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Deceso

Heriberto Félix Navidad, pilar del campo y la comunidad de San Pedro, fallece a los 96 años

El reconocido agricultor y empresario originario de San Pedro Navolato será velado la noche de este 18 de noviembre en San Martín Montebello; deja un legado de trabajo, generosidad y arraigo comunitario
18/11/2025 19:32

Heriberto Félix Navidad, reconocido agricultor, empresario y uno de los personajes más emblemáticos de San Pedro, Navolato, falleció a los 96 años de edad.

Nacido el 26 de noviembre de 1929, fue hijo de Jesús Félix y Trinidad Navidad, y el menor de los hijos varones dentro de una familia de ocho hermanos.

Será velado esta noche de este 18 de noviembre en San Martín Montebello, y mañana 19 de noviembre a partir de las 9:00 horas.

Su vida estuvo siempre ligada al esfuerzo, al trabajo y a una profunda identidad con su comunidad.

Además de su labor en el campo, formó una familia junto a Sofía Guerra Miguel, con quien tuvo cuatro hijos: Guadalupe, Sofía, Heriberto y Rafael.

Su hijo, Heriberto Félix Guerra, fue candidato por la gubernatura de Sinaloa arropado por el Partido Acción Nacional en 2004 y ha desempeñado una amplia carrera política ocupando incluso el cargo de titular de la secretaría de Desarrollo Social en el sexenio del Presidente Felipe Calderón Hinojosa.

Desde temprana edad, Heriberto Félix Navidad mostró una habilidad excepcional para los negocios.

“Inició su vida de empresario a muy corta edad ayudando a sus padres en negocios propios del pueblo y haciéndose cargo a los 12 años del abarrote familiar”, señala un fragmento de la semblanza escrita por Óscar David Valenzuela Ibarra, ex Síndico de San Pedro.

Su capacidad llamó la atención incluso fuera de su comunidad: “Viajaba con frecuencia a Culiacán para hacer las compras llamando la atención de propios y ajenos por su sagacidad y viveza a esa corta edad”.

Su carácter emprendedor se manifestó desde muy joven. A los 16 años, con sus propios ahorros, compró un tranvía que llamó María Bonita, transportando a los sanpedreños a Culiacán. Poco después, abriría el cine del pueblo, al que nombró Acapulco y se involucraría en distintas actividades comerciales, desde una desgranadora de maíz adquirida junto a su padre, hasta la siembra de algodón y posteriormente la compra-venta de semilla en Sinaloa y Sonora.

Su contribución a la comunidad fue más allá de lo económico. Un fragmento de La Batalla: búsqueda de una identidad, de Norberto García Castillo, lo describe como un hombre profundamente arraigado a su tierra y generoso por convicción: “Don Heriberto ha sido impulsor sin que se sepa, entre otras cosas, de la calle principal de San Pedro y de su plazuela, así como de la pavimentación de la calle que lleva al monumento a general Antonio Rosales. Él no sabe de este reconocimiento porque ha sido muy discreto en su actuar; suele decir ‘haz el bien sin que se sepa, sin esperar nada a cambio’”, puede leerse en el mismo.

La misma obra recoge una definición afectiva sobre su carácter: “Ha sido un gran hijo, un gran hermano y un gran padre, orgulloso de sus raíces, sencillo, honesto, con valor y con valores, amante de su familia, de sus amigos, de la libertad y de la vida”.

En otro pasaje, García Castillo describe su personalidad con la serenidad propia de quien vivió plenamente: “Heriberto Félix Navidad es una persona amable, cuya conversación tiene los matices de la tranquilidad y la seguridad que se logran con la edad madura... una persona satisfecha y plenamente realizada como humano, como padre y como amigo”.

Dedicado durante décadas a la siembra de arroz, Don Heriberto encontró en el campo no solo su vocación, sino también una manera de generar empleo para sus paisanos. Su tenacidad ante los altibajos propios de la agricultura lo convirtió, de acuerdo con quienes lo conocieron, en uno de los más destacados hombres en el campo de Sinaloa, recordado con orgullo por la comunidad de San Pedro Navolato.

Su vida, marcada por el trabajo y la lealtad a sus raíces, deja un legado que trasciende generaciones en su comunidad.