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Factor Humano

La institucionalización del mal

FACTOR HUMANO
04/10/2025 15:24

Hay verdades que toman tiempo entenderlas, más aún asimilarlas; algunas ya trastornaron al país, defender lo indefendible será peor. El país ya no aguanta.

Revelaciones insospechadas

Gracias a la presión de los EEUU, las revelaciones de la gigantesca red del contrabando de combustible nacional e internacional, y según comentan, de los nexos con las bandas de criminales ligados con los altos jerarcas del régimen actual y pasado, más las complicidades con el narco -muy conocidas en las regiones- provocan perplejidad y estupor por su magnitud e impacto ¿Cómo no nos dimos cuenta antes? ¿Cómo pararlo?

$!Camino a la tormenta.
Camino a la tormenta.

Esas verdades están trastornando el país que conocimos a uno que no terminamos de asimilar, por la profundidad de las raíces del mal que se sembró a diestra y siniestra en el sexenio pasado y desde antes; ahora la cizaña sembrada ha crecido y con ella la violencia se arraigó muy adentro: en las conciencias.

Pararla solo con una pax narca no bastará para impedir que sus ramas, como la delincuencia común se multiplique y siga organizándose, echando a perder a las siguientes generaciones. Algo muy serio que está ocurriendo.

El mal ejemplo cunde

Es decir, diario una gran mayoría se levanta a delinquir bajo la sombra del mal ejemplo del gobierno, y no bastará la cantidad de policías para impedirlo, además las policías “buenas” terminan volviéndose “malas”, salvo excepciones. Si quieres echar a perder a un país, permite que los delincuentes gobiernen y tengan todo el poder posible. Justo eso le pasó a Nicaragua y a Venezuela, su atraso es tal que no pueden impedir la bota de sus dictaduras encima de los ciudadanos rodeados de miseria. Perú ha tenido la valentía de sacudirse y encerrar a sus presidentes corruptos o que quisieron ser dictadores.

¿Un día histórico?

El día que en México caiga un expresidente ese día será histórico, pero no podemos decir ejemplar porque el poder suele usarse para debilitar al contrario y para someter a otros. Lo malo del poder político es alejarse de la justicia y del bien común, el poder se convirtió en el fin máximo que lo justifica todo, eso sí, simulando gobernar bien. Además es muy tentador manejar las arcas con todo el poder posible, y más aún poner a jueces a modo.

El poder bien usado, como al parecer Bukele lo hace, paró la delincuencia e hizo del Salvador un país seguro y convirtió las cárceles llenas en fábricas autosuficientes.

Lo malo es que lo malo se está borrando

Vale el juego de palabras. El actuar mal se está normalizando incluso en las familias comunes, me decía una empleada del área de juguetes del súper que frecuentemente los padres que traen a sus niños en el carrito les dan las cajitas a sus niños para que estos jueguen con ellos como si fuesen suyos y salen con ellos sin sus empaques sin pagarlos, el niño entiende así que robar no es malo, con el beneplácito de sus padres. El mal se ramificó, basta manejar por muchas carreteras del país para sufrir la violencia, pero ¿A quién no le ha tocado sufrirla en carne propia en cualquier lado desde hace mucho?

La sempiterna corrupción

La corrupción legendaria creció como una hiedra ahogando a la burocracia, al punto de dificultar e impedir la denuncia de los delitos y con ello aumentar la impunidad. Denunciar el robo de un vehículo es una odisea, peor es buscar a un desaparecido. Para decirlo en palabras claras: se premia a los delincuentes, por eso abundan y surgen como la mala hierba “y nunca se acaba” como “la cosecha de mujeres”, cada vez surgen más, pero más jóvenes. Con los niños no.

Confusión por el escándalo

La corrupción de la marina ha sido un escándalo, pero es un símbolo muy importante en la percepción civil ¿Quiénes son los buenos y quienes son los malos parta combatir el crimen y la delincuencia? Hay confusión y esta incertidumbre afecta muchas cosas: desordena las cosas, aleja las inversiones y la economía, refuerza el estado fallido, mina el prestigio militar, la credibilidad del gobierno y de la misma presidente. Un asunto serio.

La complicidad militar ayudó a que el poder político, el poder del narco y el poder militar se unieran como cómplices en las jerarquías. Es decir: todos los poderes involucrados. ¿Hasta qué nivel y quienes limpiarán esto sin salir raspados?

Mucha de la información revelada viene de la inteligencia del ejército que sigue investigando y de las revelaciones de Guacamaya Leaks. No todo el ejército ni toda la marina son cómplices, hay gente muy leal a la patria.

Demasiada información

Sin embargo, creemos que guardar silencio para no denunciar a los cómplices ya no es suficiente para garantizar su lealtad entre ellos; hay demasiada información de inteligencia interna, los EEUU con los grandes capos como testigos protegidos “saben demasiado” para saber quién es quién, sin necesidad de que el otro denuncie a sus cómplices al ser atrapado.

La tarea es moral

Llega un momento que de tanto simular, la simulación a nadie engaña, los hechos saltan a la vista revelando lo que se quería ocultar. A Peña le incriminaban que “no entiende que no entiende”. A este sexenio simular que aplica la justicia lo debilitará. Mientras, el país sigue ahogándose en la cizaña del mal, paremos esto por el bien de todos.