Investigan a UAS, UAdeO y Tec de Culiacán por violencia de género
La Comisión Estatal de los Derechos Humanos tiene en curso cinco investigaciones por oficio en las que podría existir violencia de género de parte de autoridades educativas hacia las y los estudiantes.
Estas investigaciones involucran a la Universidad Autónoma de Sinaloa, la Universidad Autónoma de Occidente y el Instituto Tecnológico de Culiacán.
Las quejas fueron realizadas por la comunidad estudiantil de cada uno de estos espacios educativos y comenzaron en 2019, confirmó la oficina de atención a medios de comunicación de la CEDH.
En cuanto a la Universidad Autónoma de Sinaloa, las quejas abarcarían también el nivel de bachillerato.
La fecha en la que iniciaron las quejas coincide con el auge de los Tendederos del Acoso en Sinaloa: en 2019 estudiantes del Tecnológico de Culiacán realizaron una intervención en la que mediante señalamientos anónimos se expresaban situaciones de violencia de género y acoso sexual. Estas intervenciones constaban de papeles de colores en los que se resumian testimonios, o se acusaba a personas en específico.
La práctica fue replicada en las diferentes facultades y bachilleratos de la Universidad Autónoma de Sinaloa, y en la Universidad Autónoma de Occidente.
Noroeste documentó estas intervenciones y reunió algunos testimonios de situaciones en los planteles educativos señalados.
UAdeO
“En clase me miraba los pechos”, “La porra no puede entrenar a gusto por los guardias”, “Me toma fotos mientras estoy en su clase”, fueron algunas de la denuncias que se publicaron de manera anónima en la UAdeO en febrero de 2020.
Después de esta situación, la Rectora Sylvia Paz Díaz Camacho precisó mediante un comunicado con atención a medios que se atendería el tema.
“En la UAdeO no le damos la espalda a los problemas, los enfrentamos con estrategia y con acciones y este caso no va ser la excepción”, dijo Díaz Camacho.
Después de esto existieron investigaciones internas contra los docentes señalados, sin embargo no se deslindaron responsabilidades.
Tec. de Culiacán
“Es bastante difícil estar en el Tecnológico de Culiacán porque además de que muchos piensan que por ser mujer no tenemos capacidades de estar ahí, piensan que pasamos porque les gustamos a los maestros, o porque hacemos cierto tipo de favores”, explicó a este medio de comunicación una joven estudiante de ingeniería mecánica del Tecnológico de Culiacán.
Ante estas expresiones, el Director Norman Salvador Elenes Uriarte señaló que dentro de la institución no han existido denuncias sobre situaciones de acoso sexual como lo manifestaron estudiantes en el Tendedero del Acoso.
“No estamos exentos que se pueda presentar una situación de este tipo pero en términos generales te puedo hablar que se vive un ambiente sano”, comentó en febrero de 2020.
UAS
En la Universidad Autónoma de Sinaloa, el ex Rector Juan Eulogio Guerra Liera admitió que los protocolos internos de la institución son ineficaces al momento de atender casos de agresión sexual.
“Si se le separa del grupo (al docente acusado), finalmente si es un acosador va a estar la amenaza permanente; si lo suspendes pues le das vacaciones pagadas; y si lo dan de baja pues él acude con una autoridad externa la pelea y lo más probable es que gane la reinstalación y le tengas que pagar salarios caídos y hasta pedirle disculpas”, señaló en marzo de 2020.
Caso Sandino (UAS)
Por otra parte, una de las cinco investigaciones que mantiene Derechos Humanos fue motivada por el caso de la Preparatoria Augusto César Sandino, de la UAS, que se desarrolló a finales de febrero de este 2022.
En este bachillerato las autoridades educativas realizaron una revisión de uniformes, en donde midieron el largo de las faldas de las jóvenes e inspeccionaron el color de sus shorts interiores. En el caso de los varones, les retiraron accesorios como aretes o maquillaje.
El resultado de la revisión fue la expulsión por un día de las alumnas cuyo largo de falda sobrepasaba los 5 centímetros por encima de la rodilla.
“Hubieron comentarios que si las sacaban (de la escuela) no era responsabilidad de ellos (de las autoridades educativas) si las mataban o las violaban”, dijo a Noroeste un estudiante, cuyos datos se omiten en este artículo al ser menor de edad.
N ¿Eso dijo la Directora? ¿Usó esas palabras?
Eso dijo un supervisor, con esas palabras.
El mismo supervisor habría comentado que las jóvenes se muestran dispuestas a tener encuentros sexuales con desconocidos al finalizar las clases.
“Que si traían las faldas cortas las iban a subir a camionetas, ‘No, ellas se suben solas’, dijo”, relató otra estudiante.