"'Llénala de billetes...'"

CULIACÁN.- "No la hagas de pedo y llénala de billetes", dijo Juan Manuel Ibarra González después de aventar la maleta a los pies de Carlos Corvera Villaseñor, administrador interno de la bóveda de la sucursal Banamex en Lomas del Bulevar.

Juan Manuel, sin dejar de apuntar al administrador con la pistola que empuñaba en una de sus manos, cargó tiro y Carlos empezó a echar rápidamente en la maleta 2 millones 600 mil pesos que en ese momento había en la bóveda.

De acuerdo con las primeras indagatorias realizadas por agentes del área de Investigación de Delitos de la PME, Juan Manuel subió al techo de la segunda planta del Banamex del Maquío Clouthier, burló el sistema de alarmas, y abrió un boquete en el techo que lo llevó hasta el área que da a la bóveda y el comedor.

Fue allí donde el presunto asaltabancos encañonó al administrador para cometer el robo bancario más cuantioso de los últimos 10 años, según la PME.

También fue allí donde una empleada que estaba desayunando vio caer del techo a un sujeto cargando una maleta al cual describió como alto, medio robusto, que vestía pantalón azul de mezclilla y calzaba tenis blancos.

Fue lo único que alcanzó a ver antes de aventar la comida y bajar a la primera planta para alertar a sus compañeros.

"Estaba desayunando y escuchaba ruidos en el techo, pero no le hice mucho caso; pensé que eran los trabajadores de mantenimiento, pero después vi que se desprendió una parte del techo y cayó un hombre", dijo la asustada trabajadora a los investigadores.

Después, ya con la maleta llena de billetes, Juan Manuel salió del banco y huyó del lugar; mientras que trabajadores de la sucursal alertaron a las corporaciones policiacas.

Eran las 10.30 horas de ese pasado 19 de julio.

Agentes del área de Investigación de Delitos de la PME iniciaron las indagatorias, y después de revisar videos del sistema de seguridad, entrevistar a testigos y empleados, y evaluar los resultados de pruebas periciales, resolvieron en menos de 10 días el "robo del año":

Las primeras indagaciones llevaron a los agentes a detener a Juan Manuel Ibarra, cuando ya se paseaba en una cuatrimoto del año que supuestamente había comprado con parte de los 200 mil pesos que le tocó del botín del robo.

Confesó haber cometido el atraco, pero también reveló que para cometer el robo contó con información privilegiada proporcionada por los empleados del banco.

Dijo que el atraco fue planeado con tiempo por el administrador de la bóveda y por Nelson Estrada, quien estaba encargado del sistema de alarmas del banco.

Ambos empleados fueron interrogados por separado por los investigadores, ante quienes cayeron en contradicciones que los llevaron al final a reconocer su participación en el atraco.

Finalmente los tres fueron detenidos, pero los ministeriales solo recuperaron 80 mil pesos del robo bancario más cuantioso de los últimos 10 años, según la PME.