"Pedir ayuda, desprenderse y tomar acciones en el momento oportuno, las claves que recomienda Manuel Clouthier"

"El empresario expone los errores y momentos difíciles que enfrentó cuando dirigió Noroeste, en Fuck Up Nights Culiacán"

CULIACÁN._ Pedir ayuda, desprenderse, encomendarse a Dios y tomar acciones en el momento oportuno, son los aprendizajes que ha obtenido Manuel Clouthier Carrillo, luego de sus errores, y que el empresario de los giros inmobiliario, agropecuario y medios de comunicación compartió en el volumen 27 del evento Fuck Up Nights Culiacán.

“Me han invitado hoy aquí a hablar de fracaso para compartir experiencias que permitan el aprendizaje y vamos a hablar de mi paso por el periódico Noroeste”, dijo al iniciar su charla.

Manuel Clouthier recordó que cuando Ernesto Zedillo fue Presidente de la República, iba iniciando el Gobierno y se llevó a cabo lo que es conocido como “el error de diciembre de 1994”, situación realmente catastrófica.

“Se nos cayeron las ventas al 50 por ciento en cuatro meses, se subieron las tasas de interés en 300 por ciento, hubo una devaluación espantosa, era una situación terrible que se había cambiado de la noche a la mañana, en un día todo cambia y se complica”, describió.

Echarle la culpa al Gobierno era fácil, compartió el empresario, pero lo realmente difícil era preguntarse “¿dónde la regué yo?”. Porque en las situaciones difíciles, es muy fácil ver la ventana, ver a los demás y echar culpas, pero el reto verdadero en situaciones difíciles es ver el espejo.

“Es decir, ‘¿dónde la cagué yo?’, de ahí es de donde sale realmente el aprendizaje”, recomendó.

Contó que iban directo a la quiebra en aquel momento, que llegó a la conclusión de que México es tan inestable que no aguantaba un alto apalancamiento.

“Un país como México no puede estar demasiado apalancado con crédito, tienes que buscar los mecanismos que te hagan desarrollar tu empresa sin tener que deber mucho dinero, porque de la noche a la mañana cambia todo en este país en un momento dado”, dijo.

Con esa experiencia, Clouthier expuso que su alternativa fue contratar asesores, porque es importante pedir ayuda siempre que los fracasos van avisando, siempre que van dando señales, que a veces cegados por la pasión, por el entusiasmo o por lo que sea no se ven, aun cuando están avisando, están gritando y se dejan correr.

“Entonces, el aprendizaje es la necesidad de pedir ayuda cuando te está cargando la chingada, en otras palabras, que tengas la conciencia que no eres el primero, ni eres el último, ni eres el único que la ha pasado mal, y lo importante es pedir ayuda, hay mil formas de pedir ayuda, contratar a un asesor es una”, dijo.

“Yo tenía socios cuando contraté asesorías y me pusieron la peor cagada que me han puesto en la vida, la peor regañada fue en la junta de consejo, que cómo se me ocurre si nos está llevando la fregada, llevar una propuesta para gastar esa cantidad de dinero en un asesor.

"Les tuve que decir, ‘aquí no hay más que de dos sopas, o nos ayudan y tenemos el 50 por ciento de probabilidad de salir adelante, o no nos ayudan y tenemos el 100 por ciento de probabilidad de que nos lleve la chingada’”.

El empresario contó que con esa crisis aprendió que a veces “hay que podar el árbol para salvar el tronco”, y que una de las decisiones más difíciles para el empresario es desprenderse. Pero si se tiene la capacidad de leer el balance financiero se tendrá la fuerza para decidir.

“Atrévete a deshacerte de cosas para hacerle frente a los problemas, en ese momento cerré Mochis inmediatamente, y si no lo hubiera cerrado a tiempo, la crisis nos hubiera arrastrado y nos hubiera hundido, lo cerré en el instante y sin tocarme el corazón, sabiendo que si no lo hacía me cargaba la chingada”, ejemplificó.

Otro aprendizaje que obtuvo, expuso, es que Dios existe, que aprieta, pero no ahorca.

“Se los juro, se los prometo, se los firmo, sí existe, porque me consta que hice lo que tenía que hacer, pedí la ayuda, pero podían haber salido las cosas bien o podían haber salido mal, y salieron bien, y chingo a mi madre que no fui yo, fue ese ser superior”, expresó.

Clouthier dijo que cuando los problemas no se atienden oportunamente son de un tamaño, que el tiempo no arregla los problemas, sino que los agrava, que eso de esperar a ver cómo vienen las cosas, que si se ven mal pues van a venir mal.

“El tiempo no resuelve los problemas, el tiempo los agrava; hay que tomar decisiones, esa es la tarea del empresario, tomar decisiones, pero tomarlas oportunamente, hay que atreverse a enfrentar los problemas, a no evadirlos”, advirtió.

Manuel Clouthier comentó que en 2009 dejó la dirección de los negocios para dedicarse cien por ciento a la política y que ahí se volvió a equivocar, porque él pensó que había planeado todo, en teoría, que ya estaba listo para retirarse, pero se equivocó y la prueba fue que el periódico se fue de pique de una manera impresionante mientras él estaba dedicado a la “grilla”.

“Pusimos al frente a Adrián López, en un proceso, me imagino, como que va manejando un avión y va cayendo, pero cuando cambia de piloto va tratando de ver cómo lo levanta cuando viene en picada, nos llevó tiempo encontrar el camino, hoy por hoy creo que va perfilado, la pregunta es, si nos va a alcanzar el tiempo”, reconoció.

“Soy un hombre que ha tenido fracasos, soy un hombre que la ha regado, pero por ningún motivo acepto el mote de fracasado”.

Compartió que se está haciendo la lucha, convencidos de que vale la pena, y que cuando se pone a pensar, no se puede imaginar a Sinaloa si no hubiera existido el periódico Noroeste.

Periodismo ético, profesional y útil para ti.

Suscríbete y ayudanos a seguir
formando ciudadanos.


Suscríbete
Regístrate para leer nuestro artículo
Esto nos ayuda a identificarte mejor al poder ofrecerte información y servicios justo a tus necesidades al recibir ayuda de nuestros anunciantes.


¡Regístrate gratis!