Visitan hijos de Jenni Rivera lugar donde fue su accidente en Nuevo León

El apellido Rivera en el medio del espectáculo siempre ha estado envuelto en la polémica, en los chismes y rumores de los integrantes de la familia musical. Sin embargo Chiquis ha tratado de alejar esa imagen como sombra en sus hermanos, por lo que acompañada por ellos viajó a Nuevo León para algo emotivo.

Las cámaras de ‘Hoy Día’ entrevistaron a Rosendo Rodríguez, el dueño del terreno en el que se estrelló el avión en Iturbide Nuevo León, y quien además actuó como guía de los jóvenes hermanos durante su visita.

Fue hace 11 años que la conocida ‘Diva de la Banda’ falleció tras el desplome de su avión en las tierras regias, tras presentarse por última vez en la Arena Monterrey.

Según lo relatado por Rodríguez, comenzaron la caminata a las 11:20 de la mañana. Aunque pensó que ellos podrían enfrentar dificultades para completar la travesía debido a lo peligroso del camino y la densa vegetación, quedó sorprendido por su determinación para llegar, detalló vanguardia.com

”Pensamos que iban a batallar, pero no, son buenos para caminar, hicieron una hora con 30 minutos, porque Chiquis marcó con su teléfono”, comentó Rodríguez.

Explicó que durante la travesía, conversaban entre ellos y poco antes de llegar a la capilla, se detuvieron para hacer una oración en inglés. “Todo (transcurrió) muy bien, son muy sencillos”, añadió.

Además, los jóvenes experimentaron un momento emotivo, pues uno de los hijos varones de Jenni rompió en llanto. “Se tomaban de las manos. Hubo un hijo que lloraba mucho”, compartió el guía.

La cantante Jenni Rivera perdió la vida a los 43 años en un trágico accidente aéreo. El 9 de diciembre de 2012, la artista viajaría desde Monterrey, donde había ofrecido un concierto, hacia Toluca. Sin embargo, la comunicación con los radares se perdió poco después del despegue, y posteriormente se reveló que el Lear Jet 25, con matrícula N345MC, se había estrellado en la Sierra Madre Oriental, en el municipio de Iturbide, Nuevo León.

Desde entonces, sus cinco hijos, Jacqie, Chiquis, Mike, Jenicka y Johnny, han dedicado esfuerzos para preservar el legado y la memoria de su madre. Más recientemente, llevaron a cabo una expedición al cerro donde ocurrió el percance, buscando encontrar algún tipo de paz.