"Nadie les avisó... en el Infonavit Humaya se repitió la historia: volvieron a perder sus bienes"

Tristeza por haber perdido sus bienes domésticos y molestia porque ninguna autoridad advirtió del nivel de lluvia que sobre Culiacán caería, es lo que prevalece en habitantes de un sector de la colonia Infonavit Humaya.

De la nada, sus casas empezaron a inundarse. Primero, una capa de agua sobre el suelo, después, el nivel subió aceleradamente hasta alcanzar casi los dos metros de altura.

Hubo familias que alcanzaron a salirse de sus casas, mientras que otras, las que viven en las de dos plantas, se subieron a la segunda, y desde ahí observaron como el agua los invadía.

De seguir subiendo el agua, el 'plan b', era salirse por las ventanas.

Mientras la lluvia crecía, en algunas familias la desesperación crecía cuando escuchaban a sus hijos llorar de miedo.

Frases como: 'Nadie avisó', 'no sabíamos que esto iba a pasar' se escuchaban en las familias mientras barrían sacando el lodo de sus casas.

De haber tenido información oportuna, hubiesen tenido tiempo de asegurar ciertas pertenencias, se expuso.

Aunado al reclamo a las autoridades, se escuchaba la tristeza por haber perdido todo.

Mónica mencionó que dentro de las pérdidas en su casa, está también un minisplit que no habían instalado, porque lo acababan de comprar. Quedó empacado.

"Todo se echó a perder", expuso.

Poco a poco el agua llegó hasta un escalón y de repente, alcanzó los dos metros. Todo fue muy rápido.

"El refrigerador flotó, la estufa quedó tapada, había niños chiquitos que lloraban de miedo, niños de 6, 8 y 10 años, pero les decíamos que no pasaba nada".

La última vez que su casa se inundó, fue cuando en 2013, con el huracán Manuel. En esta ocasión, el canal que tienen a unos metros de distancia se desbordó.

En otra casa, donde hay un abarrote, el dueño tuvo que amarrar dos refrigeradores para que el agua no los tumbara.

Otra señora comentó que rentan esa vivienda, sabían que se inundaba, pero nunca pensaron que se pusiera tan feo.

En un recorrido que se hizo por ese sector, se constató a personas sacando el lodo de sus casas y como no había agua potable, tenían que recoger de la calle agua sucia.

En las banquetas la gente acomodó colchones, los televisores descompuestos, sillones.

Un señor de la calle Félix Castro aseguró que es la primera vez que su casa se le inunda en esa magnitud. 'No se vale', continúa.

"Va a haber broncas, Sinaloa ahorita es un desastre, alguien tiene que pagar", advertía.

Aseguró que en la colonia que está a un lado, hay una obra que el Ayuntamiento debió haber hecho desde hace mucho tiempo. Con esa obra, evitaría esas inundaciones.

Esto estuvo duro y ni con 50 mil pesos, se paga el daño que las lluvias nos ocasionaron, expresó otro habitante con escoba en mano limpiando su casa.

Omar indicó que sus dos hijos, de ocho y cuatro años, se espantaron por la situación.

"Con las obras que hicieron nos habían asegurado que no volvía a crecer tanto, si acaso 30 centímetros, cuando mucho".

La tarja, refrigerador, estufa, todo flotando mientras que ellos estaban en la segunda planta.

"Yo estuve hasta la una de la mañana casi esperando a ver si había reportes de la escuela, o ¿sabes que?, va a haber contingencia, algo, nada, entonces me acosté tranquilo".

No pasó ni media hora cuando se inundaron las casas, por eso nadie alcanzó a salvar sus cosas.

"Está muy feo, está muy fuerte, y sí la verdad, no hubo un aviso a tiempo".

Margarita señaló que conforme el agua se metía, llamó a su hermano para sacar a su mamá que estaba acostada en la segunda planta. Su mamá no puede caminar.

En el fraccionamiento Acueducto, primera etapa, también se vivió una situación similar. Casas en donde el agua subió a un metro y nadie se enteró de que eso iba a pasar.