Desconfía CESP de la calidad de los exámenes de control y confianza aplicados en corporaciones de Sinaloa
CULIACÁN._ Los exámenes de control y confianza, aplicados en la corporaciones de seguridad e investigación locales, pudieran estar fallando en un punto al no garantizar al 100 por ciento que no sean librados por personas relacionadas al crimen organizado, consideró Miguel Calderón Quevedo.
El titular del Consejo Estatal de Seguridad Pública de Sinaloa estableció que las investigaciones para determinar si una persona pertenece a una corporación criminal o no deben recaer en las instituciones.
Esto, luego de que la semana pasada un ex agente de la Fiscalía General de Sinaloa fue encontrado asesinado al pie del Congreso del Estado en Culiacán, acompañado por un mensaje que lo relaciona presuntamente con una facción criminal.
Este mismo agente ya había enfrentado un proceso penal en noviembre de 2024 cuando fue arrestado por conducir un vehículo con reporte de robo, que resultó ser de su cuñada.
“Independientemente de la circunstancia o el nivel de culpabilidad que pueda tener este en medio de una guerra, nosotros siempre vamos a hablar del valor de la vida, para eso hay instancias, para eso hay un Estado de Derecho, para eso hay el debido proceso. Entonces, que la ley determine si alguien tiene un nivel de culpabilidad en base a las evidencias, en base a un proceso y efectivamente uno se debe imaginar y ser empático con esas víctimas”, apuntó el titular del CESP.
“Nosotros hemos lamentado todas las víctimas, las víctimas de daños colaterales que no tienen nada que ver; las víctimas que tienen algo que ver y de alguna manera están en medio del conflicto como copartícipes, como cómplices. Lamentamos también la muerte de todos ellos porque ellos también tienen familia y ellos debieron también haber pasado por un debido proceso”.
El ex agente de la FGE fue videograbado antes de ser asesinado y señaló ser parte de una facción criminal, sin embargo, estos dichos no pueden ser considerados como una declaración determinante, dijo Calderón Quevedo.
“Imaginarnos en qué situación de estrés, en qué situación de angustia pueden estar siendo videograbados tomando evidencia de lo que se dice sabiendo que muy probablemente van a terminar con tu vida segundos o minutos después debe ser algo de alto estrés, debe ser algo en lo cual debemos de ponderar el valor de lo dicho, la veracidad de lo mismo. Entonces, esta situación, comparado con el supuesto de que hay una campaña de propaganda de las facciones en pugna, pues uno debe ponderar qué debe ser considerado como algo veráz y qué no, eso le corresponde a la autoridad, a las fiscalías, investigar y darle valor a lo dicho, a los señalamientos que cada uno haga”, mencionó.
“Aprovechamos para reiterar el llamado, no podemos tener un Sinaloa en paz si antes no hay justicia, y en medio de la justicia está ese pendiente de dejar carpetas impunes sin resolver”.
Los exámenes de control y confianza han sido un tópico de interés público durante la crisis de seguridad en Sinaloa, pues en septiembre de 2024 los policías municipales de Culiacán fueron desarmados por la Secretaría de la Defensa Nacional para realizar evaluaciones extraordinarias.
Meses después los elementos municipales fueron sometidos a exámenes de control y confianza que culminaron en diciembre.
“Está el tema de las evaluaciones de control y confianza, es decir, todos los integrantes de una corporación policial, civil, o como las policías estatales y policías municipales pero en particular los colaboradores de una fiscalía deben de pasar por un proceso de evaluación y confianza. Si muchos de ellos terminan teniendo un punto de responsabilidad, entonces ¿hasta qué punto está fallando el esquema de evaluación de control y confianza? Esa sería la pregunta número uno, entonces, ¿está siendo desafiado? ¿Tiene respuestas muy flexibles? No lo sé, lo que sí es que están pasando los exámenes de control y confianza, y luego resulta que no son tan honestos, algo está pasando”, señaló el titular del CESP.