En Sinaloa aumenta la población cuyo salario no alcanza para cubrir la canasta básica
La proporción de personas que, aun teniendo empleo, no pueden adquirir la canasta alimentaria con su ingreso laboral aumentó en Sinaloa durante el tercer trimestre de 2025, de acuerdo con el Índice de la Tendencia Laboral de la Pobreza, elaborado por el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática.
El indicador pasó de 26.7 por ciento en el mismo periodo de 2024 a 27.0 por ciento este año, un incremento de 0.3 puntos porcentuales que implica que más trabajadores se encuentran en situación de pobreza laboral.
El documento señala que también hay una disminución del ingreso laboral real per cápita en la entidad.
En comparación anual, el ingreso promedio pasó de 3 mil 695.84 a 3 mil 659.52 pesos mensuales, lo que representa una caída de 36.32 pesos o un retroceso de 1.0 por ciento en el poder adquisitivo.
A diferencia del comportamiento estatal, a nivel nacional la pobreza laboral mostró una ligera mejoría, al bajar de 35.1 a 34.3 por ciento en el mismo periodo.
Sinaloa, a mitad del ranking nacional
Con el 27 por ciento de su población en esta condición, Sinaloa se ubicó en la posición 15 entre las entidades con menor pobreza laboral en el País.
Los estados con mejores niveles fueron Baja California Sur, con el 13.4 por ciento; Colima, con 18.4 por ciento; y Quintana Roo, 19.4 por ciento. Mientras que Chiapas, con el 61.1 por ciento; Oaxaca, 58.1 por ciento; y Guerrero, 52.3 por ciento, concentraron los porcentajes más altos.
Poder adquisitivo debilitado
En la comparación nacional, 21 entidades lograron mejorar su ingreso laboral real per cápita, pero Sinaloa no fue una de ellas.
La reducción del 1.0 por ciento llevó al estado a la posición 24 entre los 32 del país. El promedio nacional apenas retrocedió 0.1 por ciento.
Entre los estados con mayor crecimiento del ingreso se encuentran Sonora con 12.2 por ciento, Querétaro con 9.5 por ciento y Jalisco con 7.8 por ciento; mientras que San Luis Potosí, con 13.3 por ciento, y Estado de México, con 8.6 por ciento, tuvieron los descensos más pronunciados.
