"Manolo Díaz habla de desamor y humor negro"

El director y actor sinaloense Manolo Díaz estrenó de manera virtual su monólogo “Un largo ensayo para una canción de cuatro acordes”, que presentó el Instituto de Cultura de Mazatlán en Facebook Cultura Tv.

Es una obra creada para ser vista a través de una pantalla y para el formato en que se presentó en la Casa Haas, se estrenó por redes, a través de las cuales el dramaturgo mostró una comedia de desamor, cargada de humor negro, en la que se acerca con inteligente ironía a las relaciones de pareja que la generación millennial está viviendo.

Su agudeza e ironía para el tratamiento de las relaciones en los seres humanos, en esta obra, se evidencia desde el título del monólogo.

Las letras de las canciones populares son sencillas para que sean accesibles para cualquier persona, su estructura musical también es elemental, muchas solo tienen cuatro acordes, con esto se mofa con una seductora e inteligente sonrisa de las baladas románticas del género pop, que son éxitos en grupos como Sin Bandera o el dueto Río Roma.

La obra narra la azarosa vida amorosa de un joven que ronda los 20 años y se dedica a componer letras y música de canciones románticas y que sueña fantasías como tener el éxito de Sin Bandera, Natalia Lafourcade o componer a la Banda MS.

Mientras eso sucede, narra las cómicas situaciones que vive con los parroquianos de los bares en donde canta, en algunos valoran sus composiciones, pero en la mayoría quiere que cante covers.

Su novia lo cortó y gracias a eso escribe de un jalón cinco canciones que le dan un éxito en el reducido círculo que lo rodea, lo aclaman en el bar y sueña con un reencuentro con el objeto de su amor, añora una reconciliación e inventa divertidas historias alrededor de esas situaciones.

Manolo Díaz tiene el termómetro, la sensibilidad para tomarle la temperatura al comportamiento de las nuevas generaciones y su manera de afrontar los problemas, al instalarlos en el escenario, el espectador ve como si fuera un espejo la realidad, eso consigue arrancar sonrisas de los espectadores.

Un largo ensayo para una canción de cuatro acordes es el divertido lamento de un joven que vive el desamor al estilo del tercer milenio.

Nuevamente Manolo Díaz acierta en su propuesta que consigue conectar con el público que logra verse reflejado en sus obras.

El dramaturgo no los decepciona, el público termina satisfecho cuando en sus casas, frente a sus computadoras o teléfonos, aplauden la propuesta virtual de teatro que ofrece este talentoso creador sinaloense.