Francisco Campos es entronizado al Salón de la Fama del Beisbol Mexicano
El beisbol mexicano celebra la inmortalidad de una de sus figuras más emblemáticas. Francisco Campos Machado, “Pancho Ponches”, actual gerente deportivo de los Tomateros de Culiacán y uno de los lanzadores más dominantes en la historia reciente del beisbol nacional, fue entronizado este jueves al Salón de la Fama del Beisbol Mexicano, como parte de la Clase 2025.
Originario de Guaymas, Sonora, Campos forjó una carrera ejemplar caracterizada por la constancia, la disciplina y un dominio que trascendió generaciones. A lo largo de más de dos décadas, el derecho escribió su legado tanto en la Liga Mexicana de Beisbol (LMB) como en la Liga Mexicana del Pacífico (LMP), consolidándose como referente absoluto del pitcheo mexicano.
Francisco Campos inició su carrera profesional como receptor, antes de que su talento natural desde la loma lo transformara en un lanzador de élite. Esa visión única del juego, producto de haber conocido ambas posiciones, lo llevó a convertirse en un estratega dentro del diamante, con la capacidad de analizar y dominar cada enfrentamiento.
En la LMB, “Pancho Ponches” brilló principalmente con los Piratas de Campeche, alcanzando la prestigiosa marca de 200 victorias y acumulando más de 2 mil 180 ponches a lo largo de su carrera. Su efectividad de por vida cercana a 3.30 y su presencia en más de 3 mil entradas lanzadas lo colocan entre los mejores serpentineros en la historia moderna del circuito veraniego.
En el invierno, su nombre quedó grabado con letras doradas en la historia de los Venados de Mazatlán, donde consiguió la triple corona de pitcheo durante la temporada 2003-2004, con récord de 10 triunfos, efectividad de 2.19 y 68 ponches. Ese mismo año, lideró el circuito en las tres principales categorías de lanzadores, coronando una campaña de ensueño.
Su dominio fue constante: encabezó la LMP en ponches durante cuatro temporadas consecutivas y registró 18 ponches en un solo juego de postemporada, una cifra que aún se mantiene como una de las más altas en la historia del beisbol invernal mexicano.
Más allá de las estadísticas, Francisco Campos destacó por su liderazgo y carácter competitivo. Fue un ejemplo de entrega dentro y fuera del terreno, y su ética de trabajo lo mantuvo vigente durante más de 20 años, imponiendo respeto en cada plaza donde lanzó. Su compromiso con el beisbol continuó tras su retiro, asumiendo el rol de gerente deportivo de los Tomateros de Culiacán, donde ha contribuido a fortalecer la estructura deportiva del club, aportando su experiencia, visión y conocimiento del juego.
Durante la ceremonia en Monterrey, Campos recibió oficialmente su placa como inmortal del Salón de la Fama, distinción que reconoce una trayectoria de excelencia y una vida dedicada al beisbol. Con 48 votos del comité electivo, su ingreso simboliza el respeto y la admiración de toda la comunidad beisbolera mexicana.
“Este reconocimiento representa toda una vida de esfuerzo, sacrificio y amor por el juego. Es un orgullo estar junto a los grandes nombres del beisbol mexicano”, expresó emocionado el nuevo inmortal, acompañado de su familia y figuras históricas del deporte.
“Para la organización Tomateros de Culiacán, la entronización de Francisco Campos es motivo de profundo orgullo. Su figura representa la disciplina, la entrega y los valores que distinguen a nuestra institución”, expresó el club guinda en un comunicado.
“El Club Tomateros celebra y felicita a su gerente deportivo por este logro histórico, convencido de que su legado continuará inspirando a las futuras generaciones de peloteros mexicanos”.
“Pancho Ponches” no solo es un ícono del montículo, sino un símbolo del compromiso y la pasión que definen al beisbol en México. Hoy, su nombre queda grabado para siempre entre los grandes.
