"Confronta gas natural a tribu yaqui en Sonora"
Los yaquis pelean entre ellos mismos.
Siete pueblos están a favor de la construcción de la red de Gasoducto del Noroeste y uno, el de Lomas de Bacum, se opone.
Este conflicto ha afectado el suministro de gas natural en Sinaloa, que debió iniciar este año, y que abastecería a empresas productivas locales.
El Sistema Integral de Transporte y Suministro de Gas Natural Norte-Noroeste consiste en dos líneas de transporte para el Estado, una de Chihuahua y la otra de Sonora; la interconexión será en El Oro, en Choix, y la siguiente, bajará a Mazatlán.
La inversión en la obra asciende a mil millones de dólares, según información del Gobierno del Estado.
En este conflicto, las acusaciones vienen de ambos lados, de quienes están a favor y quienes están en contra.
Martín Valencia Cruz, secretario de la Guardia Tradicional de la Loma de Bacum, denunció que han recibido presiones y amenazas... a través de los medios de comunicación.
"En los periódicos se dice que no va a tener apoyo este pueblo, becas para los niños, vivienda, agua potable, todos los servicios que tiene que dar el Gobierno del Estado por medio del Gobierno municipal", expuso en entrevista vía telefónica.
El indígena contó que algunos usuarios de las redes sociales, que no reconoce, han amenazado con desaparecer el pueblo con el ataque de "una bomba atómica".
"Otra amenaza, el que dice 'el mejor indio es el indio bajo tierra'. Es un eslogan que traía Porfirio Díaz en su tiempo cuando estuvo aquí queriendo desterrar a la tribu yaqui, queriendo acabar con ella", acusó.
Esas son las presiones que ha recibido el pueblo que se ha negado a que la tubería de acero que transportará gas natural se entierre en la tierra que perteneció a sus ancestros.
En medio del conflicto, Valencia Cruz insistió en que se considere a los indígenas, y se realice una consulta informativa entre las partes, y que se divulgue el proyecto energético.
"Si es un proyecto que trae desarrollo, pues que se acerquen, que den la información, todas las medidas de seguridad que debe de llevar esta obra, todos los beneficios que puede generar, no le veo complicación", comentó.
En tanto, para Tomás Rojo Valencia, vocero oficial de la tribu Yaqui, quien está a favor de la obra, criticó que el pueblo de Loma de Bacum se oponga al proyecto, y los acusó de estar bajo la influencia de "gente con un interés muy particular".
"Han estado a merced de los juicios, del engaño y las mentiras y todo el veneno que le puede aplicar gente con un interés muy particular y con la oportunidad de conflicto para visibilizarse políticamente, y de alguna manera lucrar económica y políticamente de este conflicto", señaló.
Y enlistó a organizaciones no gubernamentales y maestros.
"Empezaron a actuar las fuerzas externas que tienen un grado de interés al interior de la tribu... los catedráticos de una Universidad prestigiosa, como el IPSO, un catedrático llamado Rodrigo González, escudándose bajo títulos actúa bajo una forma alevosa, ventajosa haciéndola a veces de charlatán, como que el gas va a explotar y va acabar con la tribu, como si fuera una bomba atómica", dijo.
"(Y también) están los residuos del padresismo que ahorita se siente el acoso por parte de la ley", señaló.
Rojo Valencia ha acusado al pueblo opositor de iniciar el conflicto a través del uso de la fuerza y la violencia contra el pueblo de Loma de Guamúchil.
El 21 de octubre, La Jornada reportó una persona asesinada, ocho heridas y 12 vehículos incendiados, cuando los pueblos de Lomas de Bacum se enfrentaron al de Guamúchil.
Mientras la disputa permanece, al Gobernador de Sinaloa, Mario López Valdez, se le va la oportunidad de inaugurar el megaproyecto que prometió; el reloj va en su contra, le quedan sólo dos meses.
