"Migrantes en Mazatlán esperan con ansias montarse en La Bestia"

Los migrantes centroamericanos y nacionales seguirán varados, por lo menos, otros tres días en el puerto porque no hay paso del ferrocarril hacia Sonora, y cada vez llegan más a esta ciudad desde el sur del País.

La ayuda fluye lenta, pero segura para los migrantes que se han refugiado en la parroquia de San Francisco de Asís, en la Colonia Salvador Allende.

Personal del Sector Salud les aplica vacunas contra el tétanos.

"Les estamos aplicando vacunas para ayudar un poco, ya que se previenen del tétanos en caso de una cortada, es muy necesaria, a muchos les da miedo la inyección, pero se la estamos poniendo de todas maneras", comentó Rosa Elena Osuna.

Y mientras unos son vacunados, otras cocinan.

Justo a un costado de la iglesia, en el atrio, una enorme olla de caldo de pollo se cocina.

Diez pollos, cinco kilos de papa y cinco de zanahorias, en un enorme cazo, degustaron unos 220 migrantes.

"Va a salir bueno el caldito, ya lo pide mi pancita, un rico caldito con pollo", expresó Pedro Sánchez, de Guatemala.

En el comedor San Francisco de Asís, voluntarias limpian frijol y se preparan para la cena para esta noche.

Se prevé que los migrantes reanuden su viaje a la frontera norte entre jueves y viernes, pero mientras eso sucede, ellos siguen abiertos al apoyo solidario de los mazatlecos.

Lo que más les urge es comida, ropa y agua purificada.