Plácido Domingo cautiva en el centenario de los Juegos Florales del Carnaval de Mazatlán
MAZATLÁN._ Una majestuosa velada de ópera se ofreció en el centenario de los Juegos Florales del Carnaval de Mazatlán.
Uno de los máximos exponentes del bel canto, el cantante español Plácido Domingo, en compañía de la soprano Eugenia Garza y el barítono Adán Pérez, ofreció un inolvidable concierto en el estadio Teodoro Mariscal.
La presentación, que enmarcó la coronación de Desiré I, Reina de los Juegos Florales del Carnaval Internacional de Mazatlán 2025, deleitó a los asistentes, quienes vivieron una velada histórica, llena de armonia y encanto.
La Orquesta Sinfónica de Sinaloa, la Camerata Mazatlán y el Ensamble Tradicional Mexicano, dirigidos por el maestro Sergio Freeman, así como el Coro Guillermo Sarabia y el Coro Ángela Peralta, completaron la mágica velada dedicada a las Bellas Artes.
Luego de escuchar melodías de ópera y zarzuela, como Carmen, Las hijas de Zebedero, El barbero de Sevilla, Los Gavilanes, La rosa de azafrán, El sembrador, Me llamabas Rafaylillo, Estrellita, entre otras, llegó el Mariachi Tradicional, que levantó al público de sus asientos.
Plácido Domingo, quien ha ofrecido conciertos de ópera en varios escenarios, como el Teatro Colón, la Ópera de Viena y el Teatro alla Scala, pisó la tierra de Venados y junto al mariachi entonó melodías emblemáticas muy mexicanas, entre ellas Cómo han pasado los años y ¿Quién será?.
El tenor vestido de charro y en compañía de sus co-estelares cerró con broche de oro la velada al ritmo de El son de la negra, Paloma querida; Me cansé de rogarle, de Pedro Infante, con lo que el respetable cantó al unísono junto a él.
El mazatleco Adán Pérez salió y acompañó al cantante ante el gusto de los presentes en la velada.
El barítono se quedó sobre el escenario para deleitar a los todavía presentes en el inmueble con gran maestría y talento al cantar Cien años.
La cereza del pastel fue cuando Plácido Domingo interpretó El Rey a todo pulmón junto a Adán Pérez y ambos coros.
Continuaron con la emblemática melodía Granada, pero ante la alegría y algarabía del público que les pedía otra canción, no dudaron en regresar al escenario para interpretar El Corrido de Mazatlán y cerrar la velada con El Sinaloense.
