Prevalece el amor a la familia entre Evangelina y Miroslava
El blanco de su cabello igualaba el color de la blusa que lucía Evangelina al caminar por la explanada del Palacio Municipal acompañada de su nieta Miroslava, quien cazaba con la mirada el cubículo en el podrían recibir la atención que buscaban.
La brecha generacional entre las parientes parecía evidente, aunque no se comparara con el lazo familiar que las une.
Evangelina Núñez Coronel se apoyaba del bastón que sostenía con su mano izquierda en su recorrido por el Ayuntamiento de Culiacán, donde solicitaría un servicio de seguridad para la fiesta de cumpleaños número 18 de una de sus cuatro nietos.
Tal como este día, Evangelina como Miroslava comparten múltiples recuerdos paseando por las calles de la capital sinaloense para realizar trámites, mandados o comprar material para hacer manualidades juntas.
“Desde chiquita mi abuela me ha cuidado, le he acompañado, ella me ha acompañado a mí, me he navegado con ella en el centro buscando telas porque nos gustan mucho las manualidades, entonces, justamente venimos a este trámite y a comprar telas para hacer algunas prendas de vestir”, contó Miroslava Félix.
Según Evangelina, esta unión característica de su familia ha pasado de generación en generación, desde que sus padres le enseñaron a procurar la convivencia y el amor entre descendientes y progenitores.
“Son unos muéganos, que día, noche y tarde están conmigo, están encima de mí, pendientes, ella es mi nieta mayor y siempre la ves aquí pegada conmigo. Estamos juntos siempre, siempre”, dijo Evangelina.
“Hermanos, parientes, primos, tíos, siempre unidos entonces eso lo traemos ya de herencia, ya por tradición, somos a cómo nuestros padres nos enseñaron, nos educaron, entonces, un poquito de eso hemos transmitido a las generaciones nuevas que son ya un poco más abiertas, nosotros somos un poco más conservadores, pero así nos conectamos bien”.
¿Cuál es la clave para preservar el vínculo entre los seres queridos? Si le preguntan a Evangelina es el amor, el respeto, la comunicación y la convivencia.
“Como llega a ser a veces muy batallosa, muy rejega, muy necia, a veces que a la fuerza algunas cosas, pero siempre nos preocupamos por su salud y su bienestar, es nada más que eso, actuar por amor sin sobrepasarnos”, expresó Miroslava con una leve sonrisa pintada en su rostro.