"Desborda El David Aguilar su talento en Ciudades Hermanas en Mazatlán"
Su talento oscila entre el virtuosismo del manejo de la palabra y un oído que puede adaptarse a cualquier género musical, aunque se inclina por la cumbia, el country y el bosanova, pero igual puede crear a partir de la música de banda sinaloense con un toque de música de los balcanes, David Aguilar tiene el duende y desplego sus alas creativas sobre el Parque de las Ciudades Hermanas arropando los oídos y las emociones de las decenas que se acostaron sobre el pasto frente al mar.
En este concierto fueron pocos los que se acercaron, seguramente en el próximo la gente va a abarrotar, la originalidad de sus creaciones musicales y las letras de sus canciones seducen el oído y la inteligencia.
Se va a la esencia de la poesía para rescatar lo esencial de ella, el ritmo, su música, el juego con las palabras que divierte, retuerce su sintaxis para retar a la inteligencia, para que dance entre neuronas provocadas por la poesía hecha canción popular que danza con cadencia de cumbia o bosanova.
Su metáfora ingeniosa se sumerge en la profunda reflexión y emerge para flotar en la superficie emocionada, llegadora para flechar el corazón o la sonrisa o el intelecto.
Esos fueron los ingredientes con los que El David, como se le conoce en el mundillo de los cafes cantantes, cocino el concierto que ofreció el joven culiacanese de 35 años la noche del domingo en Mazatlán.
Había vivido feliz en el subsuelo de la música independiente entre bares, peñas y cafes cantantes, el es representante de la nueva canción mexicana,vivió en Mazatlán en donde compuso un disco de banda sinaloense, la música de viento de los años 40 que se llama Ventarrón en el que explota la vena de sonidos balcánico que tiene la música que tiene como meca a Mazatlán, desde hace mucho vive en la Ciudad de México.
Su vida artística cambiara con la nominación a cinco Grammy Latino 2018.
Las ingeniosas letras de sus canciones van del juego de palabras para describir el mundo de la bicicleta, la canción de protesta en donde aborda una crítica a la gente en el poder con una dosis de humor, luego pasa ha hacer un homenaje, el poeta aborda la vida entera.
En Mazatlán abrió su concierto con Lentejuelas, Embrujo, Eco una canción en donde el juego de palabras seduce el oido: Una mariposa posa/ sobre tu cabello bello/porque tu tardanza danza/ mientrasyo a cupido pido/ que entre mis compases/pases a dejar de hacer/ este hueco eco, eco, eco.
En ese tono transcurrieron Chispas al planetario, Meteorito, Era mi abuelo, Frente a tus ojos, Cumbia de la bicicleta, Desacreditación del poderoso, Desordenada canción la, Estatua, terminó con Libélula.
Los más jóvenes de los asistentes tararearon todas las canciones en una noche que se hizo mágica, hipnotica.
Siempre me ha interesado la poesía
David Aguilar
“Siempre me ha interesado la poesía , cuando era adolescente era muy aficionado a la poesía de Jaime Sabines y Mario Benedetti, luego entre a Neruda, Lorca, Paz, y pase a poetas como Juan Ramón Jimenez, Eliseo Diego y poeta más clavados como Borges, también poetas mexicanos como Villaurrutia, Efraín Huerta pero después regrese a Sabines”.
¿Juegas con el lenguaje, lo dominas, pero también lo reinventas?
“Si esa vena viene de una tradición mexicana que la trabajo con mucho ingenio Chava Flores, El Piporro, Jaime López, pero yo lo hago diferente, lo hago con reggea, jazz, blues, bosa nova, folk un poco de todo, yo la llamó canción libre, este estilo fue surgiendo de una manera fluida desde que empece”.
¿Que hiciste cuando viviste en Mazatlán?
“Compuse un disco de banda que se llama Ventarrón, es banda de los años 40con raiz balcanica”.
Recuadro
Canciones que interpretó David Aguilar
Lentejuelas
Embrujo
Chispas al planetario
Meteorito
Era mi abuelo
Frente a tus ojos
Los árboles
Cumbia de la bici
Desacreditación del poderoso
Desordenada canción la
Estatua
de largo vi pasar tus dedos
Eco
Libelula
El concierto de David Aguilar lo abrió Leida que canto:
A saber
Circular
María Revuelta
Por reirnos
Labios abiertos
al martesCuando soñaba
Cales de papel
Turbio el corazón
Anhelé