‘Siempre vimos por los niños y las niñas primero’: Juan Alfonso Mejía López

Juan Alfonso Mejía López tomó el cargo como Secretario de Educación un 8 de octubre del 2018, sin saber los retos que una pandemia que nadie veía venir le haría enfrentar.

Aunque no fue en un principio, el designado para el puesto, cuando se le dio la oportunidad alzó la mano y tomó las riendas de esta Secretaría, y reemplazó a José Enrique Villa Rivera, en su breve paso.

Con un pasado relacionado con la educación, desempeñando su papel como presidente en Mexicanos Primero a nivel nacional, tenía noción de lo que el sector educativo necesitaba.

A pocos días de dejar su puesto como secretario de Educación, nos recibe en su despacho.

De fondo se escucha una música suave y relajante, Juan Alfonso Mejía López se dispone a prepararse un café y después empezar una conversación.

¿Qué fue lo primero que hizo cuando llegó a la Secretaría y cómo la encontró?

“Lo que buscamos hacer desde el principio es combatir la exclusión, nosotros consideramos que había un sistema educativo que tenía mucho tiempo caracterizado por la exclusión”, comenta durante una entrevista, días previos a dejar la Secretaría.

“Porque no todos los niños están y no todos los que están aprenden y mucho menos lo que pudieran o no aprender, se involucran en la toma de decisiones sobre cómo les interesa su educación, en pocas palabras para qué quieres las escuelas”.

Por lo que sus primeros pasos dentro de la Secretaría de Educación fueron el echar andar estrategias muy puntuales de problemas locales.

“Hay problemas muy específicos de abandono escolar, temas muy específicos de aprendizaje y problemas del impacto socioemocional de los niños y niñas, todo dentro de la pandemia”, comenta.

Ya que a su consideración, esperar a ver qué dicta la federación y ser una caja de resonancia es un error, y por ello resalta la idea de las estrategias locales para problemas locales.

El haber estudiado el sistema educativo, es algo que considera le dio ventaja al llegar a la Secretaría.

Por ejemplo, uno de los puntos a rescatar es que en Sinaloa y el País no existía una política pública dedicada a la primera infancia.

“Los niños de cero a seis años, eran invisibles. Luego en los exámenes de Planea o Enlace, Sinaloa era siempre el número 26 o 27, siempre estaba en el sótano”, dice.

“Era sumamente constante en una suerte de parálisis que se detectaba en el aprendizaje, alguna vez hubo una prueba que se realiza en el 2015 y por lo menos alrededor de un poco más de 100 escuelas todos los alumnos sacan cero”, detalla.

“Y bueno, yo antes de ser Secretario de Educación lo señalaba, entonces por otro lado me llamaba mucho la atención que el tema de la alfabetización era una constante de que se necesitaba hacer algo, pero no había”.

Por lo que la acción fue formar políticas públicas para los niños y niñas que les beneficiaran en sus aprendizajes.

El Secretario menciona algunas de las estrategias que se echaron a andar como; Primero de Primaria es Tarde, Aprendamos Juntos y la Bandera Blanca.

Primer contacto con los docentes

La plática continúa, ahora se pone en la mesa, el tema de los docentes, cuál fue el primer acercamiento y qué es lo que le solicitaron.

“Parecía que los profesores traían dolor real, y por el tema de no suspender sus trayectorias educativas, que hubiera concursos, generar más plazas donde hacían falta y sobre todo estar presente en las escuelas”, cuenta.

Relata que en el 99 por ciento de las escuelas que visitó, era el mismo comentario: “aquí nunca antes había venido ningún secretario”, y por ello decidió ser el Secretario del “nunca antes”.

En cuanto a lo que se puso en marcha dice, fueron estrategias focalizadas y personalizadas de acuerdo a las necesidades de la entidad.

“Detectábamos un problema y ese problema no lo escondíamos, lo evidenciábamos públicamente, lo medianos, decíamos que íbamos a buscar por adelantado e implementábamos una estrategia bajo el ojo público y nos sometíamos al escrutinio al momento de la medición después de la estrategia y lo mostrábamos”, señala.

Destaca que en año 2019 se echó a andar la estrategia Aprendamos Juntos y eso movió a Sinaloa por primera vez en la historia.

“No solamente lo sacó del sótano, sino que lo llevó al segundo lugar en aprendizaje en secundaria y luego el año que siguió en 2020 repitió la dosis, pero para el nivel media superior para bachillerato”, detalló.

Un logro que con anterioridad no se había obtenido, recalca.

Además de la elaboración de un diagnóstico de cómo están los niños y niñas antes de llegar a las escuelas, estudio que ningún estado lo tiene, más que Sinaloa.

Violencia y problemas de la entidad

Al cuestionar sobre la situación educativa en Sinaloa con un contexto de violencia y zonas serranas de difícil acceso para los estudiantes, dice que esto se combate con oportunidades.

“El tema de la violencia y otros problemas que hay se combaten con oportunidades, incluso el tema de la violencia se combate con oportunidades, pero si la escuela no te genera oportunidades, entonces te genera otro tipo de problemas y se vuelve contra ti”, expresa.

Mejía López, señala que reproducir violencia, reproduce desigualdades, entre otras tantas cosas, entonces lo primero que se tiene que entender es el contexto.

“Pero no puedes entender el contexto desde un escritorio, por eso tienes que visitar las escuelas, visitamos más de 400 escuelas”, señala.

Al momento que llegó la pandemia, dijo se tomaron aspectos de desigualdad, en los que niños y niñas de zonas serranas o los mismos de la zonas urbanas no pudieran acceder a plataformas digitales, pues se adecuaran las formas de impartir clases.

Permitiendo así a los docentes, utilizar otras herramientas y todo esto dependiendo del contexto en el que se encontraban las escuelas y los estudiantes.

“Le dimos al maestro, la posibilidad de que adopte, si era radio, si era tele, cuadernillo, WhatsApp, la plataforma que eligiera, y luego al momento de evaluar le diera particular importancia a cómo mejora el niño sobre sí mismo”.

“Eso, no es una estrategia nacional, es una estrategia nuestra focalizada y que la medimos... con resultados donde Sinaloa mantiene aprendizajes por arriba de la media nacional”, explicó.

La pandemia

La llegada del Covid-19, marcó una pauta en la administración actual, que tuvo que enfrentar distintos retos, para los que nadie estaba preparado y se tuvieron que adecuar conforme a la marcha, para el Secretario de Eduación, esto abrió un abanico de posibilidades.

“Nos abrió un mundo de posibilidades exquisitas, la primera y las más importante, y espero que el día de mañana se trabaje sobre ella: el Secretario es una pieza, nada más de la maquinaria, no es la maquinaria”, señala.

“El sistema educativo son distintas piezas que para que funcionen tienen que actuar de mejor manera frente a desafíos, más si no son esperados se necesitan unos a otros... que el director decida en su escuela qué se va a hacer, eso es una auténtica revolución”.

El Secretario recordó como normalmente las indicaciones vienen desde la federación y se acatan, pero que esta vez, fue importante darle autonomía a cada plantel para que trabajaran de acuerdo a sus necesidades.

“La fragilidad del sistema es una gran oportunidad y creo a juzgar por los resultados que les presentamos, pues eso fue una gran diferencia frente al País entero”, dice.

De acuerdo a la apertura de las clases y el regreso a clases, menciona que lo que se tiene que generar es confianza.

“Tú quieres recuperar al final de cuentas el día de mañana el impacto de la pandemia, no lo dudes, esa recuperación de confianza va a pasar por las escuelas y eso va a suceder por los maestros, así que necesitas a la escuela para mantener la confianza de toda la comunidad sinaloense”, expresa.

Educación a distancia

Al llegar la pandemia, y la indicación de todos estar en casa, desembocó en un método de educación a distancia, pero también la implementación de la tecnología como una de las principales herramientas para la impartición de clases.

“Yo creo que concentrarse en la brecha digital es un error, es un falso dilema, las escuelas en Sinaloa eran inequitativas, mucho antes de cualquier brecha digital”, comenta.

“Por ejemplo si las escuelas son lo más importante como he escuchado cantidad de políticos que dicen, nunca habríamos tenido tantas escuelas con deficiencias en la infraestructura”.

Destaca que el rezago en infraestructura cuando llegó a esta oficina era de 3 mil 100 millones de pesos y contando, “si fuera tan importante para tantos políticos que pasaron en distintas dimensiones, nunca habría habido ese rezago”, dice.

La inequidad ya estaba presente, reducirla a la parte tecnológica es miopía, ese no es el rezago”.

En cuanto a los docentes dijo, se les brindó capacitación y acompañamiento para estas nuevas formas de enseñanza, ya que no todos los alumnos tenían acceso a internet y las tecnologías, por lo que se tuvieron que hacer adaptaciones.

Regreso a las aulas

Después de más de 20 meses de pandemia, con un esquema de clases a distancia o digital, y conforme a un avance en la protección contra el coronavirus, el siguiente reto era retomar la normalidad y volver a las aulas, proceso que dice tiene que ser sin prisas, pero sin pausas.

“El mayor reto es entender que la presencialidad es un proceso, no es un decreto, no porque digamos todos vuelven van a florecer como florecitas en el campo al día siguiente, ese es un proceso y exige de mecánicas”, comenta.

“La gradualidad misma por ejemplo, cómo decides qué escuelas empiezan a tomar la delantera sobre otras”.

Ejemplifica el caso de Sinaloa, que gracias a un diagnóstico se sabe si el tema del semáforo condiciona el control que se tiene que tener sobre la presencialidad.

Resalta que de acuerdo a los datos del diagnóstico realizado, se focaliza la importancia del regreso a la presencialidad en el nivel de secundaria, pues es ahí, donde se están presentando los problemas de manera particular con los niveles de deserción, por lo que primaria puede esperar y preescolar también.

“Hay que entender los contextos para focalizar, la elección de las escuelas que hemos hecho al día de hoy son 2 mil 255, abarca más menos el 84 por ciento, de las escuelas que se convocaron para el regreso presencial”, comenta.

“No convocamos a todas, porque en ese cruce dijimos de acuerdo a los niños, cuáles tienen una urgencia educativa, cuáles están perdiendo aprendizajes o están a punto de abandonar o cuáles no tienen condiciones sanitarias para regresar y de ese cruce hicimos selecciones”.

El Secretario destaca que esto se logró con base en el método que se echó a andar en los Centros Comunitarios de Aprendizaje, desde el mes de abril pasado.

Teniendo 26 mil niños, durante 6 semanas, solamente se tuvo bajos porcentajes de contagio entre los alumnos y alumnas.

A la fecha las clases presenciales se mantienen, y van incrementando los planteles educativos que se van sumando a la presencialidad, en esta nueva normalidad.

Camino a culminar la entrevista, el Secretario de Educación nos comparte, lo que fue su experiencia dentro de ésta dependencia estatal, durante estos poco más tres años en este cargo.

- ¿Alguna vez se imaginó ser Secretario de Educación?

- Yo no lo pondría nombre, pero a mí lo que me motiva son las causas, eso sí me motiva, me motiva desde hace mucho tiempo luchar en contra de las injusticias, detesto las injusticias, las detesto.

Y encontré quizás desde una manera personal, que la mejor forma de combatirlas es desde la educación y poco a poco fui encontrando ese camino en organizaciones de sociedad civil, en distintas posiciones de mi trayectoria, soy maestro a nivel universitario y la verdad es que no tenía necesariamente imaginado que quería ser Secretario de Educación, porque me parece que pudo seguir construyendo a favor de generar oportunidades para los niños, desde cualquier lugar, que no necesariamente es una silla.

- ¿Satisfacción personal?

- Llegué solo, con una mochila empecé a pasear justamente por el edificio de enfrente (de su despacho), había gente que me decía: ‘¿usted es el Secretario de Educación?’, y la verdad es que hoy me voy con un equipo, estoy muy agradecido con las maestras y maestros, los hombres y mujeres que me encontré en este camino y que si la logré librar fue siempre gracias a ellos, así que la gran satisfacción fue salir con equipo.

- ¿Logró estandarte de su administración?

- Pues espero, que si algo quedara, es que dijimos; primero los niños. Todas las acciones que hicimos fue primero entender qué le favorecía a las niñas y a los niños y cuando había dudas, incluso hasta políticas, incluso hasta órdenes, siempre decíamos en el equipo: “¿Qué le beneficia a las niñas y a los niños?”. Esto. Eso hagan y asumamos la consecuencia.

- ¿Qué va a extrañar?

- Caminar en las escuelas fue muy satisfactorio, espero poder seguir haciéndolo, pero también entiendo que hay que tomar cierta distancia.

26 mil niños

Se tuvieron en los Centros Comunitarios de Aprendizaje durante 6 semanas

2 mil 255

Escuelas convocadas para el regreso de las clases presenciales

84%

De los planteles se propone estén ya con alumnos en las aulas