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"Jardinería"

"Bonsái arte en miniatura"

"Ya sea cultivado en casa o comprado, conoce los principios básicos para mantener tu árbol siempre en buen estado"
28/08/2017 15:53

El bonsái es una arte que combina técnicas de horticultura y principios estéticos asiáticos en una forma única. El arte se originó en el imperio chino y fue copiado y adaptado por los japoneses a lo que hoy se conoce como bonsái. Traducido literalmente bon-sái significa plantado en un contenedor.

Para las personas que quieren un bonsái y se preguntan cómo mantenerlo, el portal bonsaiempire.es comparte algunos consejos sobre cómo cuidar de esta planta encantadora.

La mayoría de la gente comienza a cuidar un bonsái después de haberlo comprado en una tienda especializada o vivero. Aunque podría ser más interesante y menos costoso si lo cultivas en casa.

Tener un bonsái

El primer paso es adquirir un árbol, lo que se puede hacer mediante la compra de un bonsái ya crecido o mediante el uso de una de las posibles técnicas de cultivo. Es muy importante seleccionar una especie que se adapte a los cambios climáticos de la zona en la que vives.

Deberás determinar si quieres un árbol para el interior (lo que limita tus opciones a los árboles tropicales que pueden sobrevivir en el interior) o poner el bonsái fuera.

Modelado y estilo

Ahora que has comprado o cultivado un árbol, es hora de comenzar con el entrenamiento, darle forma y estilo. Esta es la parte creativa del cultivo, así como la parte más complicada. Aunque cuesta mucho tiempo perfeccionar técnicas como la poda y el alambrado para mantener los árboles miniaturizados, algunos conceptos básicos relacionados pueden aprenderse fácilmente.

La poda es crucial para mantener los árboles miniaturizados, así como para darles forma. En última instancia, el objetivo es crear un bonsái que se asemeje a la naturaleza tanto como sea posible.

El invierno y principio de la primavera son las estaciones más adecuadas para proceder a la poda importante, aunque esto dependerá del tipo de árbol que tengas.

Aunque es imposible determinar qué ramas podar para formar tu árbol sin verlo realmente, ayuda bastante el mirar algunas evoluciones del bonsái, tenerlas como referencia y comenzar desde ahí.

Una técnica para dar forma al bonsái es el alambrado de aluminio o de cobre recocido, que se enrolla alrededor de las ramas para hacer posible su doblado y así formarlas, al menos hasta cierto punto.

Cuidado y mantenimiento

El estilo de los árboles bonsái incluye métodos básicos como la poda regular y el cableado, pero también técnicas más avanzadas, incluyendo la creación de madera muerta, pero sin duda la técnica más importante es la poda.

Cada especie de árbol tiene pautas de cuidados específicos, una parte importante de estos es el riego. La frecuencia con que necesitan ser regados depende de una amplia gama de factores, incluyendo la especie de árbol, el tamaño de la maceta y su forma, y el clima entre otros.

El riego excesivo puede ocasionar que las raíces se pudran, una de las causas más comunes de su muerte. Sin embargo, como los bonsái se plantan en macetas pequeñas también tienden a secarse muy fácilmente.

La elección de la mezcla de suelo y el trasplante regular (en promedio cada dos años), para asegurarse de que el cepellón (masa de tierra) de los árboles no se convierta en una verdadera maraña de raíces y tierra endurecida, lo que hace difícil almacenar y absorber el agua, es crucial para mantener el árbol sano.

Trasplante

Un bonsái debe ser trasplantado cuando las raíces se enrollan abundantemente alrededor de la maceta; si las raíces no son visibles y se encuentran perfectamente en el interior de la tierra espere al menos un año para volver a comprobarlo de nuevo.

El trabajo de trasplantar un bonsái generalmente se realiza durante el final del invierno y el principio de la primavera, cuando el árbol comienza a despertar. El trasplante durante esta época asegura una rápida recuperación del sistema radicular cuando el árbol comienza con su crecimiento.

Lo que no debes hacer

Colocar un árbol de exterior en el interior de una vivienda (o viceversa) es una forma segura de acabar con él. Compra o cultiva uno que se adapte bien al lugar en el que quieres ponerlo.

Los árboles sub-tropicales generalmente necesitan mucha luz y temperaturas relativamente altas y sólo pueden vivir fuera si tú vives en un clima con un ambiente suficientemente cálido, sobre todo en invierno; sin embargo estos árboles vivirán perfectamente bien en el interior de una vivienda si tiene las condiciones necesarias.

ESCOBA

Este estilo es apto para árboles frondosos de hoja caduca con ramas finas. El tronco es recto y no llega hasta el ápice; la ramificación comienza a un tercio de la altura hacia todas las direcciones. Así se produce una copa en forma de bola.

VERTICAL FORMAL

Es muy común en el arte del bonsái. Se encuentra en la naturaleza, en lugares con mucha luz, sin la competencia de otros árboles. El tronco es cónico, la parte inferior tiene que ser más gruesa que la parte superior.

VERTICAL INFORMAL

Muy común tanto en los bonsái como en la naturaleza. El tronco serpentea hacia arriba y de cada curva crece una rama. El tronco tiene que mostrar visiblemente una conicidad.

BARRIDO DE VIENTO

El estilo Fukinagashi es ejemplo de árboles que luchan para sobrevivir. Todas las ramas y el tronco crecen en una dirección, como si el viento soplara y azotase el árbol constantemente hacia un lado.

DOBLE TRONCO

Común en la naturaleza, en los bonsáis no se ve mucho. Normalmente crecen dos troncos de un solo sistema de raíces, pero también es posible que un tronco más pequeño surja del tronco principal, cerca de la tierra.

CASCADA

Un árbol que en la naturaleza crece en una pared empinada de la montaña, doblado por el peso de nieve o rocas. Se planta en recipientes altos.