Bernardo Arévalo jura como Presidente de Guatemala, tras tumultuosa sesión parlamentaria

Bernardo Arévalo de León asumió la madrugada de este lunes la Presidencia de Guatemala, tras una atropellada jornada en el Congreso de dicho país centroamericano.

“Sí, juro”, dijo con la mano izquierda en la Constitución y la derecha alzada, al ser investido por el nuevo presidente del Poder Legislativo, Samuel Pérez Álvarez, miembro de su partido Movimiento Semilla.

“Nunca más el autoritarismo”, proclamó el nuevo Presidente de Guatemala, inmediatamente después de ser investido como Jefe de Estado del país centroamericano, tras un tormentoso proceso de transición en el que el Ministerio Público y algunos parlamentarios de la Legislatura que acababa de terminar, intentaron impedir que asumiera el cargo, en el Teatro Nacional.

En una inédita sesión parlamentaria, que retrasó la investidura de Arévalo de León por más de ocho horas, los diputados de la anterior y nueva legislatura se enfrascaron en discusiones y votaciones a favor y en contra de la minoritaria bancada del sociólogo de 65 años de edad.

“El pueblo de Guatemala ha demostrado su sabiduría, e instituciones como la Corte de Constitucionalidad y el Tribunal Supremo Electoral han protegido el deseo soberano de los guatemaltecos de vivir en democracia”, dijo Arévalo de León en su primer discurso como presidente.

El Mandatario guatemalteco recibió la banda presidencial de manos de Pérez Álvarez, elegido también en el cargo el 15 de enero, debido a que el Presidente saliente, Alejandro Eduardo Giammattei Falla, se ausentó de la ceremonia, argumentando que debía entregar su cargo a más tardar antes de la medianoche del 14 de enero. Por ello envió al Congreso los símbolos de la Presidencia, por medio de su secretaria.

En su primer discurso como Mandatario, Arévalo de León recordó que su Gabinete estaba compuesto, por primera vez en la historia, con siete mujeres y siete hombres, además de que reiteró su compromiso con la igualdad de género.

El gobernante también valoró la importancia de los migrantes y dijo que pretendía hacerlos parte de las decisiones a futuro de la nación centroamericana. Arévalo de León también puso como prioridades de sus cuatro años de mandato a la educación, la salud, el medioambiente y el desarrollo de la población.

El Presidente guatemalteco también agradeció al Tribunal Supremo Electoral y a la Corte Constitucional de dicho país centroamericano, por ser “instituciones fundamentales” que “protegieron el deseo soberano de los guatemaltecos”.

Ante el retraso de la juramentación de Arévalo de Léon, varias delegaciones internacionales tuvieron que abandonar el país, como fue el caso del Rey Felipe VI de España y el Presidente chileno Gabriel Boric Font.

El retraso en los procesos provocó que las delegaciones internacionales se alinearan a favor de Arévalo de León. Representantes de países como Colombia, Honduras, Costa Rica y Estados Unidos, así como la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea, hicieron declaraciones en apoyo al nuevo mandatario.

“Aquí en Guatemala, aún el Congreso de la República no se pone de acuerdo para elegir su junta directiva que es la que tiene que posesionar al presidente Bernardo Arévalo”, compartió, en su cuenta de la red social X, Gustavo Petro Urrego, Mandatario colombiano, quien se encontraba en Guatemala.

“La Fiscalía, como en Perú, como en Colombia, ha tenido una actitud adversa a la presidencia e incluso ha intentado poner presa a la vicepresidente elegida por el pueblo”, agregó el Presidente colombiano.

Por su parte, la Mandataria hondureña, Iris Xiomara Castro Sarmiento, hizo un llamado similar. “El pueblo y los poderes del estado de Guatemala deben respaldar al presidente”, indicó también en X, antes Twitter.

Además, Luis Leonardo Almagro Lemes, secretario general de la OEA, leyó ante varios medios una declaración conjunta, flanqueado por algunas de las delegaciones que visitaron el país centroamericano.

“Hacemos un llamado al Congreso de la República a cumplir con su mandato constitucional de entregar el poder como exige la Constitución en el día de hoy al presidente electo Bernardo Arévalo y la vicepresidenta electa Karin Herrera [...] El pueblo guatemalteco expresó su voluntad democrática en elecciones justas, libres y transparentes avaladas por la comunidad internacional”, dijo Almagro Lemes.

El también ex diplomático y filósofo pasó inesperadamente en junio de 2023 a la segunda ronda presidencial, con una candidata conservadora aliada del oficialismo, Sandra Julieta Torres Casanova, ex Primera dama de Guatemala, del 14 de enero de 2008 al 7 de abril de 2011, en la Presidencia de su esposo Álvaro Colom Caballeros-, a quien venció cómodamente con un 60.9 por ciento de los votos.

Desde entonces, Arévalo de León y su partido, el Movimiento Semilla, enfrentaron una ofensiva judicial que él denunció como un “golpe de Estado”, detrás del que estaría la élite política y económica que por décadas ha regido los destinos del país.

La Fiscal General de la República de Guatemala intentó retirarle la inmunidad de presidente electo, desarticular su partido progresista y anular los comicios, argumentando que hubo anomalías electorales.

Mientras que Arévalo de León señaló en concreto a la fiscal general María Consuelo Porras Argueta, como responsable. Además le pidió que dimitiera después de que ordenara allanar el Tribunal Supremo Electoral, alegando presuntas anomalías en los comicios que él ganó.

Porras Argueta fue incluida por el Gobierno de Estados Unidos, en una lista de actores corruptos y antidemocráticos por su polémica gestión, pero contó con el apoyo del presidente saliente Giammattei Falla.

Antes de la juramentación de Arévalo de León y tras horas de debates, el Congreso saliente declaró independientes a los 23 diputados de Movimiento Semilla, argumentando que obedecía la orden judicial que suspendió temporalmente al partido, por supuestas irregularidades en su creación, en 2017.

Pero en un giro inesperado, luego de instalado el nuevo Parlamento, el Movimiento Semilla logró, junto con otros partidos políticos, que se revirtiera dicha decisión. Recuperaron su bancada y, aún más, la Presidencia del Congreso.

“Felicidades presidente”, escribió Arévalo de León, en la red social X, al celebrar la elección de Pérez Álvarez, de 31 años, como jefe parlamentario. “¡Sí se pudo!”, coreaban otros cientos de simpatizantes del nuevo mandatario guatemalteco, en las afueras de la sede del Congreso del país centroamericano.