"El desamor, un demonio que acecha, llega al Teatro Ángela Peralta"

MAZATLÁN._ El desamor para Víctor Ruiz, creador de la obra coreográfica Anatomía del amor, es morir de una manera porque se va con esa emoción una fuerza vital que llega a su fin.

El detonante de la obra Anatomía del amor fue el poema Muerte sin fin, de José Gorostiza, una obra fundamental para las letras mexicanas.

Lo pagano y lo religioso están presentes en este poema que consigue enfrentar los dos conceptos, contraponerlos para preguntarse de dónde viene y a dónde va el ser humano, y lo que significa la muerte en ese universo de contradicciones y contrastes en el que vive inmerso el hombre.

Nasheli Buelna es la protagonista que le da vida a todos esos cuestionamientos que plantea Víctor Ruiz en su obra, la incuestionable capacidad interpretativa de la bailarina de flamenco y también graduada de la Escuela de Delfos.

Fue la ejecutante ideal para poder llevar a la escena una obra en la que la danza que surgió en el sur de España se conjugara con elementos de movimiento que se definen dentro del ámbito de la danza contemporánea, una disciplina que dominada plenamente Víctor Ruiz.

La estética resultante de la unión de estas dos formas de hacer danza es muy bella, la fuerza del flamenco permitió enriquecer el lenguaje de los movimientos contemporáneos.

La bata de cola le otorgó elegancia a las imágenes iniciales de la obra, la bailarina queda en ligueros y un bello corsé negro con el que desarrolló sus movimiento de piso, en la parte dominada por el lenguaje del contemporáneo

La escultura de San Isidro Labrador fue contenida en el corsé y el brasier de la bailarina, representando la imposibilidad de los hombres de deshacerse de los preceptos religiosos que han estado por siglos presentes entre los mexicanos.

Víctor Ruiz es miembro del Sistema Nacional de Creadores, una de las becas más ambicionadas por los artistas mexicanos con trayectoria, para este apoyo el codirector de Delfos propuso una investigación del movimiento del cuerpo a partir de disciplinas diferentes a la danza contemporánea.

El primer proyecto que desarrolló fue Arbolada, en el que su investigación de movimiento del cuerpo fue a partir de la danza folclórica, se lo propuso al gran gurú de la danza de las diferentes regiones de México, Rafael Zamarripa, que es el director del Ballet Folclórico de la Universidad de Colima, que recientemente tuvo un preestreno en la Universidad de Colima.

La obra de Víctor Ruiz se va a utilizar para la celebración del 35 aniversario del Ballet Folklórico de Colima en el Palacio de Bellas Artes de la Ciudad de México

Anatomía sobre el amor es el segundo proyecto del coreógrafo en el que investiga las posibilidades del flamenco utilizado como herramienta para trabajar poéticas a partir de una propuesta de danza contemporánea.

“Es una obra sobre el cuerpo, el amor, el desamor, la locura, las obsesiones, la pérdida de todos los valores y sobre todo de cómo estar bien contigo mismo, a pesar de haber pasado por el infierno del desamor para lograr de nuevo un equilibrio es necesario enfrentar tus propio demonios. La obra representa ese paso por el infierno y cómo la protagonista lo resuelve”, comentó el coreógrafo.