Los Vikings superan a los Lions y los deja sin posibilidades de alcanzar la postemporada

La defensa de Minnesota fue determinante, al interceptar en par de ocasiones a Jared Goff
25/12/2025 18:30

La tarde de Navidad parecía inclinarse a favor de Detroit, pero los errores propios terminaron por marcar el rumbo del partido. Dos intercepciones de Jared Goff fueron determinantes para que los Vikings de Minnesota se impusieran 23-10 y se llevaran la victoria. El resultado fue un golpe duro para los Lions, que quedaron fuera de los playoffs, mientras que los Packers de Green Bay aseguró su lugar en la postemporada.

Más allá del marcador, el partido dejó un dato poco común: Minnesota ganó pese a registrar apenas tres yardas netas por pase. De acuerdo con Stathead, fue apenas la séptima ocasión desde 1940 en la que un equipo se impone con yardas aéreas netas negativas, algo que no ocurría desde 2006. Los Vikings no lograron pasar a terreno positivo en ese rubro sino hasta los últimos tres minutos del encuentro, lo que reflejó el desarrollo irregular del juego.

La primera mitad estuvo marcada por errores de ambos lados. Detroit perdió dos balones sueltos en los primeros minutos, uno de ellos tras un mal intercambio entre Goff y el centro en una tercera oportunidad corta, lo que dejó a Minnesota en una posición favorable. Los Vikings capitalizaron con una anotación por tierra de Aaron Jones Sr., aunque no lograron despegarse en el marcador. Antes del descanso, los Lions arriesgaron en cuarta oportunidad y empataron el encuentro con un pase de Goff a Isaac TeSlaa, dejando el 7-7 al medio tiempo.

Minnesota tuvo serias dificultades para mover el balón durante los dos primeros cuartos. Al descanso acumulaba -12 yardas netas por pase y apenas 36 yardas totales a la ofensiva, con varias posesiones que terminaron en despeje. Aun así, la falta de contundencia de Detroit mantuvo el partido cerrado, en un reflejo de las inconsistencias que han acompañado a ambos equipos durante la temporada.

El tercer cuarto fue decisivo. Goff lanzó intercepciones en series consecutivas y, aunque los Vikings solo avanzaron 27 yardas en sus siguientes dos ofensivas, consiguieron dos goles de campo largos para tomar ventaja. Más tarde, la presión defensiva volvió a surtir efecto: un golpe al mariscal provocó otro balón suelto que frenó cualquier intento de reacción de los Lions.

Detroit logró acercarse 13-10 con un gol de campo en el último cuarto, pero Minnesota encontró entonces su jugada más importante del partido. Jordan Addison tomó el balón en un jet sweep por la banda derecha y recorrió 65 yardas hasta la zona de anotación, sellando el resultado. El cierre fue acorde al resto del encuentro: otro error en el centro provocó una pérdida más de Detroit, que terminó con seis balones entregados, algo que no le ocurría desde 2015.

La defensa de los Vikings sostuvo el resultado y confirmó el rumbo de un partido marcado por fallas ofensivas. Ambos equipos quedaron con marca de 8-8 a falta de una semana, lejos de las expectativas que generaron la temporada anterior. En una liga donde el margen de error es mínimo, el duelo navideño fue un recordatorio de lo rápido que pueden cambiar las cosas en la NFL.