"Julio Preciado relata la que ha sido su experiencia más dolorosa"

Fernando Espinoza

MAZATLÁN._ En enero de este año, Julio Preciado se transplantó un riñón donado por su hija Yuliana, y aunque la operación fue todo un éxito, semanas después estuvo a punto de perder los testículos, debido a una infección.

El Gigante de la Banda recibió a Noroeste en la intimidad de su casa para dar una entrevista; al llegar, como a todas las personas que lo visitan en esta cuarentena, se pasa por un filtro de sanitización, pues aunque el artista ya se encuentra recuperado, tiene las defensas bajas por el medicamento y los problemas de salud a los que se ha enfrentado.

En el último par de años, Julio ha visitado el hospital en varias ocasiones, debido a una neumonía que casi le quita la vida, una trombosis y esta última vez, por un absceso en sus testículos, experiencia que calificó como la peor de todas.

“Empecé a tener un pequeño absceso debajo de los testículos, lo que llamamos aquí en México un nacido, y yo traía mis defensas muy bajas por los mismos medicamentos que te dan para que tu riñón no se dañe, ¿qué pasó?, que ese absceso me contaminó los dos testículos y me comenzaron a dar una fiebres tremendas, yo solo estuve un día aquí en Mazatlán después del transplante, ha sido una etapa, creo que la más dolorosa de toda mi vida”, recordó Julio Preciado.

Dice que aunque algunos medios afirmaron que fue internado por coronavirus, no fue así, pues al tener temperatura y principios de neumonía fue internado en la torre Covid de un hospital de Guadalajara y por protocolo le hicieron la prueba de este virus, misma que salió negativa.

Sin embargo, el coronavirus era lo que menos preocupó al cantante, pues dice que se puso a temblar cuando los médicos le dijeron que tendrían que amputarle los testículos pues estaban llenos de pus.

“Me dicen que posiblemente tendrían que cortarme los testículos, es uno de los golpes más fuertes que te puedas imaginar y yo les dije que no, que se buscaran el mejor urólogo de México, pero yo no iba a permitir que me cortaran mis testículos, no por lo que signifique o que te haga más o menos hombre, pero no lo concibo”.

Relató que el proceso fue muy difícil, pues estuvo 20 días con los testículos abiertos para limpiárselos diariamente, un proceso que ni la morfina le ayudaba a lidiar con el dolor. Afortunadamente todo salió de la mejor manera.

Aprovecha la cuarentena

Julio Preciado ha estado en cuarentena por más de seis meses, no como la gente común por la pandemia por coronavirus, en este tiempo se ha dedicado a estudiar italiano y hacer algunas cosas en la música.

“Prometí que en cuanto me recupere al 100 por ciento voy a visitar el Vaticano y por eso estoy estudiando italiano tres veces por semana, es un idioma más fácil de lo que pensaba, tengo un maestro de la UdeO y me está ayudando, es algo que quiero cumplir porque lo he estado dejando pasar y me di cuenta que uno tiene qué hacer las cosas de ya, porque no sabes cuánto tiempo nos quede”.

Agregó que este viernes hará una transmisión en vivo con Banda El Recodo, donde cantará algunas canciones, que servirá para calentar motores para la gira que se viene en conjunto, como reencuentro entre la banda y el cantante.

“Ya que pase todo esto, se viene la gira del reencuentro, es algo que ha pedido mucho la gente y yo estoy muy emocionado por volver a pisar el escenario con Banda El Recodo, no sabemos aún dónde y cuándo vamos a iniciar, pero el objetivo es hacer una gira por México y Estados Unidos”.

Finalizó diciendo que prepara un dueto con Raúl Hernández Jr. y otro joven más, para entrar a un estilo con acordeón y guitarras, pero más adelante dará los detalles.

Julio Preciado relata a Noroeste el proceso de salud más duro que ha vivido hasta el momento.