"15 años de ‘lanzar’ escritores celebra hoy el Premio Valladolid a las Letras"
Durante 15 años, el Premio Binacional Valladolid a las Letras ha impulsado a autores mexicanos, ofreciendo un galardón que consolida la vocación por la escritura. Este año celebra tres lustros de dar ejemplo a la iniciativa privada, que en México pocas veces ofrece de sus arcas, un apoyo económico de esta magnitud para el desarrollo de la literatura en el País y en Guatemala, países en donde se convoca a los escritores.
En una nación donde las mafias literarias han generado un ambiente de desconfianza entre los escritores y los reconocimientos, en general, son cuestionados y puestos en tela de duda, este premio destaca por la transparencia al seleccionar los textos ganadores.
Olga María Enciso, directora del Centro Cultural Multiversidad, una institución que vincula al Sistema Educativo Valladolid con la comunidad de Mazatlán, a través de la cultura, es la creadora de la idea de este galardón, su fundadora y junto con el director administrativo, sus principales promotores.
El reconocimiento cuenta con un consejo consultivo, integrado por ciudadanos mazatlecos vinculados con la cultura: el director del Instituto de Cultura de Mazatlán, Raúl Rico; el escritor Juan José Rodríguez, la cineasta Rosa Martha Fernández y la promotora de lectura, Laura Medina, encargados de sugerir los integrantes del jurado, que cada año debe cambiar.
Entre ellos están nombres importantes de la literatura nacional, como la gloria de las letras del norte de México, Daniel Sada (+), y el que fuera editor por muchos años de la sección cultural del periódico La Jornada, Braulio Peralta, actualmente es editor independiente.
El más importante crítico de literatura de México, Cristopher Domínguez, el enfant terrible de la literatura nacional, Antonio Ortuño, entre muchos otros nombres que le dan prestigio y transparencia a este reconocimiento literario.
“Desde el momento en que se gestó el premio, se pensó para que fuera un galardón que tuviera permanencia en el tiempo, que se institucionalizara, que se diera año tras año. Desde el primer momento, estuvimos conscientes de que tenía que tener calidad en todos los sentidos y que el espíritu le diera sentido, que lo distinguiera la transparencia, que los escritores confiaran en él”, explica Maru Enciso.
“En el momento en que el premio era solo una idea, había 13 colegios Valladolid, sobre todo en el norte de México, y queríamos echar a andar un proyecto para promover la lectura entre los alumnos del sistema. Primero pensamos en un concurso de narrativa intramuros”, recuerda.
Nace el premio
Los escritores José Luis Franco y Juan José Rodríguez sugirieron que creara un Premio Nacional de Literatura, que eso revelaría de una manera contundente el interés del Sistema Educativo Valladolid de promoverla junto con la lectura.
“Desde el primer momento, los asesores del premio fueron los escritores Juan José Rodríguez y José Luis Franco. Ellos nos convencieron de que lo hiciéramos a nivel nacional. Contamos con su ayuda, sus conexiones con el medio literario; nos conectaron con Difocur para que la convocatoria llegara a más lugares”, señala.
“El primer Premio Valladolid a las Letras se realizó en 2003. Llegaron 17 trabajos. En ese momento no había redes sociales y las convocatorias las publicamos en la prensa de las ciudades en donde había instalaciones del Colegio Valladolid; así se fue corriendo la voz y cada año fue creciendo el número de participantes”.
En 2006, para promover el recién inaugurado Colegio de Aguascalientes, esta ciudad fue la sede.
“Se declaró desierto el premio. En ese momento fue un balde de agua fría; a la distancia lo veo como algo positivo porque entendimos que la calidad es primero. A los dos años, el premio volvió a Mazatlán porque aquí había nacido”, destaca.
“José Luis Franco presentó un escrito al director general del Sistema Valladolid para que volviera el galardón al puerto. En el 2008, decidimos proteger el premio y darle transparencia, formando un Consejo consultivo ciudadano. Esto benefició enormemente al premio porque siempre hemos buscado la calidad, el prestigio y, sobre todo, la transparencia y la honestidad”.
Transparencia y equidad
El tiempo confirmó que la selección del jurado es determinante para prestigio del premio.
“Que el jurado este integrado por escritores, críticos, editores ha sido un factor determinante para que el premio esté en donde está en este momento. Los que participan tienen la confianza que alguien, que es experto en letras, es quién va a analizar, a seleccionar. Esos nombres generan confianza en los escritores que participan”, considera.
Muchas historias se han tejido alrededor del Premio, algunas tristes y la mayoría gozosas.
“Recuerdo que cuando íbamos a dar a conocer a los ganadores del 2011, era un 18 de noviembre; minutos antes de dar a conocer el ganador, nos avisaron que había muerto Daniel Sada, que ese año había sido presidente del jurado. Fue muy triste porque él creía fervientemente en la honestidad del premio”, confiesa.
“Siendo uno de los más importantes escritores de su generación, nos pidió participar como jurado por segundo año consecutivo. Su esposa nos dijo que aunque cayó enfermo, le pidió que lo ayudara a leer los trabajos y se mantuvo trabajando hasta el final. Eso fue muy conmovedor”.
Del editor Braulio Peralta también guarda buenos recuerdos y sigue en contacto con él.
“Con Braulio Peralta establecimos una relación entrañable; también se comprometió con el premio. Cuando él fue jurado, ganó una novela de terror llamada ‘Umbra’, de Raúl Godínez. Mantenemos contacto con él y siempre está pendiente de lo que sucede con el premio cada año”, reconoce.
“Al crítico de literatura Cristopher Domíguez, lo contactó Juan José Rodríguez. A nosotros nos pareció genial que estuviera con nosotros. Cuando un miembro del jurado acepta participar, inmediatamente hablo con ellos para que se suban a nuestro barco de sueños y ilusiones, que la literatura sea un renglón importante para la sociedad de México”.
En la FIL de Guadalajara
Cada año, el presidente del jurado es el que hace la cuarta de forros del libro ganador y es quién presenta el libro en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara.
“Mónica Lavín fue jurado cuando Braulio Peralta fue presidente. Con ella nos enlazamos entrañablemente, Alberto Chimal también tiene muchas simpatía por el premio, lo conoció cuando fue jurado Martín Solares. Cuando supo que iba a ser jurado, nos habló para que sacáramos un cuento de los participantes porque era de él; eso habla de la honestidad de los jurados”, aclara.
“Juan José Rodríguez fue jurado dos años y al tercero, me dijo que sus alumnos del taller literario, de los que conocía su estilo, estaban participando y no quería toparse con un trabajo de un alumno siendo jurado. Desde entonces no es jurado; siempre participa como parte del Consejo Consultivo del premio. El premio se ha consolidado por la transparencia con que es realizado, eso nos dio credibilidad y prestigio entre los escritores de México”.
La presentación del libro ganador en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara les provoca mucho entusiasmo a los ganadores.
“Decidimos entrar a la FIL porque sentimos un enorme compromiso con el premio. El nivel que ya alcanzó es para que esté en ligas mayores y la FIL significa eso. Quisimos darle esa plataforma a los creadores, varios de ellos me han externado que lo más atractivo del premio es que se presenta el libro en la Feria del libro de Guadalajara”, amplía.
“Nuestros ganadores son privilegiados porque vienen a Mazatlán a recibir el Premio y luego van a la FIL a presentarlo, les damos difusión a nivel nacional en los puntos en donde se distribuye la revista Multiversidad, además de entregarles un apoyo económico importante”.
LIBROS PREMIADOS
Cuento
2004 El juego de lucas, Vanessa Garnica
2005 El guapísimo insoportable, Rosa Margarita Ibarra
2006 Las alas de la sonrisa, Jose de Jesús Velasco
2007 El guardasecretos, Diana Elizabeth Garcidueñas
2008 Sopa de letras, Estela Alanís
2009 Código A.E.I.O.U., Carmen Lozano
2010 Gallompiro, Elman Trevizo
2011 La bruja de la calle Wan y otras historias, Juan Carlos Rea
2012 Mundo de colores, Maribel Nolasco
2013 El llavero, Luz María Dávila
2014 El misterio de la libreta, Susana Wein
2015 Me llaman tigre, Elizabeth Cruz Madrid
2016 Ábrase en noches de tormenta, Luis Antonio Rincón
2017 Seres de la noche, María Yvonne Cárdenas
2018 Los nuevos cuentos para tiempos nuevos, Virginia del Río
Novela
2004 Pero no vallas a enamorarte, Manuel Rochín
2005 Defensa de lo prohibido, Aleyda Rojo
2006 Declarada desierto
2007 Toco el violín para olvidar que soy mujer, Agustina Valenzuela
2008 Round de sombras, Mario Hinojos
2009 La Negra noche, Mauricio Carrera
2010 Vidas Baldías, Adriana Gracia
2011 El mar que nos espera, Herminio Martínez
2012 Ruega tres veces, Zita Barragán
2013 Umbra, Raúl Godínez
2014 The eternal land, Luis Gerardo Escobar
2015 Reciclajes, Alfredo Marko
2016 Alteración mental, Enrique Ezeta
2017 Permite que tus huesos se curen a la luz, Rogelio Pineda
2018 Voces en el espejo, Leonor Ramírez
“El premio Valladolid está dirigido a nuevos valores, a escritores que se atreven a poner en una competencia sus obras y las exponen al juicio del público, ese es un paso difícil para los que se dedican a las letras y no han publicado. Un premio que apoya a ese sector de creadores es la mejor manera de mantener la literatura viva. Es un aspecto de ese arte que muy pocos se han preocupado por darle espacio, apoyo y este premio viene a llenar ese vacio”.
Raúl Rico
Director del Instituto de Cultura

“Es muy sano y vivificador para el ambiente cultural de Mazatlán, que este puerto sea la sede de un premio promovido por una institución educativa que pertenece a la iniciativa privada, eso es muy importante porque en Sinaloa, este sector de la sociedad participa muy poco en el tema comunitario. Casi no hay en Sinaloa actividades culturales con este peso. Es un premio con un monto generoso que además hace lo que muchas editoriales no realizan, publicar el libro ganador y presentarlo en la FIL de Guadalajara”.
Juan José Rodríguez
Escritor

“Este Premio es muy importante para la literatura en México porque los ganadores son escritores nóveles, gente dedicada a las letras que han tenido pocas posibilidades de publicar; ganan personas que nunca habían pensado que podían obtener un galardón literario. El premio le da oportunidad a escritores que no creen en los premios”.
Laura Medina
Promotora de lectura