"Priistas arrebatan micrófono a diputada, echan al presidente y colocan su bandera en tribuna"

CULIACÁN._ Priistas adheridos a la CNC reventaron por segunda ocasión, en una semana, la sesión del Congreso local.

En el minuto 23, cuando el presidente de la Mesa Directiva reinició la sesión, líderes del sector campesino “asaltaron” la máxima tribuna de Sinaloa.

Y prácticamente “echaron” a diputados de la Mesa Directiva, para instalarse y colocar en la tribuna una bandera de la CNC.

También le arrebataron el micrófono a la Diputada local Karla Montero Alatorre, a quien prácticamente le quitaron la voz.

Montero Alatorre pretendía continuar la sesión.

Un arranque tenso

La tensión privaba esta mañana desde el arranque de la sesión de la 63 Legislatura, en medio de un recinto atestado principalmente por cenecistas adheridos al PRI.

A los 10 minutos de que el presidente de la Mesa Directiva inició la asamblea, tuvo que decretar un “receso indefinido”.

Esto luego de que Faustino Hernández Álvarez, del PRI, y quien a la vez es líder del sector campesino, subió a tribuna para rechazar, de nueva cuenta, la pretensión de Morena para que se eliminen las cuotas ejidales.

Estas cuotas son pagadas por los productores agrícolas y se transfieren a las organizaciones campesinas.

Morena sostiene que son ilegales y una imposición para los productores, incluso aquellos que no pertenecen a estas agrupaciones.

El PRI, en tanto, ha realizado una vehemente defensa para que estas se mantengan, argumentando que el proyecto de Morena es una intromisión a la vida interna de las organizaciones.

Hoy se conoció que Morena no aceptó bajar del orden del día el punto de acuerdo, con el cual exhorta al Gobernador a que informe sobre estos recursos, que se descuentan a campesinos a la par de la recaudación del Impuesto Predial Rústico.

Los cientos de cenecistas que se dieron cita en la sesión de hoy advertían, a coro, “¡sin acuerdo no hay sesión, sin acuerdo no hay sesión!”.

Al decretar el “receso indefinido”, desde su curul la priista Gloria Himelda Félix reclamó que esta decisión era “ilegal”.