Teresa Peña vende ropa desde hace 30 años

Hace 30 años, Teresa Peña comenzó en el negocio como vendedora de ropa en los tianguis de Culiacán. Antes de eso, tenía un restaurante y la ropa que tenía de sobra la vendía, pero su esposo falleció, por lo que tuvo que ver más por sus hijos.

“Yo empecé, tenía un restaurante también, pero después empecé con poquita ropa y quedé sola, se murió mi esposo. Comencé a trabajar yo solita, hacía tamales, de todo hacía, todo hacía. Me quedé con ocho hijos y trabajé para sacarlos adelante”, recordó la comerciante.

Estuvo hasta cuarentena vendiendo en diferentes tianguis de la ciudad, como Los Huizaches, Felipe Ángeles, Terrones, Laureles Pino y otros más. Comentó que se salió porque había mucha competencia y eso a ella no le gustaba.

Durante el 2020 fue cuando se puso en la Ley que está cerca del Estadio de los Tomateros, porque miró que era un lugar confiable y tranquilo para ponerse todos los días.

“Ya no voy para allá porque hay mucha competencia y pues aquí estoy sola. Hay otra compañera, pero aquí sí sacamos para comer”, dijo.

Teresa Peña hizo crecer a sus hijos a partir del negocio de la venta de ropa y siete de sus hijos ahora están casados. Sólo se quedó con la más pequeña, a quien le ayuda con los gastos de la renta de un pequeño departamento.

“En primer lugar, ahorita ya no tengo yo, ya mis hijos están todos casados, ya más bien lo hago para ayudarle a mi hija con la renta, con los gastos de la casa, porque rentamos un departamento”, señaló.

Aclaró que no podría dejar el puesto de ropa, ya que le brinda felicidad, porque es lo que le gusta. Indicó que hasta donde le lleguen sus fuerzas seguirá vendiendo.

“También me sirve a mí de terapia, porque el día que no vengo yo me enfermo, me pongo a pensar cosas que estoy enferma de otras cosas, otra y otra. Aquí no, me distraigo”, expresó Teresa Peña.