Por recomendación de no probarse ropa, comercios del Centro de Culiacán reportan caída del 30% en ventas

CULIACÁN._ Ante la recomendación de Coepriss de no probarse ropa en tiendas por los casos de viruela del mono en Sinaloa, los comercios han registrado una caída en las ventas del 30 por ciento, informó el presidente de la Unión de Locatarios del Centro de Culiacán, Óscar Sánchez Beltrán.

“Se nos desplomaron hasta un 30 por ciento las ventas, realmente intentamos colaborar con la Secretaría de Salud en este sentido, sin embargo, no medimos el impacto que iba a generar el proponerles a los clientes no ponerse la ropa”, declaró.

De acuerdo con el líder de la ULCC, esta medida generó molestias en los compradores a tal grado que algunos llegaron a agredir verbal y físicamente a los empleados de las tiendas.

Por tal motivo, el gremio recurrió a colocar letreros donde se deja a criterio del cliente si este decide probarse o no la ropa.

Por su parte, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio en Culiacán, Jesús Antonio López Navarrete, reveló que en los comercios afiliados se acordó no prohibir el probarse la ropa y, por ende, solo mantener las medidas preventivas contra el Covid-19, como lo son la desinfección de manos y uso de cubrebocas.

Lo anterior fue determinado por parte de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio en una asamblea que se llevó a cabo a inicios de semana.

“Ese es un tema que estamos atendiendo desde la Concanaco a nivel federal, realmente, la posición de Concanaco es no prohibir el probarse la ropa en los centros de distribución, en las tiendas”, explicó.

En días pasados, la Comisión Estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios en Sinaloa dio a conocer que no está prohibido probarse ropa en tiendas, sin embargo, sí es una recomendación de la Secretaría de Salud debido a que la viruela del mono es una enfermedad altamente contagiosa que se transmite por contacto físico y al usar objetos infectados.

Hasta el momento, suman cinco plazas comerciales y establecimientos que han optado por no permitir que los clientes se prueben las prendas.