De la Patagonia a Alaska en combi: Pareja argentina hace escala en Mazatlán dentro de su aventura

MAZATLÁN._ Son pocas la personas que toman la decisión de dejarlo todo atrás para iniciar una nueva aventura y perseguir el sueño de recorrer y conocer el mundo en su vehículo, sin importar el tiempo y la distancia.

Tal es el caso del matrimonio conformado por Ariel Mancuso y Soledad Oviedo, dos argentinos amantes de la aventura, quienes tomaron la decisión de recorrer el todo el continente americano en su vehículo Volkswagen Transporter Kombiwagen, mejor conocido como “combi”.

Fue en el año 2012 cuando el sueño inició para Mancuso y Oviedo, quienes comenzaron con los preparativos de la que sería una de las máximas hazañas en su vida, la cual arrancó de manera oficial y comenzaron a rodar en el 2015.

“El sueño de viajar hasta Alaska inició en el 2012, luego de conocer a un viajero que dio la vuelta al mundo en motocicleta, el cual me inspiró, le compré su libro y pensé que si él puede, ¿por qué yo no?”, dijo Mancuso.

“Compramos la combi con, en ese momento, mi novia, la fuimos transformando en una casa rodante y para el 2015, renunciamos al trabajo, la casa, la familia, amigos y salimos de viaje”.

Fueron cuatro años los que duró la feliz pareja en conseguir su cometido, buscando iniciar desde la región geográfica más ubicada al sur posible, siendo ésta la Patagonia, para posteriormente recorrer el resto del continente y llegar en el 2019 a Alaska.

“Fuimos primero a la Patagonia, donde no llegamos hasta allá en la combi porque nos cogió el invierno patagónico, el cual es muy frío y peligroso, pero hicimos el recorrido casi hasta el final y ya de ahí iniciamos el camino de vuelta hasta el Círculo Ártico”.

Durante este cuatrienio, Mancuso y Oviedo pudieron recorrer un total de 17 países y alcanzar cerca de los 100 mil kilómetros, hasta poder llegar al extremo norte del continente, donde no sólo se acumularon kilómetros, sino también grandes vivencias e historias en el camino.

“Ha sido un viaje muy lindo, donde hemos vivido muchísimas historias y anécdotas, recorriendo Chile, Bolivia, Perú, Ecuador y Colombia, así como muchos más países, y esto todavía no termina, todavía nos faltan algunos dos años más para llegar a Argentina”.

“Queremos hacer la ruta, si es posible de ir por Venezuela, Brasil, Uruguay y Paraguay, para finalmente ingresar a Argentina”.

Fue un mes el que estuvo el matrimonio en Alaska, donde les tocó experimentar un fenómeno natural conocido como el “Sol de Medianoche”, que durante el solsticio de verano, el sol es visible las 24 horas del día.

“Nos tocó estar allá durante todo el mes de julio, el mes del verano, donde nos tocó vivir mucho calor y muchos mosquitos, llegando a los 35 grados, contrario a lo que uno podría creer de que en Alaska siempre hace frío”.

Así pues, después de un mes de haber cumplido el sueño y llegado a Alaska, la travesía no terminó para Ariel y Soledad, quienes emprendieron su viaje de regreso a su país natal.

Por tal razón, actualmente se encuentran en México, en donde ya han recorrido un total de 26 estados del país, llegando hasta Mazatlán para sumarse al evento que de momento se celebra en el puerto, el Carnalazo Vochero.

“Nunca habíamos venido a Mazatlán o Sinaloa, estábamos en Puerto Vallarta cuando nos enteramos de este evento y coincidieron las fechas, por los que nos venimos unos días para acá”.

“Primero nos venimos a conocer la ciudad y nos preparamos para llegar a este evento que es muy grande y muy bonito”.

Lo que fue una casualidad del destino se convirtió en una gran experiencia para la pareja argentina, que se sumó a esta celebración en todos los eventos que tuvieron lugar, disfrutando sobre todo el magno desfile que se celebró el sábado.

“Estuvimos en el desfile y fue uno muy grande por todo el Malecón, impresionante la cantidad y calidad de vehículos que se reunieron, los cuales vinieron de varios estados e incluso de Estados Unidos.

“Y más acá en Mazatlán, que es una ciudad muy bonita. Desde el primer día nos han tratado muy bien, la gente se acerca a platicar y es una muy buena onda de parte de toda la ciudad”.

Una combi hecha casa

Lo que pudiera parecer un recorrido cansado y costoso ha sido un gran reto el cual Mancuso y Oviedo han conseguido superar, pues prácticamente han convertido su combi en una casa rodante.

“Lo tenemos bien preparado, tenemos un sofá cama, un espacio para guardar los trastes, así como un depósito que nos permite contener agua, un baño con limitaciones y panel solar.

“Está muy bien acondicionada, por lo que estamos muy cómodos en este viaje sobre nuestra combi”.

Asimismo, Ariel y “Sole” han buscado la forma de poder financiar su viaje, ahorrando en algunos puntos, como lo es la estadía al quedarse a dormir en su vehículo.

También han optado por la creación de artesanías, las cuales venden en distintos puntos para poder solventar los gastos que se presentan como lo es la comida y gasolina.

“Hacemos más que nada artesanías, como lo son postales, stickers, algunas combis de juguete y básicamente con eso hemos podido financiar este viaje. El gasto principal es comida, gasolina y algún extra.

“Lo que sí no hacemos es quedarnos en algún hotel, dormimos en la calle en nuestro auto al cien por ciento”.

Mancuso y Oviedo han regresado de manera ocasional a su país natal, a través de viajes aéreos, dejando su vehículo en algún lugar del resto del continente, para poder pasar algunas fiestas en familia y realizar trámites.

Durante el inicio de la pandemia, el dúo estuvo en México, donde terminó regresando a Argentina, después de lo complicado que podía ser el viajar y recorrer el país con las restricciones establecidas por varios países.

DATO

La historia y aventura que van escribiendo Ariel y Sole la puedes seguir a través de sus redes sociales como Facebook e Instagram, bajo el nombre de Persiguiendo al Conejo o Blanco.