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"Algo Maz"

"El acontecer social en la columna de Luis Ángel Gómez"
25/04/2017 13:40

 
“Yo voy a tomar Uber y es mi elección” fueron las palabras de Viridiana Rubalcaba, turista de Tijuana, que tuvo la desagradable experiencia de ser interceptada por un taxista de los rojos, como les dicen, para impedirla de su libertad de elegir el servicio que la llevara a la Central Camionera desde la Zona Dorada. Pero eso no paró ahí, pues llegaron dos taxistas a unirse al boicot en plena tarde del lunes, pues aunque el taxista “oficial” le dijo que no le cobraría por el servicio, ella aclaró que deseaba utilizar Uber. Para no hacer larga la historia, la turista tuvo que irse del lugar a pedir otro servicio de Uber. Imagínese usted que va a comer tacos a la carreta de la esquina, pero sale el del restaurante de en frente a prohibírselo y le echa pleito al taquero. O si decide usted ir al abarrote, pero sale el del supermercado a impedírselo y le arma escándalo al de la tiendita. Son las primeras comparaciones que se nos vinieron a la mente cuando nos enteramos de este incidente, que solo empaña al puerto, y por parte del gremio de los taxistas, para no variar. Vivimos en un México de sistema capitalista. Aceptémoslo, y en este tipo de economía, la libre competencia está permitida, pero cuando se menoscaban intereses, es cuando surgen los problemas, pues en los sindicatos de taxistas, sin importar su color, hay concesiones, prebendas, hasta manejos y coerciones políticas, como el año pasado que abordamos uno en plena campaña y traía propaganda de un candidato, pegada en todo el cristal de atrás. Al modo, no nos pudimos aguantar, le preguntamos al conductor si era obligación traer esa enorme calcamonía y su respuesta fue, “Me dijeron que la tenía que poner, pero me dieron a escoger si quería Alcalde, Diputado o Gobernador, porque si no, que me iban a suspender”. Así que tampoco es fácil ser taxista agremiado. Pero bueno, la realidad es que Uber sí es mucho más barato, pues servicios por los que hemos pagado entre 50 y 60 peso en taxi normal, lo máximo que hemos pagado han sido 27 pesos por Uber. Sorry! Nadie va a criticar a alguien por comprar más barato en un súper que en otro. ¿Nos explicamos? Hay quienes exclaman que Uber es una empresa extranjera y ese dinero se lo llevan del País. Me imagino que esas personas solo compran en el mercado, nunca van al cine a engrosar las carteras de Hollywood, toda su ropa es mexicana, jamás van a restaurantes de comida rápida, solo tienen cuenta en el único banco mexicano que hay, no utilizan jabón de baño, para lavar, desodorantes, pues todos esos artículos de higiene personal y limpieza, más vale que revisen el nombre de la compañía matriz, así que no utilicen el nacionalismo, que nadie practicamos al 100, para escudar esos argumentos contra ese servicio de taxi. Quiere decir que si le pido el favor a un conocido que me lleve a algún lado en su auto y le doy para la gasolina, corremos peligro de que nos intercepten. El consumidor tiene la libertad de elegir y es su derecho. Como en toda competencia, ¡a ponerse las pilas! A brindar un mejor servicio y precio, pues eso sí, con el cuento de que se consideran atractivos turísticos, las pulmonías también abusan con sus tarifas y en temporada alta, hasta el fuchi le hacen al local, y algunos traen todavía sus calca promoviendo el no al Uber, así como también urbanos, pero claro, todos ellos al servicio del mismo partido.
Pero Taldea, con Tere Patrón de Letamendi al frente, siempre está al servicio, por igual, de quienes menos tienen para conseguir prótesis externas de mama y ha comenzado una tarea digna del apoyo de todos, obtener una unidad de radioterapia en el puerto, por lo que ayer emprendió una acción: entregar firmas a empresas y asociaciones que se han unido a esta campaña para recabarlas, pues es urgente este tipo de instalaciones para las terapias a pacientes con cáncer, ya que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, debería haber una por cada 200 mil habitantes y en Sinaloa solamente hay una y está en Culiacán. Saque cuentas de cuántas se necesitan en el Estado entonces, y si le parece exagerado, pregunte a cualquier persona, amigo, compañero de trabajo, de escuela, a quien va a su lado en un viaje o a cualquiera que se le ocurra, que si conoce personalmente o sabe de alguien que ha sufrido o esté padeciendo cáncer; la respuesta le va a sorprender. Así que a apoyar esta labor, en la que el Gobierno y la Secretaria de Salud tienen mucho por hacer, pues aun cuando el trabajo de prevención debe ser permanente, a través de diferentes actividades para que la gente se haga estudios, ¿qué sucede con los miles de casos que se detectan al año? Entonces es vital dar el siguiente paso: aplicarles el tratamiento correspondiente y, para eso, se necesitan unidades de radioterapia. ¡Adelante con esta iniciativa!
Y muy apapachados, dos cumpleañeros que iniciaron esta semana, Jorge Rico Gavica, quien estuvo de lo más felicitado por sus papás, Irma Gavica Luna y Jorge Rico Herrasti, así como por sus hermanas, Irma y Anna Carolina, al cumplir 30 años. También ese día, Néstor García recibió las amorosas demostraciones de su esposa, Adriana Ramírez, y sus hijos, Alejandra y Álvaro, con quienes forma una familia ejemplar.
Y hoy, una dama apreciada en el puerto estará de manteles largos, celebrando 90 años de vida, Adelita Medrano, quien se reunirá en una comida con sus familiares y amigos de toda la vida, en un hotel de playa, Su hija, Nora Alatorre, se encargó de los detalles del festejo, en el que habrá música y toda la cosa.
Otra reunión de hoy, pero en la tarde-noche, será protagonizada por Vanessa Álvarez Pelayo, quien estará recibiendo los mejores deseos por su futura boda en el hogar de Lupita Haro de Casas, a donde un grupo de amigas de la anfitriona llegarán para compartir con ella su felicidad en la despedida de su soltería.
Quien se despidió de la adolescencia, pues acaba de cumplir 20 años, es Francisco Herrera Soto, hijo de Rocío Soto Cayeros, a quien tenemos el gusto de saludar constantemente, y nieto de Lucy Cayeros de Soto, voluntaria y animadora de ANSPAC Mazatlán, así que el muchacho viene de muy buena madera. ¡Felicidades por tus 20!
Pero a su mayoría de edad llegó el Congreso de Valores que, Grupo Editorial Noroeste y Universidad Tecmilenio, han organizado desde hace 18 años y, para esta edición, lleva como título Cambiando la Conversación. El 2 y 3 de mayo se realizarán las actividades en el Centro de Convenciones, a partir de las cuatro de la tarde, con conferencia debate y un panel con expertos enfocados en temas para la juventud y sus padres, para formar ciudadanos de bien. Lo novedoso en este año es que el martes 2 habrá un evento alterno, que será la presentación de un libro, a las 10 de la mañana, en el tercer piso del Edificio Noroeste. La entrada para todos los eventos es libre y los pases están disponibles desde ayer, tanto en la recepción de este periódico como en Tecmilenio. Vamos a aprender a ser mejor.
Y desde el lunes comenzaron las enseñanzas de verdaderos virtuosos de la danza con la presentación del primer evento de la edición 31 del Festival Internacional José Limón, en el Teatro Ángela Peralta, y concluirá el 7 de mayo, en ese recinto artístico, con el Encuentro de Academias. El elenco incluye artistas de Canadá, Alemania, de la República Mexicana y, claro, que de Sinaloa también, más precisamente de Culiacán y el puerto. Si desea conocer el costo de boletos, que realmente son accesibles, y el calendario de eventos, los informes están disponible al teléfono 982 4446, extensión 103. ¡Bailemos al son de la vida!
La vida es lo que tenemos que respetar y eso empieza desde la casa común de la humanidad: la Tierra, pues este sábado se celebró su día, el cual pasó inadvertido para la mayoría, sobre todo cuando vemos que tras el asueto vacacional, el puerto lució sucio, descuidado, con bolsas de basura apiladas en las banquetas de las colonias y desperdicios regados por las calles, ni qué decir de las playas. Aunque reconocemos el esfuerzo de algunos por mantenerlas limpias o recoger los desechos, desafortunadamente, la mayoría se impone, sobre todo en una cultura como la nuestra, que no tenemos la responsabilidad de hacernos cargo de nuestra basura y la arrojamos donde más nos plazca, como lo hemos visto que lo hacen desde autos en movimiento o gente que va caminado y la avienta a su paso, aunque haya un bote a unos pocos metros, pero lo que se va a ir a la basura es nuestro hígado de los corajes que hacemos cuando somos testigos de algo así, y si uno le dice algo a esa persona, se nos queda viendo con ojos como si uno estuviera loco, pero ese es el mundo de ahora, todo patas arriba, y nos sentimos tan cómodos en él, desde nuestra zona de confort.