"Tres años de guerra"
CULIACÁN._El pasado 30 de abril se cumplieron tres años del inicio en Sinaloa del enfrentamiento entre los cárteles de la droga, la cual ha dejado un saldo de cinco mil 135 personas asesinadas en ese periodo en todo Sinaloa.
Cifras de la Procuraduría General de Justicia del Estado revelan que durante el primer año del enfrentamiento entre grupos rivales se detonó que en el sexenio de Jesús Aguilar Padilla fueron asesinadas mil 256 personas; en el segundo año subió a mil 765; pero en el tercer año se disparó hasta 2 mil 114.
A tres años de ese 30 de abril del 2008, los asesinatos, las ejecuciones, los enfrentamientos, las privaciones de la libertad y las balaceras persisten pese a lo cientos de policías municipales, estatales, federales y militares que fueron desplegados para combatir al narco, no sólo en Sinaloa, sino en casi todo el país.
Si bien la detención registrada en enero del 2008 de Alfredo Beltrán Leyva, alias "El Mochomo", fue uno de los motivos principales que provocaron la fractura dentro del Cártel de Sinaloa, fue hasta el Día del Niño de ese año cuando el rompimiento se hizo evidente y desde entonces los grupos de delincuentes convirtieron las calles del estado en un campo de batalla.
De acuerdo con informes de autoridades federales de México y de Estados Unidos, "El Mochomo" era uno de los principales lugartenientes de Joaquín "El Chapo" Guzmán e Ismael "El Mayo" Zambada, líderes del Cártel de Sinaloa, y era el encargado de corromper a policías y militares para que brindaran protección a los traficantes en Culiacán.
El arresto de Alfredo fue considerado por el clan Beltrán Leyva como una traición hacia aquellos que habían sido uno de los brazos armados fuertes del Cártel de Sinaloa.
Según los informes, los Beltrán Leyva habían sido hasta antes de la fractura, los encargados de abrir y pelear plazas para el cártel que encabeza "El Chapo" Guzmán, desde Oaxaca, Guerrero y Michoacán en el sur del país, hasta Nuevo León, Sonora y Baja California en el norte de México.
Tras la captura de "El Mochomo", su hermano Arturo Beltrán Leyva se separa del grupo junto con Édgar Valdez Villarreal, "La Barbie", y declara la guerra a "El Chapo" y a "El Mayo".
A los Beltrán se unen también el Cártel de Juárez, liderado por Vicente Carrillo Fuentes, quien ya desde el asesinato de su hermano Rodolfo en el 2004, mantenía un enfrentamiento de bajo perfil contra "El Chapo", principalmente en Ciudad Juárez y Navolato.
A los enfrentamientos también se unieron a los Beltrán facciones de Los Zetas, antiguos delincuentes al servicio del Cártel del Golfo; y del Cártel de Tijuana, del clan Arellano Félix.
30 de abril del 2008,
un día para olvidar
Policías de Sinaloa señalan que ese histórico 30 de abril de 2008, un grupo armado intentó asesinar a un hijo de "El Mochomo" en la colonia Guadalupe, a una cuadra de la Casa de Gobierno, pero el ataque fue frustrado por delincuentes de los Beltrán Leyva.
Sin embargo la Policía Federal y el Ejército detectó al grupo armado y detuvo a 10 pistoleros vinculados a los Beltrán Leyva, en Colinas de San Miguel y la Guadalupe.
Otros dos más fueron abatidos a tiros por un grupo del Cártel de Sinaloa cuando acudían en refuerzo de sus compañeros, sobre la calle Río Mocorito, también en la Guadalupe.
Policías señalan que momentos después en respuesta, un grupo de los Beltrán Leyva intentó ingresar a una comunidad cercana a La Presita, al norte de la ciudad, en donde ese 30 de abril presumían se encontraban líderes del Cártel de Sinaloa.
Sin embargo en ese lugar se registró otro enfrentamiento que culminó con el asesinato de dos agentes ministeriales que presuntamente cuidaban la entrada al poblado. Otros cuatro policías municipales asignados a esa zona serían levantados un día después y aparecerían muertos una semana posterior.
Desde entonces los enfrentamientos, balaceras y asesinatos se recrudecieron en Culiacán y Navolato, pero meses después se extenderían hacia Mazatlán, Los Mochis, y prácticamente a todo el estado. Posteriormente, la división se extendería a casi todo el país.
Las bajas tanto de un bando como de otro se cuentan ya por cientos, incluyendo familiares cercanos a los grandes capos, como el asesinato de Édgar Guzmán López, hijo de "El Chapo" Guzmán, registrado el 8 de mayo del 2008. En ese mismo atentado caería muerto Arturo Meza Cázares, supuesto dueño del antro Bilbao e hijo de Blanca Margarita Cázares Salazar, alias "La Emperatriz", quien ha sido señalada por el Gobierno de Estados Unidos como la cabeza de una red de lavado de dinero producto del narcotráfico del Cártel de "El Chapo" y de "El Mayo" Zambada.
Desde entonces la sociedad ha sido testigo y ha sufrido en carne propia la guerra entre los cárteles de la droga.
También desde entonces los sinaloenses han vivido la etapa más cruenta y sangrienta en la historia del narcotráfico que hasta este 30 de abril del 2011 ya había dejado un saldo de 5 mil 135 personas asesinadas, entre ellas decenas de civiles que quedaron atrapados en medio del fuego cruzado del narco.
EL SALDO
Año Muertos
Primer mil 256
Segundo mil 765
Tercer 2 mil 114
Total: 5 mil 135