El Gran Premio de México se vuelve un evento para una élite de mexicanos

MÉXICO._ La Ciudad de México acogerá por séptima ocasión, desde 2014, una carrera de la Fórmula 1, uno de los eventos deportivos más importantes del año, al cual el Gobierno Federal, capitalino y la iniciativa privada destinan millones de pesos para su organización, pero donde sólo los círculos más ricos pueden asistir.

Para la mayoría de las personas puede resultar complicado pagar una entrada para la Fórmula 1 (que incluye el día de pruebas, las clasificatorias y la carrera) la cual alcanza hasta los 27 mil pesos por boleto.

Según datos del índice de pobreza 2020 del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), en la Ciudad de México se registró un aumento de población en situación de pobreza, al pasar del 28.3 por ciento en 2018 a 32.6 por ciento en 2020. Además, la población en situación de pobreza extrema también registró un incremento al subir del 1.7 por ciento hasta el 4.3 por ciento.

De acuerdo con la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami) a partir del 1 de enero de 2022, los salarios mínimos tuvieron un incremento del 22 por ciento para pasar de 213.39 pesos a 260.34 en la Zona Libre de la Frontera Norte y de 141.70 pesos a 172.87 en el resto del país.

A pesar de esta situación, la organización del evento dio a conocer el rango de precios para el Gran Premio de este año, los cuales van de los mil 500 pesos hasta los 27 mil pesos por un solo boleto, un costo que es inaccesible para muchas personas.

Tomando en cuenta estos datos, una persona que gana 260.34 pesos al día, el salario mínimo en el resto del país, tendría que ahorrar por 96 días, sin hacer ningún tipo de gasto, para comprar un boleto de 27 mil pesos en la zona verde, el más caro de este año. Para adquirir una entrada en la zona amarilla, en donde se llegan a cotizar hasta en 14 mil 800 pesos, una persona tendría que ahorrar por 56 días sin gastar.

Para comprar un boleto en la zona azul, donde alcanzan precios de hasta 10 mil 600 pesos, una persona que gana el salario mínimo tendría que ahorrar y no gastar nada por 40 días. En la zona gris, donde las entradas se cotizan hasta en 8 mil pesos por persona, habría que realizar un ahorro de 30 días sin hacer ningún tipo de gasto y en la zona café, donde los tickets cuestan 6 mil 600 pesos, se tendría que juntar dinero por 30 días. Finalmente, en la zona naranja, la más barata del evento con un precio de mil 500 pesos, habría que ahorrar por 5.7 días sin gastar nada.

A esta problemática se suma los cargos por servicio y que la gran mayoría de las entradas se venden a través de preventas para tarjetahabientes de tres bancos que patrocinan el evento, lo que reduce de manera drástica el número de boletos que llegan a la venta general.

Para muestra de esta situación, durante el Gran Premio de México 2021 fue posible ver a decenas de aficionados, que no pudieron pagar un boleto, tratando de ver parte de la carrera desde las rendijas de los puentes peatonales que se encuentran alrededor del autódromo Hermanos Rodríguez.

UN EVENTO PARA LOS MÁS RICOS

Cada año, el Gran Premio de México sirve como pasarela para políticos, empresarios y celebridades quienes se dan el gusto de caminar por la zona de pits, posar para las cámaras y hasta para charlar por algunos minutos con pilotos como Lewis Hamilton, Marx Verstappen, Charles Leclerc, Sebastian Vettel y el mexicano Sergio “Checo” Pérez.

Los empresarios Emilio Azcárraga, Carlos Slim, Arturo Elías Ayub, Olegario Vázquez Raña, el periodista Sergio Sarmiento y el cantante Emmanuel fueron algunas de las personalidades que asistieron al pasado Gran Premio de México.

La edición de este año, que se lleva a cabo del 28 al 30 de octubre, tiene un toque especial, pues celebrará 60 años de que la capital del país recibió por primera vez una carrera del máximo circuito del automovilismo.

El retorno de la Fórmula 1 a México se remonta a 2014, cuando el Gobierno de México firmó un contrato para la realización de cinco carreras del campeonato mundial de automovilismo, lo que marcó el regreso de la competición a territorio nacional después de 23 años de ausencia.

De acuerdo con datos de la Secretaría de Turismo federal, en 2015, el Gran Premio de México contribuyó a la economía del país con 3 mil 944 millones de pesos, que sumados a los 4 mil 705 millones de pesos, valor de la exposición mediática global, dieron como resultado 8 mil 649 millones de pesos.

La dependencia detalló que solamente en 2015, la remodelación del Autódromo Hermanos Rodríguez generó 4 mil 112 millones de pesos adicionales generando una derrama económica total para México de 12 mil 761 millones de pesos.

También se detalla, que las tres primeras ediciones del Gran Premio de México dejaron al país y a la Ciudad de México una derrama económica superior a los 23 mil millones de pesos, cantidad que supera en un 600 por ciento al monto de dinero público utilizado para realizar todo el evento.

A pesar del éxito de la Fórmula 1 en México, en febrero de 2019, el Presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que el Gobierno de México ya no destinaría recursos públicos para organizar la carrera, situación que puso en vilo la permanencia de la competencia en la capital del país.

Después de meses de especulaciones y negociaciones para definir el futuro del evento, el 8 de agosto de 2019, la Jefa de Gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum Pardo, y los presidentes ejecutivos de Corporación Interamericana de Entretenimiento (CIE), Alejandro Soberón Kuri, y de Fórmula 1, Chase Carey, firmaron un contrato para mantener el campeonato de automovilismo más importante del mundo en la Ciudad de México tres años más, de 2020 a 2022.

La mandataria capitalina dijo que el Gobierno Federal llegó a aportar hasta 40 millones de dólares para la realización del evento, por este motivo, Sheinbaum Pardo aseguró que la capital del país ya no podía cubrir este monto, por eso se tomó la determinación de dejar de destinar este dinero para la carrera y usar el recurso en otros proyectos prioritarios.

Claudia Sheinbaum detalló que en este nuevo contrato la capital del país no erogaría recursos públicos, estimaba una derrama económica de más de 14 mil millones de pesos y la creación de 8 mil empleos temporales en la siguiente temporada.

“Gracias a un grupo de empresarios que hicieron esto posible, porque en esta ocasión la ciudad no está invirtiendo ningún recurso público”, dijo Sheinbaum durante el anuncio.

De acuerdo con datos de la Secretaría de Turismo federal, la pasada edición del Gran Premio de México generó ganancias por 14 mil 375 millones de pesos gracias a los más de 371 mil espectadores que acudieron a la carrera.

El pasado 2 de marzo, Claudia Sheinbaum se reunió con Stefano Domenicali, presidente de la Fórmula 1, para hablar sobre el Gran Premio de México y una posible ampliación de contrato, el cual vence este año.

En la reunión estuvieron presentes Alejandro Soberón y Federico González Compeán, considerados como los principales organizadores de este evento en nuestro país.