"Venta de artículos robados se está convirtiendo en modus vivendi de muchas personas: ALTO México"
La venta de artículos robados es una modalidad que ha tomado fuerza en los últimos tiempos y que poco a poco se está convirtiendo en el modus vivendi de muchas personas, informa la empresa ALTO México.
En un estudio realizado ALTO México, se encontró que el 70 por ciento de los artículos robados se utilizan para vender, mientras que el 30 por ciento son para uso personal; de lo que se destina a la venta el 70 por ciento es colocado en tianguis y el 30 por ciento se promociona por Internet.
ALTO México identificó a través de su estudio que las personas que se dedican a vender productos robados, ocupan redes sociales para promocionarse: el 18 por ciento a través de Facebook, el 7 por ciento por medio de grupos de Whatsapp, el 3 por ciento en Twitter; y el 1 por ciento de cada uno se promociona por medio de Mercado Libre y Segunda Mano.
Karina Soriano, directora jurídica y vocera oficia de ALTO México destacó que cuando los productos están muy por debajo de su precio normal, podría ser una alarma de estar ante la negociación de un artículo que posiblemente se adquirió de manera ilícita.
ALTO México informó que los objetos que más se pueden encontrar a la venta por Internet, y que se han identificado que son hurtados por bandas especializadas debido a las constantes publicaciones, así como por las cantidades de producto que publican, son: celulares; equipos de cómputo como tablets, laptops, consolas; relojes; joyería y ropa.
El reporte indicó que en tanto a las personas que venden regularmente artículos de uso personal como desodorantes, shampoos, maquillaje, artículos de limpieza y del hogar, así como bebidas alcohólicas, son gente que robó poco y que quiere sacar algún provecho de lo sustraído.
“Lograr vender algo que se sustrajo de manera ilícita, y que además no será cuestionada por nuestro comprador, puede ser bastante atractivo para los amantes de lo ajeno, que de pasar a vender tres artículos hurtados puede convertirse en un ladrón profesional saqueando grandes cantidades para surtir su tiendita en línea” refirió.
La directora jurídica y vocera oficia de ALTO México dijo que el problema cuando se compran artículos robados aunque se desconozca su procedencia es que es un delito denominado “encubrimiento por receptación”, que lamentablemente la Ley no favorece al consumidor en casos de desconocimiento.
“Lamentablemente la Ley no da beneficio a los compradores de buena fe y el simple hecho de tener en tu posesión un producto de procedencia ilícita si te convierte en una persona que puede cometer un delito, que se incrementa la pena si la compra es del giro al que te dedicas”, explicó.
Destacó que toda la mercancía producto de un hecho ilícito es prácticamente rematada, por lo que no tiene lógica el descuento que se le aplica y lo barato que cuesta; hay productos con descuento que se pueden justificar, pero dijo, son compras que se pueden acreditar a través de una factura.
ALTO México identificó que el género que más vende artículos robados son los hombres con un 80 por ciento y las mujeres con un 20 por ciento; la edad promedio de ambos va de los 17 a los 32 años.
El estudio reveló que del 20 por ciento de las mujeres que venden por Internet ofrecen como principal mercancía fórmulas lácteas, lencería y artículos de belleza, que algunos de estos artículos, en varias ocasiones, son por medio de encargos.
“Los anuncios lo hacen saber así: “Te consigo la marca que quieras”, “Paga solo la mitad del precio de tienda”, ”Artículos únicos y baratos”, incluso se ha identificado que mantienen intactas las etiquetas con los precios originales para remarcar la diferencia”, explicó.
ALTO México destacó que debe buscarse una regulación a través de autoridades, pues la venta de medicamentos robados a través de la Web está tomando auge, pues no sólo implica robo sino delitos a la salud, y que no sólo el vendedor está cometiendo una infracción, sino el comprador también al adquirirlo; se pueden encontrar fármacos como retrovirales, interferones u oncológicos; los cuales deben adquirirse con receta por ser controlados.
“El mantener las identidades ocultas en Internet, no asegura que en algún momento puedan ser descubiertos los delitos que están alrededor de la mercancía publicada, no confiemos en el anonimato a simple vista, pues en estos tiempos de inmediatez, podría ser más fácil dar con los ladrones de manera virtual que de manera presencial”, señaló.
Karina Soriano destacó que hay una coordinación constante por parte de ALTO México con autoridades como el MP, Policía Inteligente y Cibernética, Secretaría de Seguridad Pública, tanto para los delitos como para diversas investigaciones en relación al tema.
Detalló que es importante que se compren productos en establecimientos formales, o bien, por tiendas que sean avaladas por la Asociación Mexicana de Venta Online; personas morales identificadas; que brinden certeza que los productos no son adquiridos de manera ilícita.