Peloteros de los Guardianes son agredidos por aficionados de los Yanquis durante el juego del sábado

NUEVA YORK._ Los fanáticos en las gradas del jardín derecho arrojaron botellas, latas y escombros a los jardineros de los Guardianes de Cleveland en una escena caótica momentos después de que Isiah Kiner-Falefa y el bateador emergente Gleyber Torres se anotaron hits que impulsaron carreras con dos outs en la novena entrada para llevar a los Yanquis de Nueva York a una victoria de 6-5 el sábado.

En lugar de una celebración, Aaron Judge y sus compañeros de equipo de los Yanquis corrieron hacia la pared en el jardín central derecho, tratando de calmar a la multitud mientras el personal de seguridad se unía al esfuerzo.

El cerrador de Cleveland, Emmanuel Clase (0-2), estuvo a un strike de preservar una ventaja de 5-4 cuando Kiner-Falefa conectó una bola rápida de 100 mph para un doblete que trajo el empate. El jardinero izquierdo novato Steven Kwan corrió con fuerza contra la pared persiguiendo la pelota y se sacudió, y un entrenador salió a revisarlo.

Antes de que se reanudara el juego, el jardinero derecho de Cleveland, Oscar Mercado, señaló las gradas y el jardinero central Myles Straw trepó la cerca de tela metálica de la izquierda para confrontar al menos a un fanático cara a cara, mientras que otro fanático cercano hizo un gesto despectivo.

“Brutal”, dijo Straw en su disponibilidad posterior al juego. “La peor base de fans del planeta”.

El mánager de Cleveland, Terry Francona, al reconocer que los Guardians estaban un poco emocionados al final del juego, no estaba tan contrariado como Straw, pero sí igualmente decepcionado.

“No creo que la gente pueda arrojar cosas a nuestros jugadores en el campo”, dijo Francona. “Eso nunca va a estar bien”.

Torres siguió conectando un sencillo entre el jardín derecho y el central para la anotación del triunfo. Mientras Mercado y Straw perseguían la pelota en el hueco, varios fanáticos comenzaron a lanzarles objetos.

Los jugadores de los Yanquis, que primero corrieron para encontrarse con Torres en las bases para celebrar, luego corrieron al lugar del jardín para sofocar el alboroto.