Las criptomonedas se han convertido en los activos de inversión favoritos de muchas personas, no solo de aquellas que quieren generar ingresos en poco tiempo, sino también de quienes buscan alternativas al sistema financiero tradicional. Por este motivo, se han vuelto un aliado excepcional en los mercados emergentes.
A pesar de que sean útiles para democratizar el consumo y la inversión, especialmente en aquellos países que atraviesan una situación económica compleja, la realidad es que estos activos estarían creando un peligro latente para estos países, siendo posible que desestabilicen aún más la economía con el paso del tiempo.
Una amenaza latente
Así lo aseguró Tobias Adrian, consejero financiero del Fondo Monetario Internacional (FMI) y jefe de su departamento de mercados monetarios y de capital, explicando que en muchas economías en desarrollo se estaría utilizando criptomonedas para acelerar el flujo de capitales, con muchas personas “sacando” el dinero de estos países.
Tanto inversionistas internacionales como nacionales estarían utilizando estos activos para realizar grandes retiros de dinero cuando la economía se desestabiliza, algo más que usual en los mercados en desarrollo. Esto puede potenciar aún más la inestabilidad, y alargar el proceso de recuperación.
Esto se ha vuelto especialmente preeminente en aquellas naciones que están adoptando de lleno los activos digitales, como El Salvador, ya que apuestan la estabilidad de sus economías a activos poco regulados. En el caso de este país, que planearía recaudar $1 millardo mediante bonos vinculados al Bitcoin, es peligroso si se lleva a dar una fuga de capitales
Las criptomonedas en mercados emergentes
Las criptomonedas han calado en los mercados emergentes y en las economías en crisis ya que permiten la generación de retornos importantes a personas que no percibirían sueldos lo suficientemente altos como para cubrir los gastos esenciales.
A pesar de la volatilidad de estos activos, incluso se podrían utilizar para el ahorro en economías donde el valor de la moneda local cae de forma significativa y estable con el paso de los años. Ejemplos de esto pueden incluir a Venezuela, con una inflación que superó 1.500.000% en el 2018, o Argentina, cuya inflación pasó de 50% en el 2021.
En estos países incluso hemos visto personas que se dedican a jugar videojuegos relacionados al mercado de las criptomonedas para generar ingresos extra.
Ya que invertir en estos activos es mucho más sencillo que en otros mercados como el de valores o el inmobiliario, cada vez más personas estarían reservando tiempo y dinero para este tipo de inversiones. Las mismas pueden realizarse comprando y vendiendo directamente, minando, e incluso utilizando productos alternativos como los que ofrece como los que ofrece bitcoin trader.
Urgen nuevas regulaciones
El representante del FMI asegura que urge la creación de regulaciones homogéneas que funcionen de la misma manera en distintos territorios, algo que se ha propuesto desde hace varios años, pero que ha sido difícil de aplicar debido a las diferencias entre lo que los gobiernos perciben sobre estos activos.
La Unión Europea sería uno de los primeros cúmulos de países que habrían solicitado la creación de un marco regulatorio que delimite el funcionamiento de estos activos en toda la región, sin embargo, no se sabe qué tanto ha avanzado esta iniciativa en los últimos años, demostrando que el proceso podría tomar varios años.
La creación de una regulación global, o al menos regional, tiene el potencial de mitigar los riesgos que implica la adopción de estos activos, así como generalizar los beneficios que estos pueden traer al sistema financiero, al desarrollo económico de las naciones y a los usuarios individuales.

