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Violencia

Familia de niñas asesinadas en Badiraguato ya había sido atacada por militares en 2008: CNDH

La Comisión Nacional de los Derechos Humanos documentó que la familia de Alexa y Leidy, menores asesinadas en un operativo militar en mayo de 2025, fue víctima de un hecho similar hace 17 años. En ambos casos, elementos del Ejército utilizaron fuerza letal contra civiles en Badiraguato
18/12/2025 20:34

CULIACÁN._ La familia de Alexa y Leidy, las dos niñas asesinadas en un operativo militar en Badiraguato en mayo de 2025, ya había sido blanco de un ataque del Ejército mexicano 17 años atrás.

La Comisión Nacional de los Derechos Humanos confirmó que, en 2008, integrantes del mismo núcleo familiar murieron en hechos atribuidos también a elementos castrenses en ese municipio de la sierra de Sinaloa.

De acuerdo con la Recomendación 201VG/2025, el ataque más reciente ocurrió el 6 de mayo de este año en la comunidad de La Cieneguilla, cuando elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional dispararon contra la camioneta en la que se trasladaba la familia.

Como resultado, las dos menores de edad perdieron la vida y otras cuatro personas resultaron heridas por arma de fuego.

La CNDH acreditó que las víctimas eran civiles desarmados y que no existía una agresión real, actual o inminente que justificara el uso de la fuerza letal. Aun cuando los ocupantes del vehículo intentaron advertir que viajaban con menores y que no portaban armas, los disparos continuaron.

En su investigación, documentó que el 26 de marzo de 2008, en la comunidad de Santiago de los Caballeros, también en Badiraguato, integrantes de esta misma familia fueron víctimas de un ataque perpetrado por elementos del Ejército mexicano, quienes dispararon contra una camioneta en la que viajaban.

El hecho dejó cuatro personas muertas y una más herida, sin que existiera una agresión previa ni que las víctimas portaran armas.

Por ese caso, la CNDH emitió la Recomendación 36/2008, en la que solicitó reparación del daño, investigaciones administrativas y penales, así como medidas de capacitación al personal castrense.

“Lo anterior adquiere mayor notoriedad para esta Comisión Nacional al reconocer hechos análogos que afectan por segunda ocasión a una misma familia, pues el 26 de marzo de 2008, en la comunidad de Santiago de los Caballeros, municipio de Badiraguato, Sinaloa, integrantes de esta familia perdieron la vida en circunstancias atribuibles a personal de la DEFENSA. Motivo por el que se emitió la Recomendación 36/2008 el 11 de julio de ese año”, señala en el documento.

En el ataque de 2025 se vulneraron el derecho a la vida, a la integridad personal, a la seguridad jurídica, al interés superior de la niñez y al derecho a la familia, tanto de las víctimas directas como de sus familiares.

La CNDH reconoció el contexto de violencia que prevalece en Badiraguato y la presencia de grupos del crimen organizado en la región, pero señaló que ello no exime al Estado de su obligación de garantizar que los operativos de seguridad se conduzcan bajo los principios de legalidad, necesidad y proporcionalidad.

El organismo pidió a la Secretaría de la Defensa Nacional reparar integralmente el daño a las víctimas, reconocer su responsabilidad, colaborar con las investigaciones penales y sancionar administrativa y penalmente a los elementos involucrados.

Además, solicitó reforzar la capacitación en derechos humanos y uso de la fuerza, así como revisar los protocolos operativos, con el fin de evitar que hechos similares vuelvan a repetirse, especialmente en operativos donde haya presencia de niñas, niños y civiles.

“En este marco, si bien las condiciones de violencia contextualizan las acciones de las fuerzas armadas, no eximen al Estado de su obligación de asegurar que toda intervención de seguridad se realice conforme a los principios de legalidad, necesidad, proporcionalidad y rendición de cuentas, especialmente cuando el uso de la fuerza ha derivado en la pérdida de vidas humanas, como ocurrió en el presente caso, donde dos menores de edad fallecieron a consecuencia del uso ilegítimo de la fuerza militar”.