|
"Columna semanal"

"Evangelización, Educación y Cultura: La capilla de Martín de Tours"

"Espacio de reflexión espiritual"
11/11/2018

Padre Amador Campos Serrano

Una urna expone una capa cortada a la mitad, según la tradición, esta fue usada por un joven militar llamado Martín, antes de su conversión. Es la capa usada por quien sería Martín de Tours. En latín, una media capa se dice capilla y, al estar expuesta en un pequeño lugar, fue causa del nacimiento del término capilla, usado para designar los pequeños templos usados para la oración.

Según narra la historia, el joven, siendo soldado de las legiones romanas, un día de invierno se encontró a un mendigo soportando el intenso frio y al no poder ofrecerle nada para cubrirse y atenuar el rigor del clima, en un instinto de generosidad, sacó su espada y cortó la mitad del su capa para dársela.

En la noche, entre sueños, tuvo una visión en donde se le presento Jesús diciéndole: “gracias, Martín porque hoy me cubriste con tu capa”. Este trozo de esta capa es venerado en la ciudad de Tours, donde después fue Obispo.

Martín nació en la ciudad de Sabaria en Panonia, en lo que hoy es Hungría, en el año 316. Su padre había emigrado a Italia para servir como militar al ejército romano; el joven Martín siguió sus pasos y a los 15 años ya pertenecía a las legiones romanas.

Después del episodio del mendigo, con quien Jesús se identificó, Martín cambio su vida renunciando al ejército para dedicarse a una vida de ascetismo, aunque no lo pudo hacer de inmediato, pues le fue negada la licencia por parte del emperador. Pasado un tiempo, se retiró, uniéndose a los discípulos de San Hilario de Poitiers, quien le confirió el bautismo.

En esta nueva vida, sirviendo al ejército de Jesús, como él decía, en una primera etapa se dedicó a la vida de contemplación, fundando dos monasterios. En la segunda etapa, dedicó su actividad al anuncio del Reino de Dios, convirtiéndose en el gran evangelizador de Francia.

Una vez ordenado sacerdote, la tradición nos dice que fue invitado a la ciudad de Tours con el pretexto de que ayudara a un enfermo y una vez ya estando ahí, el pueblo se congregó para aclamarlo como su Obispo. Martín se negó varias veces, pero ante la insistencia de la gente, se vio obligado a aceptar.

Finalmente, el 8 de noviembre de 397, falleció en la ciudad de Candes-Saint-Martín, Francia. Fue sepultado en la Basílica de San Martín de Tours y su festividad se celebra el día 11 de noviembre.

La popularidad de este santo creció de tal manera que incluso, en la santería, muchos lo asocian como protector de los juegos de azar o para hacer buenos negocios, sin embargo fue su gesto generoso lo que más lo debe de distinguir, así como su entrega como pastor al servicio de la Iglesia.

Llamado también Martín Caballero, ha sido adoptado por los comerciantes como su santo patrono, así mismo es el patrono de los militares y en algunos países como España, Hungría, Colombia, Argentina y México, varias de sus ciudades lo consideran también su santo patrono.

Periodismo ético, profesional y útil para ti.

Suscríbete y ayudanos a seguir
formando ciudadanos.


Suscríbete
Regístrate para leer nuestro artículo
Esto nos ayuda a identificarte mejor al poder ofrecerte información y servicios justo a tus necesidades al recibir ayuda de nuestros anunciantes.


¡Regístrate gratis!