiputada”, Rocha se centró en el uso de la Universidad Autónomoa de Sinaloa por el PAS. Se refirió al candidato del Frente como “jefe máximo de la Universidad”, que utiliza recursos humanos y técnicos, sobre todo, para apuntar su proyecto político.

Y se le fue a la yugular: “El tráfico de calificaciones es la corrupción más escandalosa y penada que debe haber en una universidad”, advirtió. Y fue más allá, al advertirle: “esto se le acabará a Héctor Melesio Cuén cuando lleguemos al Gobierno”.

A Clouthier, Rocha Moya le “pegó” por el lado personal, luego de que fuera insistentemente señalado por el hijo contratista en el Gobierno.

Tiene un “conflicto de personalidad” y “es una mala copia, una copia falsa de lo que fue su padre, el Maquío”, señaló.

 

 

Cuén, el 'suavecito'

Quien atacó menos, pero a su vez fue el más atacado con dos puntos polémicos, el uso de la UAS por el PAS y la “Chapodiputada”, fue Cuén. Éste sólo lanzó tres cuestionamientos directos. Al igual que Zamora, se enfocó en el paso de éste por la Cámara federal.

“Presentó nueve iniciativas y que yo sepa, una sola no se aceptó; yo presenté 103 iniciativas cuando estuve como diputado en Sinaloa”, contrastó. Y le llamó “mentiroso”, al exponer Clouthier el maridaje entre PRI y PAS, para avalar las cuentas públicas del ex Gobernador Mario López Valdez.

Al priista Cuén no destinó cuestionamiento alguno. Y en tres ocasiones, usó tiempo para responderle a Rocha Moya, por el uso de la UAS por el PAS y el tráfico de calificaciones, a cambio de votos para él.

“Ese es un mito. Y es un mito para que lo digan los mitoteros...”, replicó.

 

 

 

 

 

LAS LAPIDARIAS

 

Clouthier a Cuén:

“Esta señora fue postulada por el PAN, el PAS y el PRD; Melesio tienes que explicar quién es el padrino político de la “Chapodiputada”, Gerardo Vargas Landeros o tú?... ¡Contesta, contesta!... Mientras no lo aclares podremos decir que eres el candidato de los intereses del narco”.

 

Clouthier a Rocha:

“Yo soy desarrollador de de vivienda, no contructor, el que se dedica a la construcción es tu hijo, y él es contratista de gobierno... tu hijo es contratista de gobierno y eso tiene un potencial conflicto de intereses lo debes hacer público”.

 

Clouthier a Zamora

“Yo te pregunto Mario cómo puede un aspirante a senador defender a los ciudadanos, representando los intereses de una escuela de corrupción que es el PRI”.

 

Rocha a Cuén

“...Yo sé que la Universidad amparados en la autonomía hacen atrocidades y tienen mucha corrupción. El tráfico de calificaciones es la corrupción más escandalosa y penada que debe haber en una universidad, y ocurre en la UAS, que Cuén nos platique de eso”.

 

Rocha a Clouthier

“Él (Clouthier) tiene un conflicto de personalidad, él no sabe si quiere ser su papá o quiere ser él, con sus gritos y aspavientos y todo lo demás, y su supuesta autoridad moral quiere apantallar. Yo creo que es un a mala copia, es una copia falsa de lo que fue su padre, el Maquío”.

 

Cuén a Clouthier

“Si esto fuera un tema legislativo nosotros podemos ver la productividad que ha tenido Manuel Clouthier cuando fue diputado, presentó nueve iniciativas y que yo sepa, una sola no se aceptó, yo presenté 103 iniciativas cuando estuve como diputado en Sinaloa”.

 

Cuén a Rocha:

“A Rocha le diría que cuando metió gente a la cárcel (en su rectorado de la UAS), se le olvidó meterse él también. El fue la segunda autoridad, él fue secretario general, él estuvo en la mayor parte de esa administración”.

 

Zamora a Cuén:

“Profesor Cuén, con todo respetillo, y le digo profesor, porque no ha quedado claro si tiene cédula profesional de maestro”. Se dice que tiene 32 casas, no sé si las puso en su declaración '3 de 3', si las tiene ojalá pueda explicar que vive de acuerdo a lo que ingresa”.

 

Zamora a Clouthier:

“¿Cuándo acompañaste a un ciudadano que te dijo eso a interponer una denuncia? ¿Cuándo utilizaste la tribuna para sustentar un caso señalando la corrupción? ¿Cuántas demandas pusiste escuchando a la gente, para combatir esa corrupción?

 

Zamora a Rocha:

“Usted trabajó en el gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto, y cada quincena cobró puntualmente su cheque de 100 mil pesos. Sería importante saber qué opina del Gobierno de Quirino (para el cual fue jefe de asesores) de Peña. ¡Congruencia!”.