|
"Mazatlán"

"EVANGELIZACIÓN, EDUCACIÓN Y CULTURA: El paso del Señor por este mundo es una realidad"

"El momento es apremiante, pero se acerca la hora de nuestra liberación, esta Pascua deberá ser vivida de manera diferente"
30/03/2020

Padre Amador Campos Serrano

El paso del Señor por este mundo es una realidad, conllevando tanto el recuerdo del hecho histórico, como un memorial actual, bajo las circunstancias presentes en el diario vivir. Esto se realiza en la celebración del Misterio Pascual judeo-cristiano.

Fue en un ambiente de preocupación expectante, desde el interior de la vida familiar, cuando el pueblo elegido aguardaba el paso del Señor, en medio de dramáticos acontecimientos, en los cuales también estaba involucrado el pueblo egipcio.

Se daba así el inicio de una liturgia, con los elementos de la larga historia de la humanidad, la cual sería el símbolo de una ansiada liberación.

Celebrada como memorial de liberación, la Pascua judía, el paso del Señor liberador, consistiría en una cena con panes asimos y hierbas amargas, un símbolo de momentos difíciles, enfrentados como comunidad, celebrados en el seno familiar, siendo además un recordatorio de las situaciones vividas, reviviéndolas en un futuro, al encuentro con otros, viviendo una semejante realidad.

En la memoria colectiva de Israel, este hecho sería el recordado en la liturgia, a través de sus símbolos, alimentados con la escucha de las lecturas de los pasajes narrados en la Escritura de la Tora, en el libro de Éxodo.

En la celebración del Paso del Señor en la liturgia cristiana, Jesús, el nuevo Moisés, es quien retoma la celebración pascual, en el difícil y dramático momento de vivir la tragedia de la Pasión, expectante momento, tanto que el mismo Jesús dirige una súplica, pidiendo que, si era posible, fueran pasados por alto las circunstancias de esos momentos, pero aceptando la divina voluntad, exclama, “no se haga mi voluntad, sino la tuya”.

En la celebración litúrgica cristiana de la Pascua se reviven estos momentos, como memorial perpetuo, realizado en cada Eucaristía y desde los primeros siglos de la Iglesia, estos hechos son vividos en la llamada Semana Mayor o Semana Santa.

En los momentos actuales, la humanidad vive un drama que le hace volverse a sí misma, valorando la responsabilidad de sus actos, haciendo conciencia de las consecuencias emanadas de ellos y en un inusitado momento, cuya coincidencia enmarcada en el proyecto divino, se ve orillada a prescindir de, de manera comunitaria, de los actos litúrgicos de Semana Santa.

Pero esto no debe de incidir en una consciente privación de celebrar el paso del Señor en nuestra vida, en el aquí y ahora de nuestras actuales circunstancias.

En esta forzada reducción de las celebraciones cuaresmales y de la Semana Santa, se ha operado, además por las otras medidas tomadas de prevención, un sorprendente reencuentro con situaciones ya añoradas y el mismo Planeta ha experimentado un respiro ambiental, sin que nadie lo haya programado, abriéndose un rayo de esperanza sobre cuanto podríamos lograr, con tan solo tomar conciencia de nuestros actos.

En estas circunstancias, con todo, es también una oportunidad de encontrar un enriquecedor y diferente tono a la celebración del Paso del Señor, a pesar de las limitaciones, pues al reunirse de manera familiar en una sencilla liturgia, encabezada por el padre de familia, a la escucha de los pasajes bíblicos del Éxodo y de la institución de la Eucaristía, narrados por San Juan, se vivirá de una manera diferente, en espera de la celebración litúrgica comunitaria, que entonces también adquirirá un tono diferente.

El momento es apremiante, pero se acerca la hora de nuestra liberación, esta Pascua deberá ser vivida de manera diferente, como el memorial del Paso del Señor.

 

Periodismo ético, profesional y útil para ti.

Suscríbete y ayudanos a seguir
formando ciudadanos.


Suscríbete
Regístrate para leer nuestro artículo
Esto nos ayuda a identificarte mejor al poder ofrecerte información y servicios justo a tus necesidades al recibir ayuda de nuestros anunciantes.


¡Regístrate gratis!