Amigo lector de Noroeste, el cuidado de su salud abarca varios factores, y todos estos el principal “actor” es usted. ¿Por qué?, veamos. Cuando se depende de otras personas (embarazo, primera infancia, preescolar y en algunas ocasiones el escolar), estas en su mayoría deciden el qué hacer, el qué comer, también en la actualidad la influencia de la mercadotecnia, ocurrencias de los políticos, etcétera, pero una influencia de su estado de salud, es la alimentación e hidratación. Las alteraciones metabólicas se pueden presentar a cualquier edad, pero después de la tercera década es más frecuente, en la actualidad con los cambios en el “modus vivendi”, este síndrome se presenta desde edades tempranas, por ejemplo, si se tiene un primer lugar es en la obesidad infantil, y en la de adultos también estamos en los primeros lugares, así que el estar “gordo” no quiere decir que es sano, ni el estar “delgado” es estar enfermo.
Para la actividad física como parte de las medidas para controlar del síndrome metabólico, se debe tener cuidado al indicar la carga física, para esto los componentes y principios de la condición física cardiorrespiratoria metabólica y desarrollo de la resistencia aeróbica se debe tomar en cuenta la especificidad del tipo de ejercicio, intensidad, duración y frecuencia, para esto se deben cumplir los siguientes principios: individualización del ejercicio, progresión y mantenimiento. Si a la persona a la que se le indica ejercicio para manejo metabólico, es indispensable que antes de iniciar un programa de acondicionamiento físico cardiorrespiratorio metabólica y/o músculo esquelética isotónica sea sometida a una batería de estudios clínicos que evalúen su estado de salud y los requisitos personalizados del estado de salud inicial.
Para el control de la intensidad en los programas de la actividad física en la población, uno de los protocolos que se usan para un pronóstico del estado físico de la persona es el uso de la fórmula de Karvonen/OMS para la frecuencia cardiaca máxima, esta es FCmax= 220 – edad. Existen infinidad de protocolos para ver la condición física inicial, como para el consumo máximo de oxígeno, todo protocolo va ser bien indicado, siempre y cuando se use el mismo protocolo en las evaluaciones posteriores, y de ser posible en las mismas condiciones físicas, material y espacio, recordemos que todo estudio (protocolo) solo es diagnóstico.
Beneficios del entrenamiento de la condición cardiorrespiratoria metabólica, cardiorrespiratoria, garantiza un sistema cardiorrespiratorio más eficiente y económico, con el desarrollo de una hipertrofia ventricular izquierda fisiológica y aumento del volumen cardíaco, en aquellos que poseen un elevado consumo máximo de oxígeno acompañado de un gasto cardíaco y volumen respiratorio minuto más poderoso y eficiente. Se caracteriza por un volumen sistólico mayor durante el estado de reposo, durante el esfuerzo y en la recuperación de las cargas, con una frecuencia cardiaca de reposo (basal) menor.
La actividad física no solo mejora a nivel metabólico, también lo hace a otros niveles. En lo metabólico, mejora el perfil sanguíneo integral, con una mayor captación de la glucosa a nivel celular, disminuyendo la resistencia tisular a la insulina, con una mayor captación de glucosa sanguínea, con una mejor economía de la insulina, también mejora los lípidos (buenos) en la sangre, disminuye triglicéridos, colesterol y acido úrico. Existe un aumento de la actividad mitocondrial y de las enzimas oxidativas. En las neuroinmunoendrocrinas, se produce en toda nuestra economía una adecuada estimulación y utilización de nuestras hormonas en condiciones del esfuerzo y en reposo, colaborando en los ajustes endocrino metabólicos y en las necesidades de ambos sexos, así como en los ajustes neuroinmunoendocrino.
En el sistema músculo esquelético, colabora en incrementar la fuerza muscular y la masa muscular. En la composición corporal, colabora en disminuir y mantener el peso corporal. Disminuye el porcentaje de grasa corporal e incrementa la masa corporal activa.
También hay mejoras digestivas, renales, psicológicas, lo que nos dice que la actividad física es la mejor medicina preventiva, además de mejorar la edad biológica funcional.