"De intendencia a jefe de enfermeros, el camino de Miguel"

La enfermería es una ciencia que ha sido por muchos catalogada como principalmente de cuidado y atención a heridos y enfermos, pero es una profesión que va mucho más allá.

"La función principal de enfermería no solo es cuidar al paciente, sino también nosotros debemos enseñarle la manera de cómo prevenir sus enfermedades, cómo ayudar a la familia también”, explicó Miguel Ángel Gastélum, enfermero jefe de piso en el Hospital General Regional Número 1 del IMSS.

"Enfermería no solamente es curar pacientes o cuidar pacientes sino también nosotros para prevenir enfermedades y tiene un área también de investigación", añadió.

--¿Como qué puedes investigar?

--Todo, podemos investigar todas las patologías las causas por la cual el paciente se puede enfermar, todo. Podemos nosotros investigar en todo lo que es el área de enfermería.

"Para mí lo más importante es prevenir que curar, porque aparte de que nos cuesta menos al Instituto al final de cuentas evitamos muchas complicaciones", dijo.

"¿De qué manera hacemos nosotros la medida preventiva? Pues tenemos también programas como lo que es Miprin donde pacientes que a nosotros nos ingresa, nosotros llevamos el control de los pacientes para que no adquiera una infección".

"Tenemos manuales de procedimiento que nos ayudan a evitar que nuestro paciente se nos complique", continuó.

Hace 19 años Miguel ingresó a trabajar al Seguro Social como intendente, en ese entonces tenía 19 años de edad y solo tenía terminada la preparatoria.

En la Delegación conoció a Belén una jefa de enfermeras que lo motivó a superarse y no se quedara solamente de intendente.

"Ella me decía, como yo estaba en el área de intendencia me decía 'tú te tienes que superar, estás muy joven, eres trabajador ¿a poco no te gusta el área médica?', me decía, puedes estudiar medicina o enfermería", rememoró Miguel.

El Instituto Mexicano del Seguro Social becó a Miguel para que se preparara en la Unidad de Enseñanza, desde entonces no se detuvo en su preparación.

"Lo que me motivó fue ayudar al prójimo, en enfermería tienes que tener esa vocación de que te tiene que gustar muchísimo para ser un buen enfermero", expresó.

Antes de estudiar enfermería, Miguel se preparó con la licenciatura en obstetricia en la Unidad de Enseñanza del IMSS, posteriormente estudió enfermería y después se especializó como enfermero quirúrgico, en la misma Unidad.

Las becas otorgadas por el IMSS para que su personal se prepare en la Unidad de Enseñanza consiste en que acuden a clases con goce de sueldo, sin embargo tienen que cumplir con asistencia y sus labores escolares.

Su trayectoria ha sido larga en el Instituto, fue intendente cuatro años, mismos como auxiliar de enfermería, otros cuatro también de enfermero general y siete de enfermero quirúrgico.

"La verdad no me arrepiento, me encanta ser enfermero", añadió.

"Mi mayor satisfacción es cuando el familiar o el paciente se va satisfecho con la consulta que le brindamos aquí en el Instituto y se van bien".

Además de las satisfacciones que le ha brindado su trabajo, Miguel también ha tenido casos que lo han impactado, sobre todo al recordarle a su familia.

Hace cuatro años en una Navidad, atendió a un paciente de ocho años de edad que había tenido un accidente con pirotecnia.

"Yo era quirúrgico en ese momento todavía, él perdió su ojo, perdió una de sus extremidades por tronar un cohete, entonces el niño venía entre la vida y la muerte", contó.

"Salió amputado su bracito y perdió el ojo, pero salvamos su vida que estaba en riesgo", recordó.

Expresó Miguel que todos los días se esfuerza por dar la mejor atención a sus pacientes y familiares.

"A mis pacientes o a los pacientes del Instituto los veo como si fuera yo, como si fuera mi familia, y yo siempre trato de atenderlos de esa manera que se merecen, porque puede ser un familiar mío", dijo.

Actualmente la enfermería es ejercida sin distingo de género, pero hace 19 años cuando comenzó Miguel el panorama era distinto, porque había señalamientos hacia los hombres que la practicaban.

"Al principio sí fue difícil, ahorita ya hay mucho más hombres enfermeros. Al principio fue un poco complicado en el tabú porque es un área prácticamente de ellas, en realidad eso no me importó porque a mí me llenaba, me satisfacía", comentó.

"Les fui demostrando que los hombres también podemos ser muy buenos enfermeros", agregó.

---¿No les echaban carrilla?

--Claro que sí, nos decían 'esto es nada más de mujeres' y en aquellos entonces el enfermero se caracterizaba que no era muy hombre, pero no, simplemente al contrario, nosotros aportamos mucho, tenemos fuerza podemos hacer los cambios posturales a nuestros pacientes, ayudamos mucho en el traslado de pacientes también, somos un aporte y una fortaleza que hemos dado a la profesión de enfermería

ASÍ LO DIJO

"Lo que me motivó fue ayudar al prójimo, en enfermería tienes que tener esa vocación de que te tiene que gustar muchísimo para ser un buen enfermero".

"Para mí lo más importante es prevenir que curar, porque aparte de que nos cuesta menos al Instituto al final de cuentas evitamos muchas complicaciones".

 Miguel Ángel Gastélum

Enfermero

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