"Cientos de desplazados por violencia en Sinaloa se niegan a regresar a sus comunidades"

"Aproximadamente 150 familias las que han sido desplazadas por enfrentamientos entre grupos armados"
27/06/2016 13:59

noroeste.com

Familias desplazadas de 10 comunidades serranas de Badiraguato (La Tuna, Arroyo Seco, Huixopa, El Nogalito, Revolcadero, La Palma, El Chorro, Alisitos, entre otras) se refugiaron con familiares en Mazatlán y Culiacán, donde han recibido apoyos para alimentación, luego de los hechos de violencia que suscitaron en aquella zona durante las últimas semanas.

 

Guadalupe Iribe, presidenta del DIF en Badiraguato, indicó en entrevista con Noticieros Televisa que son aproximadamente 150 familias las que han sido desplazadas por enfrentamientos entre grupos armados, que este fin de semana la revista Proceso asegura se suscitó a raíz de una pugna entre Rafael Caro Quintero y Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, alias “El Chapo”.

 

Sin embargo, las autoridades municipales de Badiraguato aseguraron a la televisora que ya existen las condiciones “favorables” para regresar a la Sierra. “Es decisión de ellos. Se les están dando colchonetas, despensa, kit de limpieza y un poco de ropa", dijo Iribe.

 

Pero para la representante de las familias desplazadas en Sinaloa, María Esperanza Hernández Lugo, quien huyera en 2012 de Ocurahui, aseguró que, a cuatro años de haberse iniciado el éxodo de personas, 37 comunidades se encuentran abandonadas y tres más están ocupadas por los comandos de sicarios que mantienen el control en las montañas.

 

"A la fecha somos miles de familias desplazadas, pues no sólo somos las 600 del Municipio de Sinaloa y las 400 del Municipio de Choix, sino que hoy son 13 municipios de los 18 del Estado con miles de desplazados, como son El Fuerte, Ahome, Mocorito, Badiraguato, Navolato, Culiacán, San Ignacio, Concordia, Escuinapa y El Rosario", dijo en entrevista con el diario Reforma.

 

Hernández Lugo enfatizó que el Gobierno de Sinaloa miente al asegurar que la sierra de Sinaloa está segura para que regresen sus habitantes.

 

El semanario Proceso indicó que el ataque de decenas de hombres armados en Badiraguato, en el que también irrumpieron en la casa de la mamá de “El Chapo”, obedeció a una orden de Alfredo Beltrán Guzmán alias “El Mochomito”, sobrino de Joaquín Guzmán Loera e hijo de Alfredo Beltrán Leyva alias “El Mochomo”. 

 

La razón del ataque: disputar al cártel de Sinaloa esa zona del llamado Triángulo Dorado para traficar drogas y, de paso, mandarle un mensaje a “El Chapo”, hoy preso y en espera de ser extraditado a Estados Unidos, de que su poderío está en riesgo.

 

Después de la irrupción del comando armado, el coordinador estatal de Seguridad Pública de Sinaloa, Moisés Melo, aseguró a Univisión que las autoridades recuperaron el control del llamado Triángulo Dorado, e instó a volver a sus casas a unas 250 familias desplazadas por temor a la violencia.

 

La semana pasada, una balacera entre dos grupos armados dejó en una gasolinera de Cosalá, Sinaloa, cuatro personas muertas. Entre ellas se encontraba Juan Carlos Landeros alias “El Güero 90”, operador del cártel de Sinaloa. A mediados de junio, las autoridades encontraron los cuerpos decapitados de siete hombres en un camino rural del sur de Sinaloa.

 

El Centro de Monitoreo de Desplazamiento Interno reveló que unas 287 mil personas han sido desplazadas por la violencia en todo México. 

 

En Sinaloa, de acuerdo con cifras de la Secretaría de Desarrollo Social y Humano del Estado (Sedeshu), son aproximadamente 690 familias las que viven desplazadas desde hace cuatro años. La dependencia estima que son alrededor de 2 mil 700 personas las que permanecen sin poder volver a sus comunidades.

 

Para la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) el desplazamiento forzado interno es un problema invisible por las autoridades, por lo que es necesario que el Estado Mexicano adopte una postura al respecto y emprenda acciones específicas para su atención.